Canarias cifra en unos 1.000 los migrantes muertos en el mar en lo que va de a?o y alerta de la precariedad de las embarcaciones
El ritmo de llegadas a las islas desciende, pero las traves¨ªas se hacen en condiciones cada vez peores, lo que provoca que crezca el n¨²mero de fallecidos
La ruta migratoria canaria muta. Se frena el n¨²mero de llegadas, pero resulta cada vez m¨¢s letal. El Gobierno de Canarias calcula que la cifra de fallecidos y desaparecidos podr¨ªa estar ya en torno a las 1.000 personas ya, seg¨²n explica Txema Santana, asesor de la vicepresidencia del Gobierno canario, que avisa: ¡°Todav¨ªa falta la ¨¦poca m¨¢s dura del a?o¡±. Este n¨²mero de muertes supone un empeoramiento de la situaci¨®n en el ?frica Occidental. La cifra casi iguala la registrada durante todo el a?o pasado, periodo en el que perdieron la vida 1.109 personas en el intento de llegar a Canarias, seg¨²n los datos que recopila Missing Migrants (migrantes desaparecidos), la agencia de Naciones Unidas dedicada a documentar las muertes y desapariciones de personas migrantes a destinos internacionales. Y eso, a pesar de que, seg¨²n el Ministerio de Interior, el n¨²mero de embarcaciones que arribaron a las costas canarias hasta el 31 de agosto ha retrocedido en un 3,3%.
El Gobierno de las islas muestra una ¡°preocupaci¨®n elevada¡± ante esta situaci¨®n, seg¨²n se?al¨® el martes el portavoz del Ejecutivo y consejero de Administraciones P¨²blicas y Seguridad, Julio P¨¦rez. No en vano, las personas que se lanzan al mar lo hacen en condiciones cada vez m¨¢s precarias.
En las traves¨ªas que se inician este a?o predominan las lanchas neum¨¢ticas ¡ªlas pateras y los cayucos han desaparecido pr¨¢cticamente de la ruta¡ª, que resultan mucho m¨¢s peligrosas. Estas barcas no solo no est¨¢n preparadas para salir a alta mar y a menudo est¨¢n recauchutadas, sino que, adem¨¢s, soportan un pasaje desmedido. No en vano, pese a que el n¨²mero de embarcaciones ha ca¨ªdo, las personas llegadas ha crecido en un 14,9%.
Lo endeble de estas neum¨¢ticas hace que el grueso de embarcaciones se concentre en los ¨²ltimos meses en los trayectos ¡°cortos¡±, desde Marruecos y el norte del S¨¢hara a Lanzarote y Fuerteventura, islas que concentran ya m¨¢s del 53% de las llegadas, seg¨²n los c¨¢lculos de Cruz Roja recogidos por Efe. Estos datos confirman que el ritmo de llegadas ha registrado una notable disminuci¨®n. Hasta marzo de 2022, las personas desembarcadas crec¨ªan del orden del 134% respecto a 2021, seg¨²n los datos del Ministerio de Interior, tasa que contrasta con el 14,4% actual. ¡°Hay un claro decrecimiento de la intensidad de llegadas¡±, recalca Santana. ¡°Rabat vigila m¨¢s, hostiga m¨¢s, detiene m¨¢s en tierra, sobre todo porque antes casi no hac¨ªa nada pese a los acuerdos existentes¡±. Pese a todo, han salido al menos unas 11.000 personas de Marruecos hacia Espa?a en lo que va de a?o, seg¨²n Interior. ¡°Pero s¨ª ha habido un cambio de actitud¡±, afirma este responsable del Gobierno canario. Los esfuerzos marroqu¨ªes cuentan, a su vez, con financiaci¨®n europea. Bruselas ultima un paquete de al menos 500 millones de euros con los que se cubrir¨¢n parte de los esfuerzos del Gobierno marroqu¨ª para contener la inmigraci¨®n irregular. Este nuevo marco de financiaci¨®n, que cubre el periodo 2021-2027, supera casi en un 50% los 343 millones del anterior.
Salidas
La mayor parte de salidas desde que se reactiv¨® la ruta canaria en 2019 se produc¨ªa desde Dajla (S¨¢hara Occidental), Mauritania o Senegal, lo que provocaba que Gran Canaria fuese la principal isla receptora de la inmigraci¨®n irregular. Esta circunstancia, y la escasa preparaci¨®n en la isla ante ese repunte, fue la que provoc¨® hacinamientos como el que se vivi¨® en el verano de 2020 en el muelle de Arguinegu¨ªn (en el municipio de Mog¨¢n, al suroeste de la isla), donde se llegaron a hacinar al aire libre casi 2.000 personas. Ahora, las salidas notificadas a las autoridades espa?olas en los ¨²ltimos meses proceden de una franja de costa que va desde Tan-Tan (Marruecos) hasta Bojador (S¨¢hara), sobre todo en el entorno de dos ciudades: El Aai¨²n y Tarfaya, las m¨¢s pr¨®ximas a Fuerteventura y Lanzarote (apenas unos 100 kil¨®metros en su franja m¨¢s cercana), islas que las neum¨¢ticas pueden alcanzar en 24 o 36 horas, si no sufren percances.
Seg¨²n los datos de Cruz Roja que recoge Efe, en 2020 ambas islas representaban juntas solo el 9,86% del tr¨¢fico; en 2021 subieron al 46,2%, ya por encima de Gran Canaria; y en este momento suman ya m¨¢s de la mitad de las entradas (53,34%). El ¨²ltimo episodio se produjo este martes, cuando Salvamento Mar¨ªtimo rescat¨® dos embarcaciones neum¨¢ticas que transportaban en total a 66 migrantes en aguas cercanas a las dos islas.
El Gobierno central puso en marcha un Centro de Atenci¨®n Temporal de Extranjeros (CATE) en Arrecife (Lanzarote) de 200 plazas para atender a los migrantes, el cual, junto a los traslados a territorio peninsular, est¨¢ permitiendo que no se produzcan los colapsos que s¨ª se produjeron en Gran Canaria en 2020. Esta circunstancia no ha evitado momentos puntuales de saturaci¨®n, como la que se registr¨® durante el mes de agosto, cuando arribaron a las islas, seg¨²n Interior, 1.048 personas. Entre estas llegadas se produjo la de una embarcaci¨®n en la que fallecieron una mujer y una ni?a de cuatro a?os.
Julio P¨¦rez explic¨® en su comparecencia del martes que la mayor parte de los inmigrantes que llegan siguen siendo subsaharianos (sobre todo de Mal¨ª, Senegal y Costa de Marfil) y que el n¨²mero de mujeres y menores es ¡°significativo¡± (aproximadamente un 28%, seg¨²n Santana). El portavoz augura que la inmigraci¨®n procedente de ?frica se mantendr¨¢ debido a la situaci¨®n en el Sahel, e insiste en reclamar una respuesta de la UE al fen¨®meno migratorio. ¡°Si realmente quieren desactivar las mafias y a los Estados que usan los fen¨®menos migratorios para lograr beneficios pol¨ªticos¡±, completa en este sentido el asesor del Gobierno canario, ¡°la Uni¨®n Europea ha de habitar v¨ªas legales seguras y accesibles para las personas¡±.
Desv¨ªo de la inmigraci¨®n desde el norte de Marruecos hacia el sur
Marruecos guarda silencio oficial sobre los movimientos de inmigraci¨®n irregular desde su costa atl¨¢ntica en direcci¨®n a las islas Canarias, pero la prensa marroqu¨ª ha reproducido con detalle en los ¨²ltimos d¨ªas datos aireados en Espa?a por el Ministerio del Interior. Hasta agosto de este a?o, el desembarco de inmigrantes en pateras y cayucos ha aumentado un 15% respecto al mismo periodo de 2021, esto es, 1.400 ahora m¨¢s sobre los algo 10.600 contabilizados entonces.
Los medios de comunicaci¨®n consultados en Rabat destacan, no obstante, que la tendencia de incremento se ha frenado radicalmente, despu¨¦s de que el a?o pasado se disparara hasta un 115%. Tambi¨¦n, se?alan, se ha observado la llegada de un menor n¨²mero de embarcaciones. El vuelco coincide en el tiempo con el acercamiento diplom¨¢tico entre Rabat y Madrid tras el giro del Gobierno espa?ol sobre su tradicional posici¨®n en pro del plan de autodeterminaci¨®n de la ONU para el S¨¢hara Occidental, ahora expresada en favor de la propuesta de autonom¨ªa hist¨®ricamente defendida por Marruecos.
¡°En tiempos recientes hemos constatado un desv¨ªo de la inmigraci¨®n desde el norte de Marruecos hacia el sur. Las autoridades marroqu¨ªes han expulsado tanto a marroqu¨ªes como a subsaharianos hacia otras zonas¡±, precisa Jadiya Inani, responsable de migraciones de la ONG Asociaci¨®n Marroqu¨ª de Derechos Humanos (AMDH). El a?o pasado se produjo un bum de llegadas tras el patr¨®n por el estallido inicial de la pandemia, a lo que se ha a?adido el problema, seg¨²n la AMDH, de que muchos inmigrantes subsaharianos regularizados en Marruecos a partir de 2014 han perdido sus medios de vida y no han podido renovar los permisos de residencia.
¡°Por eso muchos de ellos se han decidido partir hacia las Canarias, a pesar de que se trata de una ruta mucho m¨¢s peligrosa que la del Mediterr¨¢neo y de que solo cuentan con embarcaciones rudimentarias no aptas para navegar por el Atl¨¢ntico¡±, advierte esta experta. Inani considera que el proceso de reconciliaci¨®n entre Marruecos y Espa?a ¡°ha devuelto a Rabat su papel de gendarme, como hemos visto en los enclaves de Ceuta y Melilla¡±.
La responsable de la ONG marroqu¨ª sostiene que los inmigrantes ¡°saben bien que cuando se registra un nuevo acercamiento se produce un endurecimiento en los controles de fronteras, con muchas m¨¢s dificultades para solicitar asilo en ambas orillas del Mediterr¨¢neo¡±. ¡°Desgraciadamente, en la ruta de las Canarias se registran muchas m¨¢s v¨ªctimas que en otras v¨ªas de inmigraci¨®n clandestina¡±, reconoce.
A todas las tribulaciones que sufren en Marruecos quienes se embarcan con riesgo de su vida para afrontar un periplo de un centenar de kil¨®metros por el oc¨¦ano, se a?ade la falta de protecci¨®n efectiva para el derecho de asilo. ¡°El sistema no funciona¡±, denuncia Jadiya Inani. ¡°No hay una legislaci¨®n para regular el asilo y los medios que dedica la Administraci¨®n son muy limitados. El Estado no reconoce tampoco los documentos otorgados por el ACNUR (la agencia de Naciones Unidas para los refugiados)¡±, concluye antes de advertir del peligro de que el creciente clima de desprotecci¨®n de los migrantes ¡°les fuerce cada vez m¨¢s a intentar huir hacia Europa¡±.
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