Sobrevivir a la crisis de la prensa

En los ¨²ltimos a?os algunos quioscos han ido bajando la persiana en Barcelona. De 333 que hay, 61 est¨¢n cerrados. Mientras, el Ayuntamiento est¨¢ probando un plan piloto para reabrir algunos a trav¨¦s de una cooperativa, Diverscoop, que emplea a personas con discapacidad y ofrece productos artesanos m¨¢s all¨¢ de la prensa cl¨¢sica. Tambi¨¦n han abierto puestos con renovada imagen y una oferta de productos m¨¢s espec¨ªfica o gourmet, bajo el nombre de News & Coffe, Odd Kiosk o Good News. Adem¨¢s de anglicismos para actualizar el comercio, que pierde clientes por la crisis de la prensa escrita, comparten el caf¨¦ y otras bebidas o boller¨ªa como algo m¨¢s que ofrecer a los clientes.

Ya hace un a?o que Pablo Pardo, consultor gastron¨®mico, abri¨® News&Coffee en el paseo de Sant Joan esquina con Ausi¨¤s March. Cuenta que llevaba m¨¢s de un a?o pensando c¨®mo dar una vuelta a los quioscos para convertirlos en negocios atractivos, mientras ve¨ªa como algunos cerraban y ¡°otros se llenaban de souvenirs¡±. Su apuesta fue una est¨¦tica m¨¢s moderna y limpia, y a?adir alg¨²n producto nuevo como el caf¨¦ de especialidad o bebidas para llevar. El quiosco tiene prensa nacional e internacional y una oferta de revistas especializadas de moda, arte, arquitectura o gastronom¨ªa, muchas editadas en Barcelona. ¡°La vibra que hay en el quiosco es muy guay, se junta el se?or mayor con el chico que viene a buscar el caf¨¦¡±, cuenta Pardo. Reconoce que no es un negocio f¨¢cil, porque ¡°los m¨¢rgenes de las publicaciones son bajos¡±, pero hace poco ha abierto dos m¨¢s, en la plaza de Francesc Maci¨¤ y en la de la Vila de Gr¨¤cia.

La idea ya ha sido replicada por Odd Kiosk, en la calle de Val¨¨ncia. Es parecido pero enfocado a la ¡°tem¨¢tica queer¡±, cuenta Ivan Jim¨¦nez que, junto a Txema Moreno, lo dise?aron durante el confinamiento. Predominan las publicaciones del mundo LGTBI y tienen obras de artistas que visibilizan el colectivo. Tambi¨¦n tienen caf¨¦, bebidas, boller¨ªa y snacks, de elaboradores de proximidad como Nomad o Demasi¨¦.

En la misma l¨ªnea son dos quioscos llamados Good News, que abrieron en la calle Balmes y en la plaza de Sarri¨¤ en oto?o. ¡°Queremos transmitir buen rollo y que sea un punto de encuentro entre vecinos¡±, dice Lucas de Gispert, uno de los socios de este proyecto, que incorpora m¨¢s variedad de bebidas y boller¨ªa o snacks para llevar.

El plan piloto del Ayuntamiento para los quioscos, que se abren con una concesi¨®n p¨²blica que cuenta con un canon de publicidad, es diferente. En 2018, viendo como cerraban, hicieron una evaluaci¨®n de su viabilidad y se dieron cuenta de que depend¨ªan de los ingresos por publicidad de la administraci¨®n porque la venta de peri¨®dicos y revistas va a la baja. Han puesto en marcha un plan para evaluar usos alternativos o complementarios, y el objetivo es abrir 10 quioscos a trav¨¦s de una cooperativa que da empleo a personas con diversidad funcional. De momento se han abierto cuatro, en la calle Aribau, en la avenida Paral¡¤lel, en Ram¨®n Alb¨® y Guipuscoa. Adem¨¢s de prensa, venden pulseras y llaveros de la Fundaci¨® Tallers Catalunya, bolsas y mochilas de la Fundaci¨® Xamfr¨¤, mascarillas y envoltorios para bocadillos de tela de la Fundaci¨® Estel Tapia, bolsos de tejido reciclado de la Fundaci¨® Pare Manel o jabones y pulseras de la Fundaci¨® taller Artes¨¤.

La intenci¨®n es ir m¨¢s y este a?o la idea es convertir quioscos en puntos de microlog¨ªstica y gesti¨®n, lo que permitir¨ªa a los vecinos del barrio recibir paquetes en el quiosco. Pero el futuro es incierto. Desde el Ayuntamiento cuentan que estas experiencias tienen que servir para definir y pactar el futuro de los quioscos con el sector. Los quioscos de la Ramblas tienen una regulaci¨®n espec¨ªfica, y all¨ª s¨ª que se permiten otros usos como las florister¨ªas o las helader¨ªas.

Seg¨²n un estudio del Ayuntamiento de Barcelona y la Universitat Aut¨°noma de Barcelona (UAB) de 2018, el modelo de quioscos de prensa est¨¢ en crisis en todas partes. Algunas ciudades los han reconvertido con finalidades sociales, econ¨®micas, ambientales o culturales tan dispares como una minibiblioteca, un banco p¨²blico de juguetes, un punto de ayuda e inserci¨®n escolar, un punto de venta de productos agr¨ªcolas locales, un dep¨®sito p¨²blico de herramientas de jard¨ªn, un punto de recogida de agua de lluvia o una consigna para guardar equipaje.