El t¨²nel de Gl¨°ries, a cuatro meses de su apertura

Casi seis a?os despu¨¦s de comenzar las obras, en los que ha habido interrupciones (primero la paralizaci¨®n por retrasos y sospechas de corrupci¨®n y despu¨¦s la pandemia), el t¨²nel que se construye en la plaza de les Gl¨°ries de Barcelona para soterrar la Gran Via, encara los ¨²ltimos cuatro meses de obras. Una obra que en su d¨ªa se acord¨® como un mal menor para esconder los coches bajo tierra y poder hacer una plaza en uno de los centros de la ciudad que dibuj¨® Ildefons Cerd¨¤ al concebir el Eixample: el cruce entre la Gran Via, la Diagonal y la Meridiana.

La obra, que acabar¨¢ costando casi 200 millones de euros (192 millones es la cifra oficial proporcionada este jueves durante una visita de prensa y autoridades; el coste final no se sabr¨¢ hasta que acaben las obras), consiste en dos galer¨ªas de un kil¨®metro de distancia. Arrancan en la calle de Padilla y salen en la rambla del Poblenou. En el interior, habr¨¢ dos carriles para veh¨ªculos privados y un carril bus por sentido, una reserva para transporte p¨²blico in¨¦dita en los t¨²neles de la ciudad.

Construir el t¨²nel ha sido de una enorme complejidad. Para pasar por debajo de cuatro t¨²neles de l¨ªneas ferroviarias (tres de cercan¨ªas y el metro), los dos ojos del t¨²nel bajan hasta 25 metros bajo tierra. El t¨²nel, pues, tiene un notable desnivel, de hasta el 7% en la bajada desde la calle de Padilla hasta el punto m¨¢s profundo. Para hacerlo posible garantizando que no se moviera nada y que las dos galer¨ªas sean estancas (que no se cuele agua) se han construido pantallas de cemento de 52 metros de profundidad (el equivalente a un edificio de 17 plantas) y se han construido 42 pozos desde los que se han bombeado 25.000 metros c¨²bicos de agua al d¨ªa.

Tan dif¨ªcil ha sido la construcci¨®n, que tambi¨¦n supuso reforzar con cajones los t¨²neles ferroviarios. En el tramo m¨¢s cr¨ªtico se avanzaban solo tres metros cada 21 d¨ªas, explic¨® ayer ?ngel S¨¢nchez, el director general de Bimsa, la empresa municipal de obras. A lo largo del t¨²nel y su entorno, a?adi¨®, se han auscultado infraestructuras y edificios en 2.100 puntos de control y se han tomado medidas v¨ªa sat¨¦lite, a?adi¨®. No se ha movido nada, asegur¨®. Atr¨¢s quedan todos estos trabajos de obra complej¨ªsima y al t¨²nel solo le falta terminar las instalaciones: pavimentar, colocar las pantallas laterales, laterales, iluminaci¨®n, sistemas de seguridad o ventilaci¨®n.

En la primera visita de autoridades al t¨²nel, con prensa y representantes vecinales, la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, destac¨® la recta final de una obra ¡°esperada y demandada¡± que permitir¨¢ terminar la plaza, con ¡°12 hect¨¢reas de verde urbano¡± y ¡°cohesionar los barrios del entorno, separados durante d¨¦cadas por infraestructuras sin sentido¡±. Los vecinos celebraron el fin de las obras, pero reivindicaron tambi¨¦n los equipamientos pendientes.

En nombre de las asociaciones vecinales, Jaume Badenes celebr¨® la finalizaci¨®n del t¨²nel y el horizonte de la plaza en lo que calific¨® de ¡°punto negro de la ciudad no resuelto que hac¨ªa vivir a los vecinos de espaldas¡± y reivindic¨® que si en el enclave habr¨¢ una plaza ser¨¢ por el tes¨®n de la ciudadan¨ªa. En un ejercicio medido y equilibrado, Badenes aplaudi¨® y felicit¨® a los t¨¦cnicos por la construcci¨®n del t¨²nel ¡°una soluci¨®n t¨¦cnica y espectacular¡±, pero record¨® que ¡°es reflejo de la ciudad que ha estado pensada para los coches¡±.