Interior compra cerca de 60.000 pelotas de goma en pleno debate parlamentario sobre su prohibici¨®n

El Ministerio del Interior ha comprado ya o iniciado los tr¨¢mites para hacerlo 58.630 pelotas de goma para reponer las existencias de las unidades antidisturbios de la Polic¨ªa Nacional y la Guardia Civil. Las adquisiciones se han producido en los diez ¨²ltimos meses, coincidiendo con la negociaci¨®n que los socios de investidura mantienen en el Congreso para reformar la ley de seguridad ciudadana, la conocida como ley mordaza, y que tiene como uno de sus principales escollos, precisamente, la exigencia de varios grupos parlamentarios de prohibir el uso de este material antidisturbios. Los polic¨ªas ya han mostrado su rechazo a su retirada porque consideran que ello ¡°supondr¨ªa una p¨¦rdida operativa¡± para los agentes cuando deben hacer frente a altercados callejeros violentos. Un informe de junio de 2021 de la asociaci¨®n catalana de defensa de los derechos humanos Iridia asegura que, entre los a?os 2000 y 2020, hubo 26 personas ¡°afectadas¡± por el impacto directo de pelotas de goma. De ellas, una, el seguidor del Athletic de Bilbao ??igo Cabacas, falleci¨®. Otras 15 sufrieron la inutilizaci¨®n o p¨¦rdida de un ¨®rgano, la mayor¨ªa del globo ocular.

Las compras se han hecho en tres partidas. La primera, materializada el pasado 15 de diciembre, supuso la adquisici¨®n de 8.330 de las denominadas formalmente ¡°pelotas de caucho¡± para la Guardia Civil por 18.143 euros, IVA incluido. La segunda se realiz¨® en abril pasado. La Polic¨ªa Nacional compr¨® entonces 11.300 unidades por 12.169 euros. Finalmente, la pasada semana, Interior inici¨® el tr¨¢mite para adquirir la partida m¨¢s numerosa: 39.000 pelotas de goma por las que tiene previsto desembolsar cerca de 71.000 euros. Entre medias, tambi¨¦n ha licitado la compra de 780.000 cartuchos utilizados para lanzar tanto estos proyectiles como botes de humo y de gas lacrim¨®geno. En los expedientes para la adquisici¨®n de todo este material, Interior justifica las compras en la necesidad de que las unidades policiales dispongan ¡°de una serie de medios que les permitan hacer frente a concretos incidentes susceptibles de comprometer la paz p¨²blica y la seguridad ciudadana¡±.

En la memoria justificativa para adquirir la ¨²ltima partida, que tiene fecha de finales de junio, el ministerio auguraba que durante la cumbre de la OTAN en Madrid que entonces a¨²n no se hab¨ªa celebrado ¨Dtuvo lugar entre el 28 y el 30 de ese mes¨D podr¨ªan registrarse incidentes protagonizados por colectivos antisistema que obligar¨ªan a los agentes a usar este material antidisturbios para ¡°proteger la integridad f¨ªsica y los derechos individuales, el mobiliario urbano y la propiedad privada¡±, lo que podr¨ªa suponer una reducci¨®n ¡°considerable¡± de las reservas de este material. Aunque el encuentro de mandatarios se sald¨® sin incidentes destacados ni detenidos y, por tanto, sin que la polic¨ªa tuviera que utilizar material antidisturbios, Interior ha mantenido el concurso y el pasado 5 de septiembre hac¨ªa p¨²blica la licitaci¨®n.

Las pelotas de goma, seg¨²n las prescripciones t¨¦cnicas del concurso, deben ser de caucho, pesar entre 80 y 85 gramos y tener un di¨¢metro de 5,4 cent¨ªmetros. Fuentes de Interior aseguran que se trata de compras ¡°rutinarias¡± para reemplazar las pelotas de goma que se usan ¨D¡±se gasta mucho en ejercicios de entrenamientos¡±¨D o que han caducado. ¡°Es material con una vida ¨²til bastante corta y hay que reponerlo para que no suponga un peligro para las personas¡±, se?alan antes de asegurar que, por ejemplo, la partida adquirida por la Polic¨ªa Nacional este a?o es menor que otros.

Sin embargo, estas compras son criticadas por tres de los grupos parlamentarios con los que el grupo parlamentario socialista est¨¢ manteniendo reuniones desde hace meses para acordar la reforma de la ley mordaza. Fuentes de ERC ¨Dque ya en un documento de abril inclu¨ªa la eliminaci¨®n de las pelotas de goma como una exigencia para que sus 13 diputados votaran a favor de la reforma¨D consideran que la adquisici¨®n no es ¡°para nada una buena noticia. Aunque el marco actual contemple el uso legal de estos objetos, seguro que el Ministerio [del Interior] tiene mecanismos para buscar alternativas¡±. En la misma l¨ªnea se manifiesta Jon I?arritu, diputado de EH Bildu, quien recuerda que las pelotas de goma siguen siendo ¡°una l¨ªnea roja¡± que puede decantar el voto de su grupo a favor o en contra de la reforma.

Proyectiles de ¡®foam¡¯

Tambi¨¦n cr¨ªtico se muestra Josep Pag¨¨s, de Junts, que interpreta la adquisici¨®n como ¡°un mensaje claro sobre cu¨¢l es la voluntad del Gobierno respecto a la reforma de la ley mordaza¡±. Pag¨¨s recuerda que, en Catalu?a, los Mossos d¡¯Esquadra tienen prohibida, desde 2014, su utilizaci¨®n y emplean en su lugar proyectiles de foam, un material que no rebota y se deforman al impactar por lo que supuestamente es meno lesivo. Tambi¨¦n los usan la Ertzaintza y la Polic¨ªa Foral de Navarra.

Unidas Podemos, socio de Gobierno del PSOE, aboga tambi¨¦n por la desaparici¨®n de las pelotas de goma, pero ¡°en un per¨ªodo transitorio corto de tiempo que d¨¦ margen a las Fuerzas de Seguridad para dotarse de nuevos medios de actuaci¨®n con los que se elimine cualquier posibilidad de que se puedan causar da?os irreversibles a las personas¡±. El PSOE, sin embargo, quiere limitar su uso, pero rechaza su prohibici¨®n. Ante las cr¨ªticas, las fuentes de Interior recalcan que ¡°no se puede condicionar la gesti¨®n t¨¦cnica de un ministerio a expectativas a futuro de modificaci¨®n [legislativa]¡±, en referencia a su eliminaci¨®n de la futura ley de seguridad ciudadana.

Por su parte, fuentes policiales consideran que existen protocolos que garantizan el buen uso de este material. Jacinto Morales, representante del Sindicato Unificado de Polic¨ªa (SUP) en las Unidades de Intervenci¨®n Policial (UIP, los conocidos popularmente como antidisturbios), a?ade que los agentes de estas unidades reciben formaci¨®n precisa sobre c¨®mo utilizar el material antidisturbios. E insiste en que las pelotas de goma son ¡°imprescindibles en aquellos disturbios que por su gravedad se aconseje la utilizaci¨®n de un medio disuasorio activo. Algunos pa¨ªses han retirado las pelotas de caucho, pero usan balas de goma, m¨¢s peligrosas, y gases lacrim¨®genos. Sustituir las pelotas por alguno de estos elementos nos parece un cambio a peor¡±, a?ade.