M¨²sica trashumante contra la despoblaci¨®n en la periferia de la periferia de Ja¨¦n
Varias aldeas de la provincia acogen un peculiar festival con aires de protesta para reclamar ¡°justicia po¨¦tica¡± para una sierra a la que no suele llegar nada de lo que en otros lugares es cotidiano
Existe una Espa?a vac¨ªa, y tambi¨¦n la periferia de la Espa?a vac¨ªa. Pero luego hay otra porci¨®n de territorio, oculto y m¨¢gico a la vez, la periferia de la periferia, que se resiste a entrar en un club tan denostado por la oficialidad. Es el caso de Santiago-Pontones, un pueblo con casi 700 kil¨®metros cuadrados ubicado en lo m¨¢s profundo de la jiennense Sierra de Segura, con m¨¢s de 80 min¨²sculos n¨²cleos de poblaci¨®n (algunos de ellos a tres horas de camino de la capital de la provincia), donde nunca antes han vivido la experiencia de acoger un festival de m¨²sica.
¡°Volver a Santiago-Pontones es revivir sensaciones inenarrables, el silencio, esa paz, esa grandiosidad¡±, comentaba este s¨¢bado Luis Miguel Pel¨¢ez, l¨ªder del veterano grupo Apache, al saludar a los centenares de incondicionales congregados en la apertura de Trashumantes Fest, un festival que quiere convertir la m¨²sica en un altavoz contra la realidad tan sombr¨ªa de la despoblaci¨®n. En el paraje paradisiaco de la ribera del r¨ªo Muso, junto a la aldea de La Matea, los lugare?os no hab¨ªan visto nunca un escenario de m¨¢s de ocho metros y casi 10.000 vatios de sonido.
¡°Aqu¨ª lo que queremos es aunar la m¨²sica con lugares de ensue?o y, sobre todo, reclamar justicia po¨¦tica para una sierra majestuosa e id¨ªlica donde nunca llega nada de lo que forma parte de la cotidianidad de otros lugares¡±, afirma el escritor y gestor cultural Andr¨¦s Ortiz Tafur, creador de este festival que durante los fines de semana del verano recorrer¨¢ todos los rincones del que es el municipio m¨¢s extenso del parque natural de Cazorla, Segura y Las Villas. Mientras tanto, Apache (la formaci¨®n que alcanz¨® la fama en los a?os ochenta con su tema Sobrevivir) hace las delicias del p¨²blico con sus genuinas versiones de grupos como Rolling Stones, Pink Floid, Police, Supertramp o Queen.
El cantautor Paco Segura tiene claro que volver a sus or¨ªgenes ha sido la mejor decisi¨®n que ha tomado en su vida. Con apenas 22 a?os y 10.000 pesetas (60 euros) en el bolsillo, dej¨® su Sierra de Segura, y puso rumbo al barrio madrile?o de Lavapi¨¦s, donde toc¨® y coincidi¨® en las salas de conciertos con su paisano Joaqu¨ªn Sabina o con Juan Antonio Muriel y Rafael Amor. Cuatro d¨¦cadas despu¨¦s, el m¨²sico jiennense ha vuelto a su pueblo, G¨¦nave, de apenas 590 habitantes, donde ha formado el grupo Aires Solano, con el que sigue a?adiendo temas a su larga discograf¨ªa. ¡°La m¨²sica es fundamental para poner en el mapa estos peque?os pueblos y para hacer frente a la despoblaci¨®n¡±, subraya Segura, ilusionado ante su pr¨®xima actuaci¨®n en la aldea de La Toba, otro lugar buc¨®lico de la Espa?a profunda.
El viaje de ida y vuelta de Segura, desde Madrid a la Sierra de Segura, sintetiza muy bien la filosof¨ªa del Trashumantes Fest. El nombre tiene que ver con la vieja pr¨¢ctica ganadera de la trashumancia y la reivindicaci¨®n de una profesi¨®n, el pastoreo, con siglos de historia y que fue precisamente el origen de esta poblaci¨®n creada por un grupo de trashumantes de Cuenca. En la actualidad, el municipio santiague?o, el ¨²nico de la provincia de Ja¨¦n sin cultivo del olivar, tiene en la caba?a ganadera y en la Indicaci¨®n Geogr¨¢fica Protegida (IGP) del cordero segure?o su principal argumento econ¨®mico.
Santiago-Pontones, un municipio que naci¨® en 1975 de la fusi¨®n de Santiago de la Espada y Pontones, ha perdido en las tres ¨²ltimas d¨¦cadas la mitad de su censo y apenas supera los 2.700 habitantes. Su densidad de poblaci¨®n, de solo cuatro habitantes por kil¨®metro cuadrado, no tiene nada que ver con la realidad demogr¨¢fica en Andaluc¨ªa y s¨ª con las provincias del interior de la Pen¨ªnsula que alumbran el t¨¦rmino de la Espa?a vac¨ªa. Pero de lo que puede presumir este enclave segure?o es de contar con un patrimonio vivo en sus m¨¢s de 80 n¨²cleos habitados. ¡°Queremos poner en el mapa esta tierra olvidada y al mismo tiempo explotar las muchas posibilidades que tienen estas aldeas para el turismo rural¡±, a?ade Ortiz Tafur, afincado en esta sierra desde hace m¨¢s de una d¨¦cada y que en su ¨²ltimo libro, Los ¨²ltimos deseos (Silex Ediciones) recoge en una agrupaci¨®n de textos ¨ªntimos ¡°las sensaciones de vivir en una Espa?a que te permite ir a tu ritmo¡±.
La localidad jiennense es la cuna del r¨ªo Segura (nace en Pontones) y por su extenso t¨¦rmino municipal tambi¨¦n discurre el Guadalquivir. Tafur ha querido impregnar el festival de un car¨¢cter trashumante, la misma filosof¨ªa que aplica desde hace tiempo al Bibliob¨²s, la biblioteca itinerante que llega a todas las aldeas, por peque?as que sean. ¡°Este movimiento cultural, con la m¨²sica como gran escaparate, es muy importante para elevar la autoestima de estos territorios¡±, afirma el artista gaditano Ignacio Lia?o que, con su formaci¨®n Va con me, llevar¨¢ su m¨²sica italiana a la aldea de Poyo Catal¨¢n, habitada ¨²nicamente por ganaderos trashumantes.
Trashumantes Fest est¨¢ promovido por el Ayuntamiento de Santiago-Pontones. El alcalde, Pascual Gonz¨¢lez, est¨¢ plenamente convencido de las muchas posibilidades que ofrece la cultura como palanca de desarrollo: ¡°Hay que valorizar el mundo rural, pero nos lo tenemos que creer nosotros mismos¡±.
Tambi¨¦n la iniciativa privada est¨¢ apostando por la m¨²sica como plataforma para la divulgaci¨®n de este municipio. Es el caso de En Tierra de Nadie Fest, que en su primera edici¨®n (prevista para el ¨²ltimo fin de semana de julio), se presentan como ¡°un festival inclusivo y con luchas sociales como los derechos LGTBIQ+, divulgaci¨®n de la cultura o lucha contra la despoblaci¨®n rural¡±, en palabras de Roc¨ªo Lara, una joven emprendedora que reclama mayor concienciaci¨®n social para dar visibilidad a estas zonas, la periferia de la periferia de la Espa?a vac¨ªa.
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