El rey em¨¦rito cumple dos a?os expatriado y sin planes de regreso
La infanta Cristina y algunos nietos visitan a Juan Carlos I en el segundo aniversario de su salida de Espa?a
El Rey em¨¦rito abandon¨® este martes la lujosa villa donde reside, en la selecta isla Nurai (Emiratos ?rabes Unidos), para comer en un restaurante en compa?¨ªa de su hija menor, la infanta Cristina, y de algunos de sus nietos. Esta vez, seg¨²n fuentes del entorno de Juan Carlos I, no estaba su hija Elena, que le visit¨® hace pocos d¨ªas. Las dos hermanas se turnan para acompa?ar a su padre y aliviarle de la dolencia que m¨¢s le pesa: la soledad. La visita habr¨¢ servido para hacerle m¨¢s llevadero el segundo aniversario de su salida de Espa?a, el 3 de agosto de 2020, con el objetivo de evitar mayores da?os al prestigio de la Corona.
Cuando decidi¨® trasladarse, ¡°en estos momentos, fuera de Espa?a¡±, como dec¨ªa la misiva que dirigi¨® a su hijo Felipe VI, pensaba que su ausencia ser¨ªa breve, apenas unas vacaciones estivales prolongadas con retorno a finales de septiembre, cuando se esperaba que quedaran despejados los nubarrones de su horizonte judicial. Sin embargo, las investigaciones abiertas por la fiscal¨ªa del Supremo se fueron demorando y pasaron 20 meses hasta que, en marzo de 2022, el Ministerio P¨²blico decidi¨® archivarlas; no porque no hubiera constatado la existencia de delito, sino porque la inmunidad de Juan Carlos I mientras fue jefe del Estado le blindaba ante cualquier acusaci¨®n. En realidad, las dos regularizaciones ante Hacienda que, por valor de 678.393 euros y 4,4 millones respectivamente, hab¨ªa realizado su abogado supon¨ªan un reconocimiento impl¨ªcito de que el anterior jefe del Estado cometi¨® fraude fiscal. Tres meses antes, en diciembre de 2021, la Fiscal¨ªa suiza ya se hab¨ªa adelantado a dar carpetazo a la investigaci¨®n sobre el origen de los 65 millones de euros que el rey saud¨ª entreg¨® al Monarca espa?ol y este acab¨® transfiriendo a su amante Corinna Larsen.
La desaparici¨®n de la espada de Damocles que pend¨ªa sobre el rey em¨¦rito pareci¨® despejar el camino para su regreso, pero el primer ensayo result¨® un fiasco. ¡°El show que se ha montado no se puede volver repetir¡±, aseguran fuentes del entorno de Juan Carlos I que le dijo su hijo durante la conversaci¨®n que ambos mantuvieron el 23 de mayo en La Zarzuela.
El anterior Jefe del Estado hab¨ªa llegado a Sanxenxo (Pontevedra), la misma localidad donde pas¨® su ¨²ltima noche en Espa?a antes de salir hacia Abu Dabi, el jueves 19. Ven¨ªa a pasar el fin de semana en casa de su amigo Pedro Campos y participar en las regatas preparatorias del campeonato del mundo de vela de la clase 6MR, que gan¨® a bordo del velero Brib¨®n en Finlandia en 2019. Sin embargo, su visita se convirti¨® en un espect¨¢culo televisivo, con transmisiones en directo cada vez que llegaba o sal¨ªa del puerto deportivo. Frente a un Gobierno que le ped¨ªa que diese explicaciones por haber cometido fraude fiscal, el rey em¨¦rito contest¨® a los periodistas: ¡°Explicaciones ?de qu¨¦?¡±. Lejos de mostrar arrepentimiento, se le ve¨ªa encantado de reencontrarse con sus amigos y disfrutar de un fin de semana practicando una de sus aficiones favoritas.
Fuentes pr¨®ximas a Juan Carlos I aseguran que el programa de su visita se acord¨®, punto por punto, con la Casa del Rey; incluido el pol¨¦mico hecho de que fuera primero a Sanxenxo y solo despu¨¦s acudiera a Madrid para reunirse con su hijo. Una de las condiciones que m¨¢s complicaron su estancia fue precisamente el veto a que el rey em¨¦rito pernoctase en La Zarzuela, con el argumento de que esta no solo es la residencia de la Familia Real sino tambi¨¦n la sede de la Jefatura del Estado.
Las mismas fuentes admiten que hasta ¨²ltima hora Juan Carlos I no confirm¨® que viajar¨ªa a Espa?a a bordo de un jet privado, un Gulfstream G-450 fletado a una compa?¨ªa angole?a, lo que acentu¨® la imagen de que vive como un potentado, aunque sea a costa del mandatario de Emiratos, el jeque Mohamed Bin Zayeb.
La consecuencia inmediata de la primera visita del rey em¨¦rito fue la suspensi¨®n de la segunda, prevista para dos semanas despu¨¦s ¡ªcon motivo de la celebraci¨®n de la copa del mundo de vela de la misma categor¨ªa¡ª, tambi¨¦n en Sanxenxo, y el aplazamiento sine die de cualquier plan de retorno.
Las fuentes consultadas aseguran que Juan Carlos I est¨¢ bien de salud ¡ªcon los achaques propios de sus 84 a?os y sus problemas cr¨®nicos de movilidad¡ª y se ha acomodado a residir en el Golfo. Otras causas le aconsejan guardar la distancia: la investigaci¨®n fiscal abierta por Hacienda, a¨²n con cabos sueltos: y la demanda civil planteada en Londres por Corinna Larsen, que busca una indemnizaci¨®n millonaria.
En la carta que remiti¨® a su hijo en marzo pasado dec¨ªa que hab¨ªa decidido mantener su residencia ¡°permanente y estable¡± en Abu Dabi, aunque viajar¨ªa ¡°con frecuencia¡± a Espa?a. De momento, con menos frecuencia de lo que esperaba.
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