El PSOE sofoca la rebeli¨®n de Lobato antes del Congreso Federal: as¨ª fueron sus ¨²ltimas 72 horas

Juan Lobato tom¨® la decisi¨®n de dimitir como secretario general del PSOE de Madrid el martes por la noche. T¨¦cnico de Hacienda del Estado, si de algo sabe es de cifras y los n¨²meros hab¨ªan dejado de darle la raz¨®n. ¡°Ya no le quedaba pr¨¢cticamente ning¨²n apoyo en el partido¡±, resumen fuentes de su confianza. La espantada de sus apoyos org¨¢nicos m¨¢s fieles y la presi¨®n que le llegaba de muchos de los secretarios generales de agrupaciones clave en su victoria en las primarias de 2021, en las que obtuvo un respaldo del 61%, un porcentaje discreto pese a ser el candidato oficialista, es decir, el se?alado por Ferraz, minaron su resistencia. Aun as¨ª, Lobato demor¨® la decisi¨®n y no claudic¨® formalmente hasta las 14.21 en un mensaje a la prensa, a la que siempre ha atendido sin hacer distinciones. La Moncloa, Ferraz y la federaci¨®n que para muchos en el partido sigue siendo la temida FSM o PSM por mucho que cambie de nombre, respiraron aliviados despu¨¦s de 72 horas de v¨¦rtigo in¨¦ditas, incluso, para los socialistas madrile?os.

El lunes por la ma?ana Lobato no es consciente de la gravedad de la crisis que ha estallado la noche anterior. Ese d¨ªa, alrededor de las 20.00, llama a Pilar S¨¢nchez Acera para decirle que Abc va a publicar una informaci¨®n sobre los mensajes de WhatsApp que hab¨ªan mantenido ocho meses antes acerca del caso que afecta a la pareja de Isabel D¨ªaz Ayuso, y que S¨¢nchez Acera le dice haber obtenido de medios de comunicaci¨®n, antes de la sesi¨®n de control del 14 de marzo en la Asamblea de Madrid.

Lo que no le cuenta Lobato es que esa tarde ha quedado con dos periodistas del medio. Tampoco entra en detalles del contenido de la informaci¨®n. Menos de dos horas despu¨¦s, el diario publica en su portada que ¡°Moncloa filtr¨® el documento secreto sobre el novio de Ayuso y trat¨® de implicar a Lobato¡±. El PSOE se entera de que Lobato acudi¨® en noviembre a un notario para registrar una conversaci¨®n con una persona que adem¨¢s no es una cualquiera: S¨¢nchez Acera es la n¨²mero tres de la direcci¨®n regional, es alguien que le ayuda semana a semana a preparar sus intervenciones en el Parlamento regional y adem¨¢s hab¨ªa sido hasta septiembre la jefa de gabinete en La Moncloa de ?scar L¨®pez, director de gabinete de Pedro S¨¢nchez hasta su nombramiento como ministro para la Transformaci¨®n Digital y de la Funci¨®n P¨²blica. Sin pretenderlo, Lobato ha activado ¡°una bomba nuclear¡± que se lo terminar¨¢ llevando por delante y que siembra la duda de si el Gobierno hab¨ªa obtenido la informaci¨®n a trav¨¦s de la Fiscal¨ªa.

El dirigente del PSOE madrile?o emite un comunicado a las 22.21 del domingo en el que sostiene que acredit¨® ante notario que ni los socialistas madrile?os ni La Moncloa hab¨ªan recibido de la Fiscal¨ªa ninguna informaci¨®n en absoluto relativa al novio de Ayuso. Pero el da?o ya est¨¢ hecho. Lobato inicia la ma?ana del lunes una gira por seis medios. Un carrusel que le lleva por la Cope, Onda Cero, Antena 3, Cuatro, La Sexta y TVE. El PSOE asiste estupefacto. Nadie entiende nada. Sus explicaciones producen el efecto contrario mientras la desaz¨®n ya cunde en su equipo. Ni los m¨¢s cercanos sab¨ªan que hab¨ªa ido al notario.

Aun as¨ª, Lobato quiere seguir manteniendo las reuniones que ten¨ªa previstas para el mi¨¦rcoles y el jueves, antes de viajar el viernes a Sevilla al 41? Congreso Federal del PSOE al frente de la delegaci¨®n madrile?a. Pero todo cambia sobre la una y media: el Tribunal Supremo lo acaba de citar como testigo el viernes a las diez de la ma?ana por el caso de la filtraci¨®n de los correos de la pareja de Ayuso. Ah¨ª empieza a quebrarse.

Decide irse a su casa, donde se recluye. Son poco m¨¢s de las tres de la tarde. Y apenas atiende llamadas, tan solo a un pu?ado de cuadros de su confianza. ¡°No nos cog¨ªa el tel¨¦fono a nadie¡± era la t¨®nica. Lobato se refugia en su familia. Aprovecha y coloca el ¨¢rbol de Navidad en su vivienda unifamiliar en Soto del Real, donde se convirti¨® en 2015 en el primer alcalde socialista desde Eugenio Candelas, al que fusilaron en la Guerra Civil en 1939. Mientras, el malestar en Madrid provoca una reacci¨®n en cadena en la que dirigentes de peso de la federaci¨®n terminan pidiendo esa noche la dimisi¨®n de Lobato al entender que ¡°ha cometido un acto de deslealtad¡± y ¡°ha traicionado la confianza de una compa?era¡±.

La situaci¨®n se enreda todav¨ªa m¨¢s el martes. Son las 8.06 y Lobato convoca a la prensa en la Asamblea de Madrid a las 9.30. Avisa a una veintena de personas para que acudan a su declaraci¨®n. Los convocados transmiten a otros compa?eros de partido que no saben a qu¨¦ van. No tienen la certeza de que Lobato vaya a dimitir, aunque esa sea la sensaci¨®n generalizada. Y err¨®nea. ¡°Ojo, que va a ser que sigue¡±, pone sobre aviso un peso pesado de la federaci¨®n a su gente de confianza.

La premura de la convocatoria y el tr¨¢fico hacen que no acudan muchos cargos, apenas un pu?ado a la brev¨ªsima comparecencia sin preguntas de Lobato, que empieza con unos 20 minutos de retraso. Marta Bernardo, la secretaria de Organizaci¨®n, llega cuando ya ha terminado. Otros dirigentes se ponen de perfil y directamente no se presentan. Alrededor del mediod¨ªa, Lobato acude a la notar¨ªa para reclamar el documento que tiene que entregar en el Supremo. Lo hace solo, pese a que en un primer momento le iba a acompa?ar un integrante de su equipo.

Ya por la tarde, Lobato se dedica a responder y a recibir llamadas de diputados y secretarios generales de agrupaciones en su casa. Las conversaciones van en la misma l¨ªnea: pr¨¢cticamente todos le dicen que tiene que dimitir antes del viernes. Que no puede ir al Tribunal Supremo como secretario general del PSOE de Madrid porque ser¨ªa la primera vez que eso ocurre. Le piden que tampoco vaya a Sevilla. Hay quienes le ruegan que d¨¦ un paso al lado para mantener cierto bagaje pol¨ªtico y no arrastrar al partido consigo.

El mi¨¦rcoles quienes logran hablar con ¨¦l lo ven tan tocado que dudan que llegue al viernes como secretario general. Sus sospechas se confirman pasadas las dos de la tarde. La agon¨ªa termina sin que Lobato haya hablado en toda la semana ¡°ni con Ferraz ni con La Moncloa¡±, seg¨²n su entorno. Poco despu¨¦s de renunciar en un comunicado a la prensa, se despide de su ejecutiva con el siguiente mensaje: ¡°Queridos compa?eros/as de la CER [Comisi¨®n Ejecutiva Regional], hoy finaliza mi etapa de SG [Secretario General] de Madrid. Y por ello la de toda la CER. Quiero agradeceros el trabajo que hab¨¦is hecho y el esfuerzo por poner en pie al partido despu¨¦s de pasar su peor momento tras los resultados electorales de 2021. Gracias por vuestras opiniones, criterio e iniciativas. Os animo a seguir con vuestro compromiso y trabajo en esta nueva etapa. Un abrazo, Juan¡±.

Es el primer mensaje en el chat de la direcci¨®n regional desde el domingo a las 23.36, cuando Bernardo remite el comunicado que unos minutos antes se hab¨ªa mandado a los medios de comunicaci¨®n. ¡°Es que es como una lista de difusi¨®n, no podemos participar en ¨¦l¡±, explica un miembro de la ejecutiva. ¡°Afortunadamente¡±, a?ade con sorna.

El paso atr¨¢s de Lobato resuelve otra situaci¨®n rocambolesca. Este mi¨¦rcoles estaba convocada a las 18.30 una asamblea participativa con la militancia de Tetu¨¢n. Se hab¨ªa cerrado la semana pasada y en la agrupaci¨®n estaban de los nervios. Nadie confirmaba que se fuese a celebrar tras la crisis abierta el fin de semana. El simbolismo era enorme y se habr¨ªa interpretado como otro desaire directo a Pedro S¨¢nchez, que dio sus primeros pasos como militante del PSOE precisamente en ese distrito de Madrid.

Finalmente, el PSOE de Madrid, la federaci¨®n con fama de ser la m¨¢s convulsa de todo el socialismo, acudir¨¢ a Sevilla dirigida por una gestora. La presidir¨¢ Isaura Leal, presidenta de la federaci¨®n. No es la primera vez. Ya lo hizo en 2021. Miembro de la Mesa del Congreso y fiel a S¨¢nchez, encabezar¨¢ la delegaci¨®n de los socialistas madrile?os al 41.? Congreso Federal. La cena que la delegaci¨®n iba a celebrar el viernes en Sevilla sigue adelante. Un nutrido grupo de los 89 delegados (la federaci¨®n m¨¢s numerosa tras la de Andaluc¨ªa, con 268, y Comunidad Valenciana, con 115) hab¨ªa cancelado su asistencia porque no quer¨ªan coincidir con Lobato. Aunque no ir¨¢, se hablar¨¢ de ¨¦l en todos los corrillos.