Nuevos cap¨ªtulos de la crisis del libro
El impacto del coronavirus sobre la campa?a de los manuales de texto y la pirater¨ªa por las redes sociales, pr¨®ximas amenazas para el sector
El mundo del libro, como el resto de la sociedad, est¨¢ angustiado. Y tras sobrepasar la veintena de d¨ªas de confinamiento, empieza a sentirse tanto o m¨¢s inquieto por la semana siguiente como por el primer futuro cuando amaine m¨ªnimamente la crisis del coronavirus. ¡°Muchos no podremos vivir de este oficio ni de este sector durante bastante tiempo¡±, resume la escritora Marta Sanz. La autora de peque?as mujeres rojas, novela con p¨¢tina negra que lanz¨® apenas 10 d¨ªas antes del inicio de la crisis, cree que ¡°la clase media del sector, en la que me incluyo, seamos autores, libreros, peque?as editoriales, traductores o correctores, se va a venir abajo y, como en la sociedad misma, se alzar¨¢n muros de contenci¨®n entre los que quiz¨¢ se salvar¨¢n y los que no; el tejido cultural sufrir¨¢¡±.
No es solo una sensaci¨®n. Miguel Barrero, presidente de la Federaci¨®n de Gremios de Editores de Espa?a y de la Federaci¨®n Espa?ola de C¨¢maras del Libro, baraja cifras inquietantes, como una paralizaci¨®n del sector en un 90%: ¡°Al inicio calculamos que perder¨ªamos un tercio del negocio, pero en tres semanas ya hemos visto que la afectaci¨®n ser¨¢, al menos, la equivalente a casi medio a?o de facturaci¨®n¡±. Tambi¨¦n detecta una falta de liquidez ¡°tremenda¡± que tensa una cadena donde ¡°se pueden flexibilizar pagos, pero nadie los puede paralizar: el sistema del libro colapsar¨ªa; la visi¨®n, y la respuesta, ha de ser integrada y ¨²nica¡±, defiende. Responde as¨ª t¨¢citamente a los planteamientos de 63 librer¨ªas catalanas de que el colectivo no pagara las liquidaciones de marzo a los distribuidores.
La situaci¨®n, si cabe, puede empeorar: ¡°Viene la campa?a del libro de texto, que va de mayo a julio, y nos preguntamos si para entonces estar¨¢n ya abiertos colegios y librer¨ªas; es un tercio de la facturaci¨®n del sector editorial y puede alcanzar hasta el 40% del negocio de muchas librer¨ªas y papeler¨ªas de Espa?a y del tejido del libro¡±, alerta Barrero. Seg¨²n datos de 2018, los ¨²ltimos p¨²blicos, los libros de texto no universitario facturaron 793,6 millones de euros. Este a?o, adem¨¢s, en algunas comunidades aut¨®nomas hay ajustes de contenido curricular, lo que a¨²n hace m¨¢s necesario para los editores el contacto con los claustros de profesores para presentar los nuevos libros adaptados.
Preocupa mucho tambi¨¦n a Barrero la situaci¨®n de las librer¨ªas: ¡°El d¨ªa D, el primero que las cosas vuelvan a una cierta normalidad, han de recibir pedidos de organismos p¨²blicos tambi¨¦n¡±. Por todo ello, pide a la Administraci¨®n, con la que ¡°a¨²n no hemos perdido la confianza¡±, que concrete y ejecute las propuestas anunciadas. ¡°Se impone la idea de los cuidados no solo a escala familiar o dom¨¦stica, sino a escala estatal frente a la crueldad de los mercados, su v¨¦rtigo, su novedad permanente, su confusi¨®n. Peque?as solidaridades, pero tambi¨¦n protecci¨®n p¨²blica de la cultura¡±, reclama de manera generosa y general Sanz.
La pirater¨ªa, triplicada
La escritora, con la misma mezcla de humor negro y angustia que destila La transformaci¨®n de Kafka, se ve estos d¨ªas ¡°como una cucaracha, panza arriba, braceando, para intentar que mi libro no desaparezca; una preocupaci¨®n que puede parecer mezquina ante tanto dolor de estos d¨ªas, pero si no, ser¨¢ como si no se hubiera publicado nunca tras a?os de trabajo¡±.
Bel Olid, escritora, traductora y presidenta de la Associaci¨® d¡¯Escriptors en Llengua Catalana, denuncia que ¡°la mayor¨ªa de las ayudas p¨²blicas existentes y las que se anuncian estos d¨ªas est¨¢n pensadas para empresas, no para aut¨®nomos, que somos mayor¨ªa en el sector¡± y lamenta que en estos a?os de lenta e incompleta recuperaci¨®n tras la crisis econ¨®mica de 2008 ¡°no se haya aprovechado para avanzar en el Estatuto del Artista¡± o la p¨¦rdida de ingresos del colectivo que hoy podr¨ªan paliar la situaci¨®n, como el del canon digital, ¡°que se han quedado fabricantes de equipos y tecnol¨®gicas¡±.
Por esa grieta se cuela la ¨²ltima amenaza: en estas tres semanas, seg¨²n los editores, se ha incrementado mucho la pirater¨ªa digital¡ a trav¨¦s de las redes sociales. ¡°Ahora no son plataformas ilegales o empresas; ahora es ya todo el mundo, es pura p¨®lvora¡±, se alarma Barrero. Seg¨²n estimaciones del Centro Espa?ol de Derechos Reprogr¨¢ficos (Cedro), en marzo la pirater¨ªa de libros, peri¨®dicos y revistas en servicios de mensajer¨ªa (WhatsApp, Facebook, Telegram...) se habr¨ªa triplicado, seg¨²n informa a este diario un portavoz de la entidad de gesti¨®n.
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