La ¡®crisis sarda¡¯ descoloca a Aragon¨¨s ante el debate de pol¨ªtica general del Parlament

Pere Aragon¨¨s y su equipo sab¨ªan que este oto?o no ser¨ªa pl¨¢cido. Los retrasos en la investidura del nuevo president, por las discrepancias del independentismo, llevaron a que el calendario del ¨²ltimo cuatrimestre de 2021 fuera endiablado con la cita clave del debate de pol¨ªtica general. Un viacrucis con otras estaciones: pacto para la ampliaci¨®n de El Prat, Diada peligrosamente cercana a la mesa de di¨¢logo, la m¨¢s que segura pelea interna por la negociaci¨®n de los Presupuestos Generales, y la cuadratura del c¨ªrculo de las cuentas catalanas con la CUP.

Antes de que el jueves por la noche trascendiera la crisis sarda ¡ªla detenci¨®n del expresident Carles Puigdemont al aterrizar en Cerde?a, por la euroorden vigente en su contra por el juicio al proc¨¦s¡ª, en el Palau de la Generalitat se empezaba a respirar con m¨¢s tranquilidad. Consideraban que la estaci¨®n de la mesa de di¨¢logo, con crisis con Junts de por medio por no designar a consellers como representantes, se hab¨ªa superado con nota. La v¨ªa del di¨¢logo hab¨ªa ganado el pulso y Aragon¨¨s sal¨ªa reforzado al mostrar su autoridad.

Si bien en los 100 primeros d¨ªas de Govern se hab¨ªa logrado encapsular el ruido entre sus dos almas, la divisi¨®n por la mesa y el choque por la ampliaci¨®n del aeropuerto ense?aron de nuevo las fracturas entre ERC y Junts. Lo que tal vez en otro momento habr¨ªa sido motivo para liquidar un gobierno, aqu¨ª se solvent¨® con una reuni¨®n entre Aragon¨¨s y su n¨²mero dos y voz cantante de Junts en el Ejecutivo, Jordi Puigner¨®. Por un lado, legalmente no se pueden convocar a¨²n otras elecciones. Por otro, a ninguno de los dos les conviene.

Presidente y vicepresidente sellaron con una reuni¨®n ¨ªntima la intenci¨®n de aislar al Ejecutivo de la friega entre partidos. Pasando por alto, eso as¨ª, lo que podr¨ªa ser el pecado m¨¢s grande de un gobierno de coalici¨®n: la falta de confianza end¨¦mica del independentismo. Tanto en El Prat como en la mesa de di¨¢logo todo se sosten¨ªa por pactos no escritos que ambos se acusan de haber violado.

A ese acercamiento le vino a las mil maravillas que el martes, en la reuni¨®n semanal del Ejecutivo catal¨¢n, se aprobara el plan de Gobierno. M¨¢s de 1.500 iniciativas para guiar la legislatura que sirven para esgrimir que los socios puede que tengan sus diferencias, pero tambi¨¦n trabajan. La primera de las propuestas, curiosamente, era la misma mesa de di¨¢logo sobre el conflicto pol¨ªtico.

Ambas partes quitaron hierro a sus diferencias al respecto. Cada una se siente c¨®moda con el redactado del plan. En Junts insisten en que tienen derecho a escoger a representantes en la mesa m¨¢s all¨¢ de los consejeros. Algunas voces internas criticaron c¨®mo se exterioriz¨® la pol¨¦mica, pero, al final, entienden que ese di¨¢logo no es el suyo. Y aunque sienten que a la larga el tiempo les dar¨¢ la raz¨®n y no habr¨¢ pacto con el Estado, hab¨ªa cierta sensaci¨®n de perder iniciativa.

Aragon¨¨s se preparaba para encarar el debate de pol¨ªtica general que empieza este martes con el plan de Gobierno bajo el brazo y con la idea de vender un gran proyecto de gesti¨®n. Se hablar¨ªa de autodeterminaci¨®n, evidentemente, pero se quer¨ªa poner de relieve el ¡°mientras tanto¡±: 5.000 millones de euros m¨¢s para la atenci¨®n primaria, universalizaci¨®n de las guarder¨ªas, 5.000 viviendas m¨¢s para el parque p¨²blico cada a?o... Una manera tambi¨¦n de allanar otro de los obst¨¢culos en el camino: el s¨ª de los anticapitalistas a las cuentas.

Y lleg¨® el jueves. Aunque el independentismo no se demor¨® en unir su voz para denunciar una detenci¨®n que considera ilegal, aqu¨ª las agendas volvieron a dividirse. No hubo tiempo ni para celebrar lo que ven como otra derrota ¡°de Espa?a¡±, con la jueza italiana apoyando que Puigdemont tiene ¡°intacta¡± su inmunidad para ejercer como europarlamentario.

En Junts creen que sobran los motivos para usar el incidente contra el Estado y poner en evidencia sus ¡°trampas¡±. Adem¨¢s de aprovechar el foco sobre el expresident huido, la formaci¨®n ve en el debate parlamentario de la pr¨®xima semana el escenario perfecto para seguir con su denuncia. Aragon¨¨s fue a ver a Puigdemont en ferri sabiendo que era un paso obligado, pero con la idea de que la v¨ªa del di¨¢logo no peligre. ¡°No lo ponen f¨¢cil¡±, acepta Presidencia, que recuerda la perplejidad con la que Govern recibi¨® el borrador de la ley audiovisual del Gobierno central y que de entrada no plantea ninguna ayuda especial para el catal¨¢n y las otras lenguas cooficiales.