La Audiencia Nacional da luz verde a la expulsi¨®n de dos l¨ªderes isl¨¢micos a los que apoya el Parlament

La Audiencia Nacional no ha aceptado la petici¨®n de Mohamed Badaoui y Amarrouch Azbir, acusados de amenazar la seguridad de Espa?a, de paralizar cautelarmente su deportaci¨®n a Marruecos. Los dos l¨ªderes de la comunidad isl¨¢mica en Catalu?a fueron detenidos el martes, despu¨¦s de que el secretario de Estado de Seguridad diese luz verde al expediente de expulsi¨®n incoado por la Polic¨ªa Nacional, cuya Comisar¨ªa General de Informaci¨®n los acusa de haber disparado el radicalismo en Tarragona con su ¡°discurso proyihadista¡±. El Parlamento catal¨¢n ha expresado su apoyo a los dos afectados.

El tribunal argumenta que, entre los intereses en conflicto, prevalece la seguridad nacional ante los de car¨¢cter personal, laboral y social alegados por los dos afectados. Y cita para ello, en el caso de Badaoui, el informe de la Comisar¨ªa General de Informaci¨®n, que se?ala su ¡°radicalismo ideol¨®gico¡±, sus postulados ¡°proyihadistas¡± y asegura que es uno de los principales referentes en Espa?a ¡°del salafismo m¨¢s ortodoxo¡±. Tambi¨¦n indica que lo predica entre colectivos especialmente vulnerables, como los menores no acompa?ados. Ambos han denunciado judicialmente la decisi¨®n administrativa, que seguir¨¢ su curso con ellos ya en Marruecos.

Los dos referentes isl¨¢micos fueron detenidos el martes, cerca de las cinco de la tarde, en Reus (Tarragona) y Vilanova i la Geltr¨² (Barcelona), respectivamente. Dos meses antes, se les hab¨ªa notificado el expediente de expulsi¨®n, que recurrieron. Badaoui, de 40 a?os, lleva en Espa?a 30, adonde lleg¨® desde Marruecos y se asent¨® con sus padres en la zona de Tarragona. Azbir, de 41 a?os, lleva 22 a?os en Espa?a. Ambos tienen familia e hijos, los dos pidieron la nacionalidad espa?ola que les denegaron y los dos han estado vinculados a mezquitas en el radar de los servicios de informaci¨®n por sus discursos salafistas.

Badaoui fue portavoz de As-Sunnah, en Reus, que dej¨® para presidir la Asociaci¨®n por la defensa de los derechos de la comunidad musulmana (Adedcom). Azbir vive en Vilanova i la Geltr¨², donde trabaja como barrendero, y es el presidente de la mezquita Al Furkan, pol¨¦mica por su vinculaci¨®n en el pasado con el terrorismo. Ambos han negado que sean una amenaza para la seguridad nacional y atribuyen la expulsi¨®n a su defensa de los derechos leg¨ªtimos de la comunidad isl¨¢mica en Catalu?a.

¡°Hemos presentado una queja al defensor del pueblo¡±, asegura Ivan Aybar, abogado de los l¨ªderes. El letrado critica que ¨²nicamente pudo comunicarse con sus clientes el mismo martes, cuando le llamaron desde la comisar¨ªa de la Polic¨ªa Nacional de La Verneda, en Barcelona. ¡°Desde entonces, no sabemos nada de nada¡±, lamenta, y se?ala la angustia de sus familias. ¡°Es un sufrimiento insoportable e impropio de un estado de derecho¡±, arremete Aybar. La deportaci¨®n, con la luz verde de la Audiencia, puede ser inmediata. El abogado tambi¨¦n se plantea presentar una querella por el trato que dispensado a sus clientes.

La decisi¨®n de la Audiencia Nacional supone la deportaci¨®n a Marruecos de los dos hombres, con la prohibici¨®n de regresar a Espa?a por un periodo de 10 a?os. El proceso judicial seguir¨¢ su camino, aunque hayan sido expulsados a su pa¨ªs de nacimiento. En el caso de que finalmente el tribunal les diese la raz¨®n y considerase infundado el expediente de expulsi¨®n, podr¨ªan regresar a Espa?a, donde dejan su familia, trabajos estables y, en el caso de Badaoui, una relaci¨®n continua con las administraciones y diversos partidos pol¨ªticos, como cara visible de la asociaci¨®n que preside.

Las entidades isl¨¢micas critican la elecci¨®n de la v¨ªa administrativa para expulsarlos. ¡°Si han infringido las normas, que se les abra un procedimiento judicial. En uno administrativo, eres incapaz de defenderte. Ese es el problema¡±, lament¨® a este diario el presidente de la Uni¨® de Comunitats Isl¨¤miques de Catalunya (Ucidcat), Mohamed El Ghaidouni. Una opini¨®n compartida por Farid Khattouti, secretario de la mezquita de Reus de la que Badaoui fue portavoz hasta 2020. Considera que ese tipo ¨®rdenes trasladan la idea de que ¡°las personas m¨¢s influyentes o que m¨¢s se ven¡± son las que luego se arriesgan a ser expulsadas.

Fuentes policiales destacan como un elemento clave la denegaci¨®n de la nacionalidad espa?ola, requisito indispensable para presentarse a las elecciones generales. En el caso de Badaoui, la polic¨ªa le atribu¨ªa una voluntad de dedicarse a la pol¨ªtica, algo que ¨¦l niega. Fuentes vinculadas a los servicios de informaci¨®n aseguran que uno de los grandes temores es que se logre vertebrar en Espa?a una opci¨®n pol¨ªtica salafista. Badaoui ha logrado una defensa cerrada de su persona, con el apoyo de la junta de portavoces de Reus, incluido el PSC. Tambi¨¦n de la del Parlament, que ayer aprob¨® una declaraci¨®n en la que solidarizaba con Badaoui y denunciaba un ¡°caso de represi¨®n pol¨ªtica e islamofobia por parte del Estado¡±, firmado por ERC, la CUP, JxCAt y En Com¨² Podem.