La secta murciana que enloqueci¨® con el mercurio

¡°Fuera de aqu¨ª, es la ¨²ltima vez que lo digo¡±, dijeron budistas con el dedo levantado a la altura del rostro. El buen rollo del centro de yoga Mahasandhi se esfum¨® desde que hace dos semanas la polic¨ªa tumb¨® la puerta y toda la calma llegada de Benar¨¦s se evapor¨® como el pachul¨ª. Hasta hace unos d¨ªas, por esta finca de 100.000 metros cuadrados se paseaba con t¨²nica y sin calzoncillos un lama nacido en Murcia, que hoy est¨¢ detenido acusado de cinco delitos, entre ellos asociaci¨®n il¨ªcita o tr¨¢fico de drogas. A los gur¨²s que se han quedado al frente del centro no les gusta ver a periodistas junto a su puerta.

Se llama Jos¨¦ Manuel C¨¢novas y tiene 50 a?os. Durante 15 a?os, C¨¢novas levant¨® un centro de meditaci¨®n que atra¨ªa gente de todo el mundo, principalmente de Espa?a, que llegaban para meditar, cantar en grupo o participar de ceremonias colectivas en honor a Shiva o Ganesh. Enclavado en el espectacular desierto de Abanilla, un apocal¨ªptico paraje de colinas y pliegues monta?osos entre Murcia y Elche, Mahasandhi comenz¨® siendo una finca desde la que comenzar una nueva vida despu¨¦s de 14 a?os viviendo a la ribera del Ganges. C¨¢novas, se hab¨ªa marchado con apenas 20 a?os y volv¨ªa a casa cerca del pueblo y de sus padres, ¡°dos buenas personas de campo¡±, como describe un vecino que conoce bien a la familia. Aquella finca le permiti¨® dejar de alquilar locales en gimnasios de Murcia y pronto se convirti¨® en centro de yoga donde se daban clases, celebraban ceremonias y se hac¨ªan masivos encuentros los fines de semana a los que llegaban m¨¢s de 200 personas. La gente- una pediatra de Cuenca, un cantante de ¨®pera de Bilbao o una profesora de Argentina- poco a poco empez¨® a quedarse a dormir.

Se habilitaron casas-cuevas t¨ªpicas de la zona, se compraron fincas lim¨ªtrofes y se construy¨® un lugar de meditaci¨®n decorado con im¨¢genes del Tibet, Buda, Jesucristo o el lama murciano. En el recinto se construyeron dos enormes c¨²pulas blancas con formas de igl¨² para meditar y se plant¨® una de las joyas de la corona del centro, un esqueje del ¨¢rbol de Bodhi, la higuera bajo la que Siddharta Gautama se sent¨® a meditar y alcanz¨® la iluminaci¨®n. ¡°Dentro hab¨ªa unas 20 personas haciendo trabajo comunitario y que levantaron cada lugar de meditaci¨®n y cada escultura con su trabajo¡±, explica un exmiembro de la comunidad que lleva tres a?os alejado del centro. Durante a?os se pase¨® por televisiones y radios de Murcia y hasta el ayuntamiento promov¨ªa el ¡°turismo espiritual¡± en la zona, aprovechando la cercan¨ªa de Caravaca o la pedan¨ªa de Mahoya, donde supuestamente aparecieron dos astillas de la cruz. ¡°El maestro ten¨ªa cinco criadas o Dakinis que lo atend¨ªan y que a su vez ten¨ªan a otras de menor rango y que estaban encargadas de limpiar, cocinar o hacer la compra en Akanishta, la casa privada donde ¨¦l viv¨ªa¡±, explica Javier Nieves, un bilba¨ªno de 71 a?os que durante diez a?os ejerci¨® de mano derecha del lama murciano.

Nieves, rebautizado en s¨¢nscrito como Valmiki, se encarg¨® entre 2010 y 2020 del mantenimiento de los coches del maestro, c¨®mo ¨¦l lo llama, y organizar las ceremonias. ¡°Yo recog¨ªa los donativos de las ceremonias que se hac¨ªan en la Gompa, el templo principal. No s¨¦ cu¨¢nto dinero hab¨ªa porque lo met¨ªa en una bolsa de pl¨¢stico y se lo daba a la responsable de la tienda de Mahasandhi, pero en la Gompa lleg¨® a haber 180 personas durante algunas jornadas de meditaci¨®n¡±, explica. El exmiembro de la secta confirma que en el Auditorio Municipal de Abanilla acud¨ªan m¨¢s de 400 personas, para asistir a las clases de ayurveda, la medicina tradicional de la India, que pagaban 5 euros por cabeza, sumando unos 2.000 euros cada s¨¢bado. Desde que vest¨ªa con t¨²nicas naranjas y el pecho descubierto, el lama murciano se hac¨ªa llamar ¡°maestro¡±, pero con el paso del tiempo cambi¨® de nombre. Nada de s¨¢nscrito o referencias divinas, sino algo m¨¢s prosaico: ¡°Trascendencia total¡±.

El gur¨² sol¨ªa contar que Murcia es uno de los puntos energ¨¦ticos m¨¢s potentes del mundo, algo que gusta tambi¨¦n decir a los vecinos de Abanilla que hablan del potente tri¨¢ngulo m¨ªstico que forman la Santa Cruz de Abanilla, Caravaca y Ulea. Para la polic¨ªa, sin embargo, el tri¨¢ngulo era otro. El que forman Abanilla, Lorqu¨ª y Abar¨¢n, los tres peque?os municipios del centro de Murcia donde C¨¢novas escond¨ªa la marihuana, el dinero o el mercurio.

La ma?ana del 17 de noviembre, m¨¢s de medio centenar de polic¨ªas enviados desde Madrid, 20 furgonetas, perros, detectores de metales y dos excavadoras, se presentaron en el lugar en un espectacular operativo y efectuaba tres registros simult¨¢neos. Uno en la enorme finca de Abanilla donde resid¨ªa el l¨ªder y viv¨ªan otras 20 personas, otro en la nave de Lorqu¨ª, donde se elaboraban las cremas y cosm¨¦ticos que luego vend¨ªan y otro m¨¢s en una fosa de Abar¨¢n. En los tres registros se encontraron 90.000 euros, 180 kilos de mercurio y cinabrio, 17 kilos de marihuana, una pistola, varios machetes, tubos de ensayo, alambiques para la alquimia, manuales para el manejo de sustancias peligrosas y material religioso y esot¨¦rico.

Por el momento, los exmiembros de la comunidad no han mencionado abusos sexuales, uso de menores, violencia o envenenamiento, pero s¨ª dominaci¨®n emocional y abusos. ¡°Se aprovechaba de la gente para forzar que le hicieran donaciones¡±, recuerda Nieves. ¡°Una profesora de m¨²sica de Secundaria le regal¨® una furgoneta Mercedes, un valenciano le dio unos terrenos fant¨¢sticos en su tierra, otro le don¨® su casa-cueva que luego le vendi¨® a otra disc¨ªpula¡±, detalla. Sin embargo, durante el registro policial lo que m¨¢s llam¨® la atenci¨®n de los agentes fue el mercurio. ¡°Es la primera vez que veo la utilizaci¨®n de mercurio en las sectas¡±, dice Luis Santamar¨ªa, miembro de la red iberoamericana que estudia el avance de las sectas y autor de varios libros sobre el tema. ¡°Generalmente se utiliza peyote, ayahuasca o sustancias derivadas del sapo, pero el mercurio no lo hab¨ªa visto nunca antes¡±, explica Santamar¨ªa.

Seg¨²n Daniel Torregrosa, divulgador qu¨ªmico y autor del libro Del mito al laboratorio, desde la antig¨¹edad el mercurio est¨¢ relacionado con la ¡°inmortalidad¡±, pero su consumo o inhalaci¨®n destroza el aparato digestivo en poco tiempo y afecta el sistema neurol¨®gico central. ¡°Los sombrereros ingleses lo usaban para trabajar la piel y terminaban enloqueciendo. De ah¨ª surge la figura del sombrero loco de Alicia en el pa¨ªs de las maravillas¡±, explica Torregrosa. La capacidad t¨®xica del mercurio es altamente da?ina para el medioambiente, de ah¨ª que uno de los cinco delitos imputados es el de delito ecol¨®gico. Seg¨²n Torregrosa es imposible tener 180 kilos de mercurio por su costo, la complicaci¨®n del almacenamiento y el peligro de evaporaci¨®n, por lo que deduce que casi todo el mineral incautado era cinabrio, una roca que mediante un proceso qu¨ªmico permite extraer el mercurio. ¡°Con ese mercurio se formaban unas pelotas de golf que toc¨¢bamos durante las ceremonias y pasamos a la persona que estaba al lado para absorber la energ¨ªa¡±, reconoce Nieves, el exmiembro de la secta. Otro de los confidentes revel¨® que se vend¨ªa el mercurio en gramos para colgantes que se vend¨ªa en el centro. ¡°Trascendencia Total lo consideraba una herramienta para avanzar espiritualmente¡±.

El d¨ªa que la polic¨ªa detuvo a C¨¢novas, iba ¡°tranquilo y muy calmado¡±, dice un agente que lo recuerda caminando con la t¨²nica naranja con una pizarra bajo el brazo. El lama murciano hab¨ªa hecho voto de silencio y las primeras declaraciones las hizo escribiendo en la pizarra. El compromiso m¨ªstico le dur¨® lo que tard¨® en llegar a la celda, confirma el agente. Con el paso de los d¨ªas, el cachondeo local ha rebautizado al gur¨² que iba a colocar a la empobrecida comarca en el mapa mundial de la meditaci¨®n con la construcci¨®n del Buda m¨¢s grande de Europa, una escultura ya aprobada por el ayuntamiento de 30 metros de altura. Desde hace dos semanas ¡°Trascendencia total¡± es ahora ¡°Trascendencia parcial¡±.

A pesar del espectacular despliegue policial y medi¨¢tico, legalmente los expertos coinciden en que no es f¨¢cil demostrar los delitos. ¡°En Espa?a hay cientos de grupos como Fundaci¨®n Mahasandhi y unas 400.000 personas enganchadas a alg¨²n tipo de secta en Espa?a¡±, dice Santamar¨ªa. Desde hace 30 a?os Francia cuenta con un observatorio permanente, pero en el c¨®digo penal espa?ol ni siquiera se recoge el t¨¦rmino ¡°secta¡±. Hay libertad para vivir dentro de cualquier modelo posible, salvo si se comete un delito. En este caso, para la polic¨ªa se cometieron cinco: tr¨¢fico de drogas (por los 17 kilos de marihuana encontrados), delito contra la salud p¨²blica en su modalidad de fabricaci¨®n, suministro y comercializaci¨®n de productos y medicamentos e intrusismo profesional (por las cremas y productos homeop¨¢ticos que no contaban con el registro sanitario) asociaci¨®n il¨ªcita y delito contra el medioambiente.

En uno de los pa¨ªses que mayor n¨²mero de ansiol¨ªticos consume del mundo y con los suicidios disparados, las sectas y el mercurio corren el peligro de convertirse en la nueva evasi¨®n, coinciden los expertos. ¡°Atraen a gente vulnerable que atraviesa un momento d¨¦bil o bajo de ¨¢nimos¡±, explica Santamar¨ªa. Los expertos suelen ejemplificar con una rana y agua hirviendo su capacidad para someter a alguien hasta anular su personalidad: ¡°Si metes una rana en agua hirviendo saltar¨¢ inmediatamente, pero si la metes en agua y vas subiendo progresivamente el calor, morir¨¢ sin darse cuenta¡±.