Encuentros estrat¨¦gicos de suma cero en el Magreb

¡°Marruecos es un pa¨ªs vecino, amigo y socio estrat¨¦gico de Espa?a en todos los ¨¢mbitos. Esta visita, que se realiza al inicio de la legislatura, subraya los profundos lazos que unen a ambos pa¨ªses¡±, declar¨® La Moncloa ante el viaje oficial efectuado este mi¨¦rcoles por el presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, que ha sido calificado como de ¡°despacho ordinario¡±. Las relaciones bilaterales, que viven uno de sus mejores momentos, ¡°nunca hab¨ªan sido tan intensas y fruct¨ªferas¡±, como ya hab¨ªa reconocido el titular de Exteriores, Jos¨¦ Manuel Albares.

Espa?a es el primer socio comercial de Marruecos y aspira a convertirse en un inversor de referencia. El comercio bilateral super¨® en 2022 los 20.000 millones de euros y sigue creciendo. A preguntas de una periodista de la televisi¨®n marroqu¨ª, S¨¢nchez se ha ratificado ahora en su alineamiento con la tesis marroqu¨ª favorable a la autonom¨ªa del S¨¢hara Occidental, el giro diplom¨¢tico que puso fin una posici¨®n de neutralidad de m¨¢s de cuatro d¨¦cadas sobre la antigua colonia africana. Hace un a?o, su visita a Rabat qued¨® deslucida por la ausencia del rey Mohamed VI, pero ahora ha sido recibido con gran boato en el Palacio Real de la capital marroqu¨ª.

Los estudiosos del Magreb suelen advertir de que, para Espa?a, las relaciones con Marruecos y Argelia equivalen generalmente a un juego de suma cero, en el que las ganancias de un jugador se equilibran al final con las p¨¦rdidas de otro. Este puede haber sido el caso.

La decisi¨®n de acercarse a Marruecos y cambiar la pol¨ªtica sobre el S¨¢hara provoc¨® un encontronazo con Argelia, que retir¨® a su embajador en 2022 y puso en riesgo las relaciones comerciales, aunque mantuvo el suministro directo de gas natural. La exportaci¨®n de gas lleva d¨¦cadas jugando un papel esencial en la relaci¨®n bilateral entre Espa?a y Argelia. Casi el 30% del gas consumido en 2023 procedi¨® del pa¨ªs norteafricano, el ¨²nico productor desde donde llega combustible por un gasoducto: el resto de las importaciones son en buques.

Tras las pasadas elecciones generales en Espa?a, Argelia recul¨® y orden¨® el retorno de su embajador en Madrid el pasado diciembre, mientras enviaba se?ales de reconciliaci¨®n con la reanudaci¨®n de enlaces a¨¦reos y de las compras de alimentos en Espa?a.

Albares hab¨ªa organizado un viaje a Argel la semana pasada para escenificar esa normalizaci¨®n, pero tuvo que posponerlo ¡°por motivos de agenda argelinos¡± en el ¨²ltimo momento, seg¨²n Exteriores, cuando los periodistas que iban a acompa?arle ya ten¨ªan las maletas listas. El equipo del ministro no concret¨® los detalles de la repentina suspensi¨®n. A¨²n no hay fecha para la visita.

Argelia alberga en su territorio, en la zona suroccidental de Tinduf, los campamentos de refugiados saharauis controlados por el independentista Frente Polisario. En 2019, antes de la pandemia, Espa?a export¨® bienes a Argelia por valor de 2.906 millones, pero en 2022 dicha cifra se redujo a poco m¨¢s de un tercio: 1.010 millones.

Espa?a hab¨ªa argumentado en las ¨²ltimas semanas que su posici¨®n sobre el S¨¢hara Occidental hab¨ªa quedado fijada por las intervenciones del presidente del Gobierno ante la Asamblea General de la ONU. El cambio fue sutil y agrad¨® a Argelia, que interpret¨® que Espa?a volv¨ªa al punto de partida. S¨¢nchez defendi¨® para el S¨¢hara ¡°una soluci¨®n pol¨ªtica mutuamente aceptable y en el marco de la Carta de las Naciones Unidas y de las resoluciones del Consejo de Seguridad¡± de la ONU, sin mencionar el plan marroqu¨ª de autonom¨ªa.

Ahora, en Marruecos, S¨¢nchez ha remachado, sin citarlo expresamente, el nuevo mantra de su Gobierno: que la propuesta de Rabat presentada en 2007 para integrar al S¨¢hara en su territorio con un cierto autogobierno es ¡°la base m¨¢s seria, cre¨ªble y realista¡±.