La seguridad nacional queda fuera de la gresca pol¨ªtica de momento

Oposici¨®n de cuchillo entre los dientes. Mientras el PSOE est¨¢ centrado en lograr un pacto para la investidura de Pedro S¨¢nchez, el PP eleva al m¨¢ximo la denuncia y las proclamas contra el presidente del Gobierno en funciones por los acuerdos a los que pueda llegar con el independentismo catal¨¢n, en las variantes de ERC y Junts per Catalunya.

Aunque con dificultades, parece que s¨ª quedar¨¢ fuera de la acusaci¨®n la estrategia del Gobierno sobre la seguridad nacional ante la eventualidad de un resurgimiento de la amenaza del terrorismo yihadista. Espa?a, como el resto de los pa¨ªses europeos, est¨¢ en alerta nivel 4 reforzado, de un rango de 5, por si el conflicto en Oriente Pr¨®ximo derivara en ataques del terrorismo islamista.

Con alguna dificultad de contenci¨®n verbal, los populares dejan al Gobierno en funciones que maneje la situaci¨®n, que compete al Ministerio del Interior y a los servicios de inteligencia, aunque los reproches contin¨²an, sin tanta contenci¨®n, sobre la posici¨®n oficial de Espa?a ante el conflicto de Israel y Gaza. Este ya ha trascendido a Israel y los territorios ocupados, para volver a ser el de Israel y parte del mundo ¨¢rabe y sus opiniones p¨²blicas.

Si S¨¢nchez ostenta la presidencia ¡°ser¨¢ desde la deshonra¡±, asever¨® ayer el presidente del PP, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, en nombre, asegura, de los espa?oles que tienen la dignidad intacta; no as¨ª el PSOE, que la ha perdido junto a ¡°principios y valores¡±. El estupor despu¨¦s era patente en los ¨¢mbitos socialistas por la magnitud de las descalificaciones.

La convocatoria el pasado viernes del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, a los portavoces parlamentarios vino precedida por unas declaraciones que alarmaron al Ejecutivo en funciones. Los temores se disiparon una vez que la portavoz parlamentaria, Cuca Gamarra, se?al¨® que el PP es ¡°un partido de Estado¡± y como tal acud¨ªan al encuentro con el ministro para escucharle con el m¨¢ximo inter¨¦s. Al no valorar, apoyar, ni desestimar, la exigencia del alcalde de Madrid, Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez Almeida, de elevar a 5 el nivel de alarma en Espa?a y tampoco el consejo de Feij¨®o a los espa?oles de que extremaran las precauciones ante eventuales peligros terroristas, en el Gobierno entendieron que, en principio, ese no ser¨ªa otro eje m¨¢s de enfrentamiento.

Todo se qued¨® en pedir al Gobierno que convoque el pacto contra el terrorismo ¡°porque Espa?a no est¨¢ exenta de los mismos peligros que otros pa¨ªses europeos que est¨¢n en m¨¢xima alerta¡±, se?alan interlocutores del PP. ¡°La situaci¨®n es grave, hay un espa?ol secuestrado y los riesgos son objetivos¡±, concluyen con el broche de que el PP ¡°no tiene inter¨¦s en polemizar sobre este asunto¡±.

No por ello el conflicto entre Israel y Ham¨¢s est¨¢ exento de espa?olizarse, como asunto de gresca pol¨ªtica. Todo lo que dicen los dirigentes de Podemos sobre Israel se le reprocha a S¨¢nchez. ¡°Debe ordenar a Ione Belarra que no siga con esos pronunciamientos sobre Israel, al que llama genocida¡±, se?alan fuentes del PP.

El reconocimiento de dos Estados, Israel y Palestina, forma parte del bagaje del PP desde 2014, cuando se aprob¨® una resoluci¨®n en el Congreso por unanimidad con esa posici¨®n. Hasta ayer domingo se reprochaba que el presidente del Gobierno en funciones estaba m¨¢s dedicado a conversar con l¨ªderes ¨¢rabes que con los dirigentes de Israel. Este s¨¢bado, S¨¢nchez particip¨® en El Cairo en una cumbre, organizada por el presidente egipcio, y que termin¨® sin declaraci¨®n conjunta. Pero el domingo por la tarde, el mandatario convers¨® por tel¨¦fono con el presidente de Israel, Benjam¨ªn Netanyahu, al que reiter¨® la condena a los ataques terroristas de Ham¨¢s contra Israel y su derecho a defenderse de ellos, a la vez que le pidi¨® un ¡°alto el fuego humanitario¡±, seg¨²n inform¨® el S¨¢nchez en su cuenta de X (antes Twitter).

A¨²n hay margen para que este conflicto pueda entrar de lleno en la pol¨ªtica nacional, pero ser¨ªa para dar m¨¢s contenido a la lista de agravios ¡°contra Espa?a¡± que el PP atribuye a S¨¢nchez, a quien Feij¨®o considera susceptible de ser juzgado no solo ¡°por las urnas¡±, sino por la historia. S¨¢nchez y Feij¨®o siguen sin dirigirse la palabra.