La coalici¨®n del Gobierno intenta evitar un nuevo frente con la ¡®ley del solo s¨ª es s¨ª¡¯
S¨¢nchez evita criticar una de las normas estrella de Unidas Podemos y opta por esperar a que los tribunales fijen un criterio sobre las rebajas de penas a agresores sexuales de menores
La gira asi¨¢tica le est¨¢ resultando a Pedro S¨¢nchez tanto o m¨¢s turbulenta en los asuntos dom¨¦sticos que a Alberto N¨²?ez Feij¨®o su reciente viaje por Am¨¦rica Latina. El l¨ªder del PP puso un oc¨¦ano de por medio mientras le arreciaban las cr¨ªticas tras su portazo a la renovaci¨®n del Poder Judicial, tiempo que Isabel D¨ªaz Ayuso acapar¨® para reemplazarle y confrontar con La Moncloa mientras trataba de desviar la atenci¨®n del colapso de la sanidad p¨²blica madrile?a. Al presidente del Gobierno no le ha ido mucho mejor los ¨²ltimos d¨ªas. Los frentes dentro y fuera de la coalici¨®n del Gobierno se le acumulan a S¨¢nchez, que ya acud¨ªa a la cumbre del G-20 en Indonesia y a la visita oficial a Corea del Sur en plena tormenta pol¨ªtica con la oposici¨®n por la reforma del delito de sedici¨®n. La ambig¨¹edad del presidente con la posible modificaci¨®n de la malversaci¨®n en el C¨®digo Penal, sin aclarar si beneficiar¨ªa a condenados por corrupci¨®n que no se hayan enriquecido personalmente, ha abierto otra espita que en el mismo PSOE no saben c¨®mo interpretar. La reducci¨®n de penas a agresores sexuales de menores en aplicaci¨®n de la Ley de Garant¨ªa de la Libertad Sexual o ley del solo s¨ª es s¨ª, en vigor desde el 7 de octubre, ha cogido desprevenido al Gobierno en un asunto de alt¨ªsimo voltaje al ser una cuesti¨®n muy sensible que afecta a ni?os y por tratarse de una de las grandes leyes de los ministerios gestionados por Unidas Podemos.
La reacci¨®n del PSOE ha sido la de apelar a la prudencia y esperar a conocer los criterios de interpretaci¨®n que est¨¢n siguiendo los tribunales, pese al malestar cada vez m¨¢s extendido entre los socialistas despu¨¦s de que la ministra de Igualdad, Irene Montero, acusara a los jueces de ¡°machismo¡± por ¡°incumplir¡± la nueva norma. Yolanda D¨ªaz, en una l¨ªnea m¨¢s pr¨®xima a la de los socialistas, fue m¨¢s conciliadora: ¡°Toca ser prudentes. El objetivo y el esp¨ªritu de esta ley siempre ha estado claro. Tenemos que analizar el recorrido judicial para sacar las conclusiones m¨¢s adecuadas para cumplir con su objetivo: garantizar los derechos y las libertades de todas las mujeres¡±, dijo a este peri¨®dico la vicepresidenta y ministra de Trabajo.
Las diferentes reacciones del PSOE evidencian el grado de nerviosismo y de incertidumbre en el principal partido del Gobierno por los efectos que tendr¨ªa un posible vac¨ªo legal en la norma. El presidente del Gobierno la defendi¨® el mi¨¦rcoles rotundamente, mientras varias ministras abrieron la puerta a revisar los aspectos jur¨ªdicos que se requieran ante el goteo de revisiones de penas a la baja. S¨¢nchez, en cambio, eludi¨® cualquier autocr¨ªtica, enfriando la posibilidad de revisar la ley en este momento. El presidente insisti¨® en que esperar¨¢ a conocer la jurisprudencia que se siente al respecto antes de decidir ¡°qu¨¦ pasos dar¡±. ¡°Corresponde a los tribunales, a la Fiscal¨ªa, el unificar esa doctrina. Esperemos a que los tribunales unifiquen la doctrina para extraer conclusiones¡±, afirm¨® en Nusa Dua (Bali), al tiempo que reiteraba que la ¡°voluntad del poder ejecutivo y del poder legislativo [al aprobar esta ley] fue claramente reforzar la seguridad de las mujeres¡±.
¡°Lo que se ha hecho ha sido identificar cualquier tipo de delito sexual como una agresi¨®n sexual, para que haya penas m¨¢s agravadas¡±, enfatiz¨® S¨¢nchez, que considera que se trata de ¡°una ley de vanguardia que va a inspirar otras muchas leyes en el mundo¡±. Sin embargo, el Consejo General del Poder Judicial ya advirti¨® de la potencial revisi¨®n de penas a la baja antes de que se aprobara la norma, un extremo que la ministra de Igualdad siempre neg¨®. ¡°Todav¨ªa no se conoce una sola reducci¨®n de penas. Y no se va a conocer¡±, lleg¨® a asegurar Montero en una comparecencia en el Congreso. ¡°De lo que alertaba el Poder Judicial y cumplimos con lo que dec¨ªa era de no rebajar las penas m¨¢ximas, nadie pudo pensar que si se bajaban las m¨ªnimas, eso pod¨ªa conllevar reducciones de las penas¡±, insisti¨® el mi¨¦rcoles por la noche en la Cadena SER. La dirigente de Podemos mantuvo que la ley est¨¢ ¡°bien redactada¡± y lo que hay es ¡°un problema de la aplicaci¨®n y de interpretaci¨®n¡± de la nueva norma ¡°por la falta de la perspectiva de g¨¦nero¡± de los magistrados. ¡°Ojal¨¢ haya un error y una posibilidad de mejora y se resuelva con eso¡±, asever¨® Montero, que asegur¨® que ¡°si hubiera un error [en su formulaci¨®n] ser¨ªa la primera en reconocerlo¡±. ¡°Como ha dicho el presidente, lo que haremos ser¨¢ confiar en que se unifiquen los criterios¡±, abund¨® tras conocer las declaraciones de S¨¢nchez, con el que reconoci¨® que no ha hablado con motivo de esta crisis.
Al contrario de lo que hizo la v¨ªspera la ministra de Hacienda y vicesecretaria general del PSOE, Mar¨ªa Jes¨²s Montero, el presidente no solo no se abri¨® a la posibilidad de cambiar el texto sino que le pas¨® la pelota a los tribunales y a la Fiscal¨ªa, confiando en que la jurisprudencia marque la interpretaci¨®n correcta de la norma. S¨¢nchez evit¨®, por tanto, cualquier cr¨ªtica a una de las medidas estrella de Unidas Podemos, su socio de coalici¨®n, en un momento en el que los partidos del Ejecutivo acusan el desgaste acumulado por la gesti¨®n de la pandemia y de las secuelas de la guerra de Ucrania.
La ministra de Educaci¨®n y portavoz del PSOE, Pilar Alegr¨ªa, observ¨® que ¡°si hay que hacer alg¨²n cambio para conseguir un respaldo mucho m¨¢s s¨®lido hacia las v¨ªctimas, habr¨¢ que abordarlo¡±. La ministra de Defensa, Margarita Robles, que adem¨¢s es magistrada y ha sido miembro del Tribunal Supremo, evit¨® pronunciarse sobre la ley hasta poder leer las resoluciones judiciales que han motivado las rebajas de condenas, pero s¨ª hizo una defensa ac¨¦rrima de los togados tras las cr¨ªticas de la ministra de Igualdad: ¡°Son jueces formados que aplican la ley. Las descalificaciones a los jueces no me gustan ni las comparto, nunca me van a encontrar en una descalificaci¨®n a los jueces espa?oles sino todo lo contrario¡±. Dirigentes socialistas recordaron las acusaciones veladas de machismo en marzo de 2020, d¨ªas antes de la declaraci¨®n del estado de alarma por la covid, que el entonces vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, profiri¨® contra el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, al entender que estaba bloqueando la futura ley de libertad sexual con ¡±excusas t¨¦cnicas¡±.
Fuentes del Ministerio de Justicia insisten en que hasta que no conozcan en detalle las motivaciones de las resoluciones que han rebajado las condenas a varios agresores sexuales de menores no podr¨¢n realizar una valoraci¨®n fundamentada. Esto es, que se esperar¨¢ a que los tribunales unifiquen la doctrina para extraer conclusiones. Pero el revuelo en el PSOE era cada vez mayor.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano Garc¨ªa-Page, apremi¨® a revisar la norma ¡°cuanto antes mejor¡± y reproch¨® a los responsables de Podemos su ¡°soberbia ideol¨®gica¡±. ¡°Los errores no siempre son de los dem¨¢s. Si hay problemas de matiz, de una coma, de una tilde, conviene pon¨¦rsela, cuanto antes mejor, con humildad, con normalidad, nadie discute el fondo¡±, remarc¨® el bar¨®n socialista. ¡°El problema no est¨¢ en la ley, est¨¢ en la justicia. Los jueces no pueden suplantar al legislador interpretando lo que no dice la ley. Hay que hacer pedagog¨ªa y reforzar la formaci¨®n en violencia machista en la justicia¡±, discrep¨® Jaume Asens, presidente del grupo de Unidas Podemos en el Congreso y referente de los comunes.
El PP no quiso desaprovechar la agitaci¨®n y discrepancias dentro de los partidos que forman la coalici¨®n y pidi¨® al Gobierno la ¡°inmediata revisi¨®n¡± de la norma. Su portavoz en el Senado, Javier Maroto, anunci¨® una moci¨®n urgente en la C¨¢mara alta para forzar al Ejecutivo a abordar cambios en el texto y, adem¨¢s, provocar que todos los grupos parlamentarios fijen su postura en un asunto tan delicado, informa Elsa Garc¨ªa de Blas.
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