Bruselas no detecta riesgos de inestabilidad pol¨ªtica en Espa?a

Bruselas descarta una grave crisis pol¨ªtica en Espa?a. El panorama poselectoral, con el pr¨®ximo intento de investidura del l¨ªder del PP, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, que se prev¨¦ fallido, y las conversaciones del PSOE con Junts para recibir apoyo de los independentistas, con la gran promesa de impulsar en la UE las lenguas cooficiales ¡ªpriorizando el catal¨¢n¡ª y una posible amnist¨ªa por los hechos vinculados al proc¨¦s, no preocupan en las instituciones comunitarias. En Bruselas se vio con gran alivio el significativo retroceso de la ultraderecha euroesc¨¦ptica de Vox el 23-J. Y mientras el PP de Feij¨®o, que ha formado coalici¨®n en varias comunidades y ciudades con el partido ultra, ha ido quemando opciones de formar Gobierno, varias fuentes europeas ven m¨¢s cercano un Ejecutivo de Pedro S¨¢nchez ¡°si consigue algo que pueda defender¡±, dicen. Los independentistas de Junts inquietan menos que Vox y altas fuentes comunitarias resaltan que se ven soluciones pol¨ªticas en Espa?a acordes con lo que quieren las instituciones europeas: estabilidad.

¡°No detecto ning¨²n tipo de preocupaci¨®n en Bruselas por la estabilidad pol¨ªtica en Espa?a¡±, remarca el alto representante para Pol¨ªtica Exterior y Seguridad, Josep Borrell. ¡°Las instituciones est¨¢n actuando con toda normalidad despu¨¦s del 23-J, jugando el papel normal que deben jugar¡±, se?ala por tel¨¦fono a EL PA?S el jefe de la diplomacia europea. ¡°No hay alarma¡±, insiste tambi¨¦n una alta fuente de Bruselas. Expertos y analistas apuntalan la percepci¨®n. ¡°A pesar de la alta incertidumbre pol¨ªtica en la pol¨ªtica espa?ola, no hay gran preocupaci¨®n sobre el impacto que esto podr¨ªa tener dentro y en toda Europa¡±, coincide Alberto Alemanno, profesor Jean Monnet de Derecho y Pol¨ªtica de la Uni¨®n Europea en HEC Paris.

Es la temperatura del term¨®metro general: Espa?a no es un asunto de discusi¨®n caliente en la UE. Y menos en un momento turbulento como el actual, con elecciones europeas a la vuelta de la esquina, el pr¨®ximo junio, comicios nacionales clave en varios Estados miembros ¡ªcomo en uno de sus socios d¨ªscolos, Polonia, o en Pa¨ªses Bajos¡ª y temas cruciales para el futuro de la UE, como la pr¨®xima ampliaci¨®n, el debate presupuestario o el migratorio, con una nueva crisis de llegadas irregulares despuntando, y la guerra de Rusia contra Ucrania para la que no se ve un final. Espa?a, adem¨¢s, est¨¢ siguiendo la pauta general que se hab¨ªa marcado en la agenda de la presidencia semestral del Consejo de la UE, comenta una veterana diplom¨¢tica de la UE. ¡°La Comisi¨®n trabaja muy bien con la presidencia espa?ola. No tenemos ning¨²n problema particular¡±, incide un portavoz del Ejecutivo comunitario de Ursula von der Leyen.

Hasta ahora, adem¨¢s, el estancamiento pol¨ªtico ha tenido efectos m¨ªnimos en la econom¨ªa espa?ola, que es la cuarta mayor de Europa y la decimocuarta del mundo (en PIB nominal), analiza Standard & Poor¡¯s. La agencia de calificaci¨®n de deuda destaca que para 2023, Espa?a se encamina hacia el crecimiento m¨¢s r¨¢pido entre las cuatro mayores econom¨ªas europeas: del 1,6%.

De hecho, Bruselas ha elevado su previsi¨®n para Espa?a al 2,2% mientras ha rebajado la del conjunto de la UE y el comisario europeo de Econom¨ªa, Paolo Gentiloni, ha insistido, tajante, en que la situaci¨®n pol¨ªtica y la incertidumbre de cu¨¢ndo se podr¨¢ formar Gobierno no inquietan a la Comisi¨®n ¡ª¡±B¨¦lgica tuvo un Gobierno en funciones durante un a?o y medio¡±, record¨® hace unos d¨ªas el responsable europeo¡ª y tampoco suponen un riesgo para la econom¨ªa. ¡°No estamos preocupados. Si se fijan las previsiones que hemos presentado, Espa?a tiene una situaci¨®n bastante buena, mejor que otros pa¨ªses en t¨¦rminos de crecimiento o perspectivas de inflaci¨®n¡±, destac¨® Gentiloni la semana pasada.

Los s¨ªntomas de preocupaci¨®n ser¨ªan otros: un gran retraso en la presentaci¨®n de los Presupuestos, o que Espa?a no pudiera cumplir con sus obligaciones sobre el fondo de recuperaci¨®n, la gran herramienta financiera de la UE, que tiene a Espa?a y a Italia como grandes receptores, donde se juega el ¨¦xito de la gran medida de la Comisi¨®n Von der Leyen.

El panorama pol¨ªtico espa?ol, con sus turbulencias, no difiere mucho del de otros Estados miembros, recuerda Karel Lanoo, director de CEPS, uno de los centros de estudios europeos m¨¢s potentes. El experto destaca la ¡°habilidad¡± que ha tenido S¨¢nchez y c¨®mo su jugada de adelantar las elecciones a julio contribuy¨® al retroceso de la ultraderecha euroesc¨¦ptica de Vox, que tanta alarma causa en Bruselas, por su agenda negacionista del cambio clim¨¢tico y la violencia machista y sus ataques a lo que los ultras llaman ¡°los bur¨®cratas¡± de la UE. ¡°Bruselas tiene miedo a la ultraderecha y el PP, que se hab¨ªa acercado a Vox, ha quedado un poco aislado¡±, dice Lanoo, que cree que S¨¢nchez ¡°encontrar¨¢ la f¨®rmula¡± y terminar¨¢ formando Gobierno.

Que esa f¨®rmula pase por acordar algunos t¨¦rminos con Junts es ¡°parte del juego pol¨ªtico¡±, se?ala el director del CEPS. En una Europa de m¨²ltiples realidades regionales, lenguas diversas y Estados miembros habituados a las conversaciones de coalici¨®n, la apuesta de S¨¢nchez no chirr¨ªa, dice Lanoo.

La oleada de cr¨ªticas entre la derecha que despert¨® la visita de la l¨ªder de Sumar y vicepresidenta segunda, Yolanda D¨ªaz, a Bruselas para reunirse con el expresident de la Generalitat Carles Puigdemont, pr¨®fugo de la justicia por los hechos del proc¨¦s independentista y eurodiputado, apenas recibi¨® atenci¨®n en las instituciones comunitarias. Los furiosos debates sobre una posible amnist¨ªa, contra la que ha clamado la derecha, la ultraderecha y algunos hist¨®ricos socialistas, no tienen r¨¦plica en Bruselas.

Sin embargo, destaca Ignacio Molina, investigador principal del Real Instituto Elcano, la posibilidad de ese alivio penal s¨ª puede ser un tema sobre la mesa institucional europea m¨¢s adelante. ¡°Depende de c¨®mo se plantee, la amnist¨ªa puede plantear dudas sobre el Estado de derecho europeo y crear precedentes que otros Estados miembros vean con seria inquietud¡±, se?ala el experto, que destaca que a diferencia de 2015 o 2019, cuando tambi¨¦n hubo gobiernos en funciones, la cuesti¨®n europea ahora s¨ª forma parte de esta situaci¨®n porque parte de la negociaci¨®n introduce cuestiones que afectan a la UE, incluso a su funcionamiento, como el debate para oficializar en la Uni¨®n las lenguas cooficiales y sumarlas a las 24 que ya lo son. Una propuesta que, adem¨¢s de las serias implicaciones que tiene para algunos territorios, supone tambi¨¦n un cambio en la log¨ªstica (ahora, con las lenguas oficiales ya hay 552 combinaciones de traducci¨®n) y un asunto econ¨®mico, aunque Espa?a haya propuesto asumir los costes adicionales.

La caja de Pandora de las lenguas oficiales

La proposici¨®n del Ejecutivo de S¨¢nchez, que present¨® el martes el ministro de Exteriores en funciones, Jos¨¦ Manuel Albares, en el Consejo de Asuntos Generales en Bruselas, ha creado grandes dudas entre los Estados miembros por todas esas implicaciones. No se han cerrado en banda pero han pedido m¨¢s tiempo y un informe sobre las consecuencias legales y financieras. La negociaci¨®n est¨¢ siendo muy compleja y Espa?a ha decidido priorizar el catal¨¢n por ser la m¨¢s hablada de las tres cooficiales (con la idea, adem¨¢s de que no es una lengua minoritaria, sino que tiene m¨¢s hablantes que otras ya oficiales en la UE) y despu¨¦s impulsar el gallego y el euskera de forma gradual.

El Gobierno de S¨¢nchez ha ganado as¨ª tiempo, algo que puede jugar a su favor en las conversaciones con Junts y con ERC. A ning¨²n Estado miembro se le escapa que es un asunto sustancial para la pol¨ªtica interna espa?ola y que en otro momento pueden estar en la misma tesitura. De hecho, Francia, que se ha opuesto a abrir el mel¨®n de las lenguas por sus conflictos con los movimientos nacionalistas bretones o corsos, ha asegurado que est¨¢ dispuesta a ¡°acomodar¡± la propuesta de Espa?a, aunque pide un informe jur¨ªdico para ver ¡°c¨®mo¡±.

En Bruselas, donde los actores clave conocen a fondo la situaci¨®n pol¨ªtica de los Estados miembros y todo el engranaje comunitario, no se ve como una humillaci¨®n ¡ªcomo lo ha tildado la ultraderecha¡ª ni los debates sobre la posible amnist¨ªa ni la petici¨®n espa?ola sobre las lenguas cooficiales, destaca una alta diplom¨¢tica europea. No pasa desapercibido que el independentismo catal¨¢n ha perdido mucho fuelle ¡ªJunts perdi¨® un esca?o y ERC, seis¡ª y que Puigdemont est¨¢ pidiendo clemencia, aunque con palabras grandes y sonoras.

Con el fantasma de la ultraderecha sobrevol¨¢ndolo todo, la Generalitat tiene tambi¨¦n mucho que perder en Bruselas ¡ªdonde se hab¨ªa dado muestras de restaurar las relaciones tras 10 a?os congeladas¡ª si no se mueve para impedir que los ultraconservadores euroesc¨¦pticos lleguen, de la mano del PP, al Gobierno de la cuarta econom¨ªa de la UE. La posibilidad de nuevas elecciones si los procesos de investidura fracasan tampoco causan especial inquietud, aunque varias fuentes europeas destacan que la ultraderecha podr¨ªa tratar de capitalizar el debate catal¨¢n. Un mensaje amplificado por los partidarios dentro del Partido Popular Europeo del acercamiento a los ultraconservadores, que ya daban por hecho el pacto de gobierno PP-Vox en Espa?a y que pueden generar m¨¢s ruido en el debate pol¨ªtico espa?ol.

Tras el 23-J se habl¨® en Bruselas de una gran coalici¨®n PP-PSOE al estilo de otros Estados miembros y el PP intent¨® transitar esa v¨ªa. Pero cometi¨® errores, analiza una alta fuente comunitaria. Lo hizo, como destaca uno de los ¨²ltimos an¨¢lisis de EuroIntelligence, de forma improvisada y tras una campa?a plagada de ataques contra el ¡°sanchismo¡± con el que despu¨¦s propuso pactar. ¡°Todo este escenario poselectoral no es algo que Feij¨®o ni su entorno anticiparan, as¨ª que ahora est¨¢n improvisando¡±, dice. ¡°Esto tambi¨¦n podr¨ªa aplicarse a los socialistas. Pero S¨¢nchez ha sido un protagonista clave en uno de los per¨ªodos m¨¢s ca¨®ticos de la historia pol¨ªtica espa?ola moderna. Tiene ventaja sobre Feij¨®o si ambos tienen que arreglar las cosas sobre la marcha¡±.