Cuando defender a los trabajadores equival¨ªa a la pena por matar de 40 pu?aladas

Esta semana, la Audiencia Provincial de Sevilla conden¨® a 20 a?os de prisi¨®n a un hombre por matar a otro de 40 pu?aladas. En 1973, el Tribunal de Orden P¨²blico impuso esa misma pena, la m¨¢s alta de su historia, a Marcelino Camacho y Eduardo Saborido por el delito de ¡°asociaci¨®n il¨ªcita¡±. Eran, junto a Nicol¨¢s Sartorius, Paco Garc¨ªa Salve, Juan Mu?iz Zapico, Fernando Soto Mart¨ªn, Paco Acosta, Miguel ?ngel Zamora Ant¨®n, Pedro Santiesteban y Luis Fern¨¢ndez Costilla, la c¨²pula de Comisiones Obreras, entonces sindicato clandestino. Las alt¨ªsimas condenas del llamado Proceso 1001 (162 a?os de prisi¨®n para diez dirigentes sindicales), fueron, seg¨²n ha recordado este jueves Sartorius, ¡°uno de los actos de represi¨®n m¨¢s brutales de la dictadura contra los pac¨ªficos representantes de los trabajadores¡±. El R¨¦gimen se revolv¨ªa, en sus estertores, contra la oposici¨®n democr¨¢tica. ¡°Quer¨ªan dar un escarmiento al movimiento estudiantil, vecinal y sindical¡±, ha explicado el l¨ªder de CC OO, Unai Sordo, ¡°pero la estrategia acab¨® volvi¨¦ndose en su contra¡±. El proceso destap¨® una ola de solidaridad internacional, uni¨® a la lucha antifranquista e incorpor¨® nuevos sectores a la protesta. Una exposici¨®n inaugurada este jueves por el ministro de la Presidencia, F¨¦lix Bola?os, en la Biblioteca Nacional recuerda ahora su sacrificio, su contribuci¨®n democr¨¢tica y su ejemplo.

En tiempos de ¡°discursos revisionistas¡±, ha dicho Bola?os, ¡°cuando algunos intentan convertir el blanco en negro y el negro en blanco, estas exposiciones son did¨¢cticas, un ant¨ªdoto contra los nost¨¢lgicos¡±. Sartorius, que pas¨® seis a?os en prisi¨®n, ha insistido en que la ¡°democracia no puede sustentarse sobre el olvido¡±. ¡°Qu¨¦ costosa est¨¢ resultando la necesaria recuperaci¨®n de la memoria democr¨¢tica, casi igual de costosa que la reconquista de nuestras libertades¡±, ha lamentado. Una semana despu¨¦s de que Ram¨®n Tamames, exdirigente del PCE, sugiriese en la fallida moci¨®n de censura de Vox contra Pedro S¨¢nchez que la Guerra Civil hab¨ªa empezado en 1934 y no con un golpe de Estado de Franco, y que no hab¨ªa habido ¡°ni buenos ni malos¡±, Sartorius ha pedido batallar contra ¡°la desmemoria que predican algunos¡±, recordar que ¡°la dictadura no muri¨® en la cama, sino en la calle¡± y que la democracia, ¡°como la belleza, es fr¨¢gil¡±, hay que cuidarla y defenderla. ¡°Lo que se consigui¨® en d¨¦cadas, como los derechos de las mujeres, puede perderse en d¨ªas si no se va a votar o siendo incapaz de llegar a acuerdos¡±, ha a?adido, en alusi¨®n a las disputas actuales en la izquierda. ¡°Hubo que pelear y mucho¡±, ha subrayado, y fomentar el olvido equivale a ¡°hurtar a la sociedad espa?ola su autoestima: no nos concedieron la democracia y la libertad... la ganamos¡±.

El sacrificio de la c¨²pula condenada de Comisiones Obreras, as¨ª como el de ¡°miles de trabajadores¡± que sufrieron ¡°c¨¢rcel, torturas y destierro¡± en su defensa de los valores democr¨¢ticos, ha a?adido Sordo, ¡°ha dejado de ser patrimonio del sindicato para ser patrimonio del pa¨ªs¡±. ¡°Por eso no vamos a permitir ni que nos roben la memoria ni que nos rehagan la historia¡±, ha a?adido el l¨ªder de CCOO.

Carme Molinero, catedr¨¢tica de historia contempor¨¢nea y comisaria de la exposici¨®n, ha explicado que el 1001 fue ¡°un proceso pol¨ªtico¡± y que la sentencia ¡°reproduce tal cual el atestado policial¡± despu¨¦s de un juicio sin garant¨ªas. Bola?os ha reivindicado la ley de memoria democr¨¢tica aprobada el pasado octubre y que declara nulas las sentencias de todos los tribunales franquistas.

La muestra, con fotograf¨ªas y documentos hist¨®ricos, recorre los distintos hitos del proceso judicial, que termin¨® siendo un juicio al propio R¨¦gimen, cada vez m¨¢s aislado. El encarcelamiento de los representantes sindicales provoc¨® una ola de solidaridad nacional e internacional: de Pablo Picasso a Marlon Brando; de Jean-Paul Sartre a Arthur Miller. La exposici¨®n, como ha destacado Molinero, tambi¨¦n dedica una zona especial a las mujeres: ¡°esposas de los presos, encargadas de ir a hablar con las autoridades, de intervenir en los actos de solidaridad en el extranjero. Su papel, menos conocido, fue fundamental...¡±.

El presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, ten¨ªa previsto inaugurar este jueves la muestra, pero tuvo que cancelar su intervenci¨®n por el viaje oficial a China. Al acto han acudido, adem¨¢s del ministro de Presidencia, el de Cultura, Miquel Iceta, y el de Universidades, Joan Subirats, adem¨¢s del secretario de Estado de Memoria Democr¨¢tica, Fernando Mart¨ªnez. Tambi¨¦n han estado presentes los cantantes Ana Bel¨¦n y V¨ªctor Manuel, y las abogadas Paca Sauquillo y Cristina Almeida, quienes participaron en la defensa de los procesados, as¨ª como familiares de los encarcelados. La muestra permanecer¨¢ en la Biblioteca Nacional hasta el pr¨®ximo 25 de junio.