No todas las luces de aver¨ªa de coches son v¨¢lidas
Tr¨¢fico alerta de que los dispositivos que sustituyen a los tri¨¢ngulos tendr¨¢n que poderse conectar a partir del 1 de enero de 2026
Los tri¨¢ngulos de se?alizaci¨®n de aver¨ªa tienen los d¨ªas contados. La Direcci¨®n General de Tr¨¢fico (DGT) ya elimin¨® la obligaci¨®n de colocarlos en autopistas y autov¨ªas el 1 de julio de 2023 ante el incremento de atropellos mortales a conductores que se bajaban a ponerlos. Para ello, design¨® como sustitutas unas luces amarillas denominada balizas V-16 que se ponen en el techo del veh¨ªculo con solo alargar el brazo desde el asiento. Eso s¨ª, el problema ha surgido ahora con estos dispositivos luminosos. Los que est¨¢ comprando la mayor¨ªa de la gente no disponen de tarjeta de tel¨¦fono m¨®vil y no est¨¢n conectados con las plataformas digitales que reciben la se?al de alerta y emiten una se?al al resto de usuarios y a la Guardia Civil. A partir del 1 de enero de 2026 ser¨¢ obligatorio que lo hagan.
La mayor¨ªa de los conductores compra las luces amarillas en grandes superficies o en la Red, en grandes portales de distribuci¨®n, en los que el precio que puede estar incluso por debajo de un euro, con los gastos de env¨ªo aparte. Las publicidades dicen que esos faros est¨¢n homologados por la DGT. Sin embargo, la realidad es muy distinta. En la p¨¢gina de Tr¨¢fico est¨¢n recogidos los 47 modelos que hasta el momento s¨ª cuentan con el visto bueno. Y para ello deben cumplir unas caracter¨ªsticas: Se trata de balizas de color amarillo que est¨¦n dotadas de conectividad y con capacidad de ¡°emitir una luz de 360 grados de alta intensidad de forma intermitente y continua al menos durante 30 minutos¡±, seg¨²n recoge la web. Jam¨¢s habr¨¢ que recurrir ¡°a elementos externos como aplicaciones de tel¨¦fonos m¨®viles u otros similares¡±. Su visibilidad debe alcanzar como m¨ªnimo un kil¨®metro de distancia, incluso con condiciones climatol¨®gicas adversas. Adem¨¢s, debe incorporar una pila o bater¨ªa con una vida ¨²til de 18 meses, sea o no recargable.
En la conectividad es donde radica el problema. Gran cantidad de los modelos que se est¨¢n vendiendo en la actualidad carecen de esa tarjeta de telefon¨ªa m¨®vil que permite el env¨ªo del geoposicionamiento al programa DGT 3.0. Este, tras comprobar la veracidad del incidente, emite a su vez una se?al de forma autom¨¢tica a los navegadores, a las aplicaciones de movilidad y a los ordenadores de a bordo de los veh¨ªculos. De esta manera, los conductores que circulen por esa zona ya estar¨¢n informados de que hay un veh¨ªculo parado en el arc¨¦n y podr¨¢n adoptar las medidas de seguridad necesarias, como reducir la velocidad o cambiar de carril. Tambi¨¦n se reflejar¨¢ en los paneles luminosos de las carreteras para aquellos usuarios que no tengan veh¨ªculos modernos o sistema de navegaci¨®n.
Se?al cada 100 segundos
El dispositivo est¨¢ configurado de tal forma que emite una se?al de activaci¨®n cada 100 segundos. Cuando se apaga -al haberse solucionado la aver¨ªa o el accidente-, deja de emitir y la DGT 3.0 da de baja la incidencia.
Las luces conectadas ser¨¢n obligatorias a partir del 1 de enero de 2026, por lo que hasta ese d¨ªa se podr¨¢n utilizar de manera indistinta los tri¨¢ngulos como las luces. A partir de esa fecha, solo ser¨¢n v¨¢lidas las V-16. El problema que est¨¢ detectando Tr¨¢fico es doble. Por un lado, muchos de los dispositivos que se compren ahora no servir¨¢n dentro de poco m¨¢s de un a?o. Por el otro, la demanda puede dispararse conforme se acerque la fecha de vigencia obligatoria. De hecho, la DGT ha recomendado a los organismos p¨²blicos y a las empresas que en sus compras de veh¨ªculos incluyan en los contratos la obligatoriedad de aportar desde el inicio estos dispositivos.
?Qu¨¦ cuesta una luz V-16 que se pueda conectar? En el mercado existen hasta 47 modelos homologados -el ¨²ltimo el pasado 21 de agosto- y su precio oscila los 50 euros. Eso s¨ª, siempre tienen que cumplir una caracter¨ªstica legal. Deben tener una disponibilidad de conectividad m¨ªnima de 12 a?os -las que se compren ahora estar¨¢n como m¨ªnimo hasta 2036- y su coste ya est¨¢ contemplado en el precio de venta, por lo que ning¨²n usuario tendr¨¢ que pagar una cuota adicional por el servicio. Al tener una fecha de caducidad -viene en el envase como en el propio dispositivo-, los conductores deber¨¢n estar atento a la misma para reemplazarlo.
La DGT decidi¨® eliminar los tri¨¢ngulos de aver¨ªa al detectar la peligrosidad que supone colocarlos. La legislaci¨®n obligaba a colocarlo a 50 metros por detr¨¢s del veh¨ªculo en v¨ªas de m¨¢s de un carril por sentido y tambi¨¦n por delante, en caso v¨ªas convencionales. La distancia sub¨ªa a los 100 metros en caso de visibilidad baja o mal tiempo. De media, en los ¨²ltimos a?os se han registrado 22 atropellos mortales de conductores que iban a colocarlos. De poco serv¨ªa que llevaran los chalecos reflectantes que tambi¨¦n son obligatorios en v¨ªas interurbanas. Espa?a es pionero en la utilizaci¨®n de la V-16. Los primeros que la usaron fueron los integrantes del sector de las gr¨²as, al realizar un auxilio en carretera, dado el riesgo que sufren en su trabajo. Seg¨²n datos de Tr¨¢fico, unos 11.000 veh¨ªculos efect¨²an a diario operaciones de ayuda y rescate, lo que supone un alto grado de peligrosidad.
Lo importante es llevarla a mano
La recomendación de la Dirección General de Tráfico es que la luz V-16 se lleve lo más cerca posible del conductor, como en la guantera o en la puerta de entrada al vehículo. De esta forma, en caso de sufrir una avería o un accidente, se puede activar en segundos al colocarla en el techo del automóvil. Basta con apretar el botón para que empiece a lanzar destellos. En ese mismo momento, se conectará con la plataforma DGT 3.0, lo que permitirá transmitir la ubicación del coche en tiempo real y a partir de ahí, avisar de dicha circunstancia a los otros usuarios de la vía. Una vez que se apaga, cesa la señal y se deja de informar al resto de conductores.
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