Espa?a elevar¨¢ a la categor¨ªa de embajador a su encargado de Negocios en Venezuela
Exteriores quiere normalizar las relaciones con el r¨¦gimen de Maduro poniendo fin a un vac¨ªo diplom¨¢tico de m¨¢s de dos a?os
Espa?a volver¨¢ a tener embajador en Venezuela despu¨¦s de m¨¢s de dos a?os en los que el m¨¢ximo representante de Espa?a en Caracas ha sido un encargado de Negocios, un segundo nivel en la escala diplom¨¢tica. El Ministerio de Asuntos Exteriores estudia, seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas, plantear al Consejo de Ministros, ¨²nico organismo capacitado para hacerlo, elevar a la categor¨ªa de embajador al actual encargado de Negocios, Ram¨®n Santos. La decisi¨®n responder¨ªa, seg¨²n las mismas fuentes, a la nueva din¨¢mica abierta por la reanudaci¨®n de las negociaciones en M¨¦xico entre el r¨¦gimen de Nicol¨¢s Maduro y la oposici¨®n, suspendidas desde octubre de 2021.
Espa?a no tiene embajador en Caracas desde que, en noviembre de 2020, ces¨® en el cargo el diplom¨¢tico Jes¨²s Silva, quien prest¨® protecci¨®n en su residencia oficial al l¨ªder opositor Leopoldo L¨®pez. Le sustituy¨® Juan Fern¨¢ndez Trigo, exembajador en Cuba, pero como encargado de Negocios, lo que no requer¨ªa pedir el pl¨¢cet ni presentar credenciales al presidente venezolano, Nicol¨¢s Maduro. Con este gesto, Espa?a dejaba patente que, como el resto de la comunidad internacional, no reconoc¨ªa la legitimidad de Maduro como jefe del Estado, dado el car¨¢cter fraudulento de las elecciones de 2018, mientras que respaldaba al denominado presidente encargado, Juan Guaid¨®, designado por la Asamblea de Venezuela, controlada por la oposici¨®n. Cuando Fern¨¢ndez Trigo fue nombrado secretario de Estado para Iberoam¨¦rica, en julio de 2021, le sustituy¨® Ram¨®n Santos, tambi¨¦n como encargado de Negocios, aunque Exteriores s¨ª pidi¨® en su caso el pl¨¢cet de Maduro, sin estar obligado a ello.
Ahora el ministro de Asuntos Exteriores, Jos¨¦ Manuel Albares, considera que, si la decisi¨®n de retirar al embajador tuvo sentido en su momento como forma de presionar al Gobierno venezolano para que negociara con la oposici¨®n, ya ha dejado de tenerlo; pues por un lado limita la capacidad de interlocuci¨®n de la legaci¨®n espa?ola en Caracas y por otro el di¨¢logo que se buscaba ya se ha abierto.
En una entrevista con EL PA?S, publicada el pasado d¨ªa 26, Albares se?alaba que la retirada del embajador ¡°fue un gesto pol¨ªtico que se tom¨® para propiciar unas condiciones determinadas. Si esas condiciones, que son las del di¨¢logo entre venezolanos, que ellos tomen en sus manos su destino y decidan la mejor forma de avanzar por la senda democr¨¢tica, se producen¡±, a?ad¨ªa, ¡°por supuesto que es una decisi¨®n perfectamente susceptible de revertirse. Espa?a no quiere verse sin embajador en un pa¨ªs hermano de Am¨¦rica Latina, ni en Venezuela, ni en ning¨²n otro¡±. Preguntado por qu¨¦ se?al deber¨ªa dar el r¨¦gimen de Maduro para que se normalizaran plenamente las relaciones diplom¨¢ticas, Albares respond¨ªa: ¡°Que el di¨¢logo arranque, tal y como est¨¢ dise?ado en M¨¦xico, ser¨ªa una muy buena se?al¡±.
El mismo d¨ªa en que se publicaba la entrevista, las delegaciones del r¨¦gimen chavista y la oposici¨®n reanudan las conversaciones en M¨¦xico, con el anuncio de un acuerdo, negociado en secreto durante los meses anteriores, para desbloquear al menos 3.000 millones de d¨®lares del Estado venezolano, depositados en bancos extranjeros, con el objetivo de destinarlos a un programa de ayuda humanitaria a la poblaci¨®n controlado, al menos en parte, por la ONU. En paralelo, la Administraci¨®n Biden anunciaba un levantamiento parcial de las sanciones a Caracas al otorgar una licencia temporal a la petrolera Chevron para volver a operar en el pa¨ªs, mientras se mantienen las sanciones a Rusia e Ir¨¢n. El 11 de noviembre, el jefe de la diplomacia espa?ola se hab¨ªa reunido con los negociadores del oficialismo y la oposici¨®n de Venezuela en la Embajada de Espa?a en Par¨ªs y les hab¨ªa ofrecido los buenos oficios del Gobierno de S¨¢nchez para facilitar la negociaci¨®n.
La plena normalizaci¨®n de relaciones diplom¨¢ticas con el r¨¦gimen de Maduro no es, sin embargo, un asunto pacifico en la UE. La mayor¨ªa de los pa¨ªses europeos y el propio Servicio de Acci¨®n Exterior de la Uni¨®n han degradado a la condici¨®n de encargado de Negocios a su representante en Caracas a medida que lo iban relevando a partir de las elecciones de 2018. La excepci¨®n ha sido Francia, que no ha cambiado a su embajador en estos a?os y ha obviado el problema de por qui¨¦n sustituirlo; y Portugal, que en marzo pasado nombr¨® embajador en Venezuela. La televisi¨®n oficialista transmiti¨® la presentaci¨®n de cartas credenciales del nuevo embajador luso ante Maduro como un espaldarazo diplom¨¢tico.
Fuentes comunitarias aseguran que no existe consenso entre los pa¨ªses de la UE para normalizar relaciones con Caracas, dada la frontal oposici¨®n de pa¨ªses como Alemania y Holanda. La duda es si Espa?a actuar¨¢ como adelantada en un camino que a medio plazo acabar¨¢n transitando los dem¨¢s pa¨ªses europeos o si se quedar¨¢ aislada en un asunto, la pol¨ªtica hacia Am¨¦rica Latina, en el que ha sido el referente pol¨ªtico de Europa. Los expertos consideran que depender¨¢, en buena medida, del rumbo de las negociaciones de M¨¦xico que, una vez acordados los temas humanitarios, han entrado ahora en el hueso: las condiciones para la celebraci¨®n de unas elecciones realmente libres y transparentes, previstas para 2024.
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