Gaud¨ª busca reconciliarse con los barceloneses
Siete edificios del arquitecto reabrir¨¢n, de forma escalonada a partir de la semana que viene, con la mirada puesta en el p¨²blico local
La Torre Bellesguard el martes, el Palau G¨¹ell el d¨ªa 16, La Pedrera, Casa Batll¨®, Casa Vicens y la Cripta G¨¹ell, entre el 1 y el 15 de julio, mientras que la Sagrada Familia no tiene fecha de apertura y el Park G¨¹ell lleva abierto desde el 20 de mayo, como un parque m¨¢s de Barcelona, sin restricciones y gratis, algo impensable hace tres meses. Es la radiograf¨ªa del desconfinamiento de los edificios barceloneses de Antoni Gaud¨ª; que cerraron de forma brusca y a la vez el 13 de marzo, pero reabrir¨¢n, de forma escalonada, aunque unidos por el mismo objetivo: conseguir que los ciudadanos de Barcelona, un p¨²blico minoritario hasta ahora (con cifras en la mayor¨ªa de edificios de menos del 2%), los visite para poder as¨ª minimizar el impacto econ¨®mico que representa la ausencia de turistas, m¨¢s de 10 millones al a?o; un gran negocio que mueve tambi¨¦n millones de euros alrededor del fen¨®meno Gaud¨ª.
Torre Bellesguard. Es el primer edificio que volver¨¢ a la actividad coincidiendo con el pase a la fase 2, en la que est¨¢ permitida la apertura de monumentos y yacimientos. Aunque sus responsables no han confirmado la fecha de reapertura venden entradas online para el martes 9. Fuentes de esta casa, construida entre 1900 y 1909 en la calle Bellesguard, 16, propiedad de Catalana de Occidente desde 2018, se limitan a asegurar que llevan d¨ªas trabajando para implementar las medidas de seguridad para visitantes y empleados, como la toma de temperatura diaria a empleados y visitantes, que en caso de que tengan fiebre no se les permitir¨¢ entrar y se les devolver¨¢ el importe de la entrada; una medida in¨¦dita, por ahora, en Barcelona.
Como en el resto de viviendas y edificios se instalar¨¢n dispensadores de hidrogel, se intensificar¨¢ la limpieza, se obligar¨¢ el uso de la mascarilla durante toda la visita, se recomendar¨¢ el pago con tarjeta y la compra online de las entradas para reservar y ajustar los horarios de las visitas y se instalar¨¢ la se?al¨ªtica para marcar las v¨ªas de circulaci¨®n.
Palau G¨¹ell. Reabrir¨¢ el 16 de junio, seg¨²n Guillem Mundet, director de este edificio propiedad de la Diputaci¨®n de Barcelona construido entre 1886 y 1890 en la calle Nou de la Rambla, 3, que asegura que lo hacen lo antes posible ¡°por la responsabilidad de ser un edificio p¨²blico¡±. La reducci¨®n del tercio del aforo comportar¨¢ que solo pueda haber en su interior 55 personas. ¡°El aforo normal, por razones de carga, es de 188 personas, con un m¨¢ximo al d¨ªa de 1.150 en invierno y 1.500 en verano¡±. El a?o pasado lo visitaron 205.000 personas, el 93% turistas y solo el 1,6% barceloneses. ¡°Es un problema derivado del hecho de que ha estado mucho tiempo cerrado por reformas y no forma parte del imaginario de Gaud¨ª. Tambi¨¦n que se asocie a todo lo de Gaud¨ª con colas y turistas como la Sagrada familia", aunque tambi¨¦n apunta que son muchos barceloneses los que confunden palau con parque, por la similitud de nombres.
Seg¨²n Mundet, ¡°la covid ha acelerado el inter¨¦s por el p¨²blico local, que ahora ser¨¢ una prioridad y que intentaremos atraer con campa?as¡±. Abrir¨¢n con la exposici¨®n ¡°comod¨ªn¡± La cara oculta del Palau Guell, con fotos de Ramon Manen y a finales de a?o con la muestra dedicada a Aleix Clap¨¦s, comisariada por Josep Casamartina y Carlos Lupercio.
Cripta G¨¹ell. Este edificio, construido entre 1898-1914, y situado en la colonia industrial que Eusebi G¨¹ell cre¨® en Santa Coloma de Cervell¨®, cercana a Barcelona, es propiedad de un consorcio p¨²blico de varias administraciones. ¡°Abriremos el 1 o el 15 de julio, en funci¨®n de la respuesta de los visitantes a la reapertura de otros equipamientos culturales¡±, explica Andr¨¦s Andr¨¦s, responsable t¨¦cnico de este espacio que recibi¨® en 2019 un r¨¦cord de 92.600 visitantes, el 75% turistas y escolares. ¡°No aspiramos a crecer m¨¢s porque en la colonia vive gente y no queremos que sea un parque tem¨¢tico. En principio solo reabriremos los fines de semana, que es cuando nos pueden visitar los barceloneses e iremos aumentando los d¨ªas de forma progresiva¡±.
Hasta m¨¢s adelante no volver¨¢ abrir¨¢ el centro de interpretaci¨®n instalado en uno de los edificios del recinto en el que se explica, en la planta baja la historia de la colonia, y en la superior, la construcci¨®n, inconclusa, de la iglesia de la colonia de la que solo se pudo terminar la cripta.
Casa Vicens. La primera casa creada por Gaud¨ª, entre 1883 y 1885 en la calle Carolines, 20, volver¨¢ a abrir ¡°en la primera o segunda semana de julio¡±, explica su director Emili Masferrer, sin concretar. ¡°Fijamos esta fecha a largo plazo para no estar pendientes del BOE. Es la casa m¨¢s peque?a de Gaud¨ª y siempre hemos puesto menos entradas a la venta para conseguir visitas sin prisas y libres, algo que encaja con el mundo que viene ahora¡±, explica. Casa Vicens fue adquirida en 2014 por MoraBanc de Andorra que la abri¨® al p¨²blico, tras restaurarla, en 2017. El a?o pasado recibi¨® 160.000 visitantes. ¡°La casa puede albergar 350 personas a la vez, pero antes de la covid nunca ten¨ªamos m¨¢s de 120 o 130 porque lo quer¨ªamos as¨ª. Es nuestro ADN¡±.
La mayor diferencia de la visita ser¨¢ que se establecer¨¢ un recorrido de una hora y cuarto, para que la gente no se cruce. ¡°El resto ser¨¢ igual, porque tenemos una ratio muy superior a los otros edificios de Gaud¨ª de visitantes locales, en torno al 20%, mientras el resto no llega al 2% o el 3%¡±. En zonas peque?as, como la llamada sala de fumadores, solo podr¨¢n entrar las personas de la unidad de la visita, el resto aguardar¨¢n fuera. Tampoco har¨¢ una reducci¨®n de tarifas. ¡°Un adulto puede visitarla por 16 euros o menos, aprovechando las ofertas. Los que han cobrado 25 euros hasta ahora s¨ª que tendr¨¢n que plantearse ofertas, nosotros no¡±. No han calculado las p¨¦rdidas por el cierre, pero s¨ª que hasta finales de a?o los ingresos ser¨¢n un 30% menos.
Casa Batll¨®. No abrir¨¢n hasta el mes de julio y aunque desde este edificio de paseo de Gr¨¤cia, construido en 1906, concretar fecha exacta, es posible adquirir entradas por internet a partir del 1 de julio. Seg¨²n Gary Gautier, director de esta casa propiedad de la familia Bernat desde los a?os 1990 que recibi¨® en 2019 m¨¢s de un mill¨®n de visitantes, un 10% espa?oles y solo 1,5% catalanes, ¡°el cierre nos ha hecho perder unos 250.000 visitantes¡±. Tambi¨¦n que trabajan para conseguir que ¡°la visita a la casa sea 100% segura¡± y que ¡°los barceloneses puedan aprovechar esta oportunidad ¨²nica, en la que la arquitectura de su ciudad podr¨¢ disfrutarse sin los miles de turistas que visitan este edificio que les pertenece¡±.
Para conseguirlo trabajan en ¡°propuestas que diluyan el posible freno econ¨®mico que el peso de la entrada puede suponer y dise?ando nuevas actividades de inter¨¦s que permitan disfrutar de la arquitectura m¨¢s all¨¢ de la visita muse¨ªstica¡±. Hasta ahora las entradas para residentes oscilaban entre 15 y 25 euros, diez m¨¢s barato que para visitantes extranjeros.
La Pedrera. ¡°El 21 de mayo el patronato acord¨® que los espacios naturales y culturales no abrir¨ªan hasta el 15 de julio¡±, explica Marta Lacambra, directora general de la Fundacion Catalunya-La Pedrera, propietaria del edificio construido entre 1906 y 1912 en el paseo de Gr¨¤cia, que recibi¨® en 2019 un total de 1,3 millones de visitantes, un 12% local, 60.000 de ellos escolares. ¡°El aforo es de 700 personas; cuando abramos es muy probable que estemos en fase 3 por lo que podr¨¢n visitarla la mitad, 350 personas, que distribuidas a lo largo de todo el circuito es algo muy tranquilizador¡±, explica Lacambra, que describe que las visitas ser¨¢n como hasta ahora, pero, ¡°debido a la modulaci¨®n de horarios, m¨¢s tranquilas, pausadas y c¨®modas, adem¨¢s de seguras¡±. El cierre del edificio desde marzo ha representado ¡°p¨¦rdidas de m¨¢s de 6,5 millones de euros¡±.
Por suerte, seg¨²n Lacambra, ¡°enero y la primera mitad de febrero fueron excepcionales y nos permiti¨® genera ingresos¡±. 150 trabajadores, monitores de los equipamientos, -tanto de La Pedrera, como del M¨®n Sant Benet, el monasterio que la fundaci¨®n tiene en el Bages y de los dos espacios M¨®nNatura que tienen en el Pirineo y en el Delta del Ebre-, de los 500 de la fundaci¨®n, est¨¢n sujetos a un ERTE que ¡°acabar¨¢ cuando los edificios reabran¡±, remarca Lacambra. Eso y el hecho de que ¡°hayamos puesto los edificios a hibernar nos ha permitido ajustar el gasto para poder sobrevivir en una fundaci¨®n comprometida y un equipamiento diferencial que es mucho m¨¢s que una fachada, ya que los recursos que genera se dedican a preservar el patrimonio cultural, natural y a programas sociales¡±, recuerda Lacambra.
La exposici¨®n del fot¨®grafo norteamericano Wiliam Klein que cerr¨® a la semana de inaugurarse se prorrogar¨¢ hasta octubre, mientras que la prevista sobre Andreu Alfaro pasar¨¢ a 2021.
Sagrada Familia. Los responsables del edificio m¨¢s visitado de Barcelona, 4,5 millones en 2019, no aclaran ni cu¨¢ndo ni c¨®mo abrir¨¢n. Las obras de construcci¨®n de las torres centrales, que ya superan la obra que hizo Gaud¨ª antes de morir en 1926, est¨¢n paralizadas y no se reanudar¨¢n hasta que las visitas internacionales no vuelvan -las nacionales no llegan al 6% del total-; una situaci¨®n de incertidumbre que hace peligrar incluso las previsiones de terminar el templo en 2026, centenario de la muerte del arquitecto, que los responsables se hab¨ªa fijado antes de la pandemia. Poner en marcha este transatl¨¢ntico y abrirlo tiene unos grandes costes de personal que si no se garantizan los miles de visitantes al d¨ªa es dif¨ªcil cubrir gasto y las fronteras internacionales no se abrir¨¢n hasta el 1 de julio. Para este a?o estaba previsto ingresar, cobrando una entrada media de 25,7 euros, 103 millones de euros, 55 de ellos para financiar las obras. La mitad del centenar de trabajadores de la plantilla est¨¢n en ERTE. El coste de los tres meses de par¨¢lisis se ha cuantificado en 24 millones menos de ingresos.
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