Mientras se apagaba, Pau Riba segu¨ªa pensando en m¨²sica

Hist¨°ria de la m¨²sica del segle XX (l¡¯electr¨°nica), es el ¨²ltimo libro que escribi¨® Pau Riba, fallecido el pasado 6 de marzo a los 73 a?os de un c¨¢ncer de p¨¢ncreas y que gracias a la celeridad de su editorial, Males Herbes, pudo leer su autor. El volumen lo present¨® en la librer¨ªa Calders Memi March, auto calificada como ¡°compa?era de los ¨²ltimos 27 a?os de vida de Pau, madre de Lluch Riba y porno-enfermera durante el ¨²ltimo a?o¡±, acompa?ada por representantes de la editorial, por Oriol Malet, responsable de la portada -¡°s¨®lo manos de lo que Pau concibi¨®¡±-, y Neil Harbisson, compa?ero de proyectos musicales de Pau y primer ciborg oficialmente reconocido como tal. Memi situ¨® el proyecto, que arranc¨® en la exposici¨®n Altres M¨²siques Natives (1995), a partir de la cual V¨ªctor Nubla, otro m¨²sico representado en su faceta literaria por Males Herbes, y Juli¨¤ Guillam¨®n le pidieron a Pau un texto. Ese fue el embri¨®n de esta historia escrita en arrebatos a lo largo de los a?os cuando la m¨²sica no le ocupaba.

¡°Pau pod¨ªa escribir a cualquier hora, no perd¨ªa el hilo y cuando escrib¨ªa el tiempo dejaba de importar fuese noche, amanecer o atardecer¡±, recordaba Memi. El remate del libro, tambi¨¦n hijo de las conversaciones de Pau con V¨ªctor Nubla, ¡°en quien Pau ve¨ªa que el underground todav¨ªa exist¨ªa en nuestros d¨ªas¡±, record¨® Memi, fue apremiado por la enfermedad y por un trabajo sordo de documentaci¨®n previa de Memi, tambi¨¦n parcial correctora.

El libro, como coment¨® Memi, es hijo de la educaci¨®n no compartimentada que Pau recibi¨® en la escuela Isabel de Villena. Su historia no es una historia de m¨²sicos, o una historia est¨¦tica de la m¨²sica, es la historia de todos los avances e inventos que, aunque generalmente no nacidos para impulsar la m¨²sica, le han acabado por dar su fisonom¨ªa en el siglo XX. Arrancando en el siglo XIX, acabando en el punk y dejando de lado la explosi¨®n del mundo digital -Pau siempre declaraba que eso del techno y la electr¨®nica actual, aun interes¨¢ndole, le pillaba lejos-, se repasa desde el tel¨¦fono a la v¨¢lvula, el disco de piedra, la radio, el electr¨®n y las ondas Martenot, se reflexiona sobre el sonido, la voz, la vibraci¨®n, se establecen paralelismos entre m¨²sica, arquitectura y aritm¨¦tica, entre m¨²sica y pintura (Pau reconoce que hubiese sido pintor de ser la pintura potencialmente tan ruidosa como la m¨²sica). El autor se acuerda de aquellos perdedores que cardaron la lana sin llevarse la fama, caso de Elisha Gray, quien junto con Antonio Menucci han sido opacados por Graham Bell como inventores del tel¨¦fono.

Pero hay m¨¢s. En este canto a la tecnolog¨ªa, que podr¨ªa parecer impropio de un hippy ¡ªclaro est¨¢ que Pau fue un hippy curioso, presocr¨¢tico, como le defini¨® su editor, Ricard Planas¡ª, tambi¨¦n hay recuerdos de c¨®mo su familia desechaba la copla y el flamenco solo porque se cantaba en espa?ol y el espa?ol era franquista; un repaso al rock y sus derivados, siempre vinculados a la electricidad, alma mater e hilo conductor del libro; cap¨ªtulos dedicados a Satie, Schoemberg, Cage, Varese, Schaeffer y, como dice Pau ¡°a todos aquellos que han experimentado y abrieron nuevos caminos¡±. Hay tambi¨¦n drogas, iron¨ªa, Elvis, etimolog¨ªa -otra de las pasiones de Pau-, guitarra, Chuck Berry, punk, Kraftwerk y humor: a prop¨®sito de John Napier escribe ¡°(era un cerebro privilegiado) hoy lo llamar¨ªamos ni?o precoz, por mucho que la precocidad en aquellos tiempos en que la media de vida era tan inferior a la actual, era casi ley de vida¡­.o espabilabas antes o mor¨ªas (sin conseguir nada)¡±.

Eso s¨ª, el libro, divertido, ameno, con una prosa que se pega como los buenos estribillos, tiene un grave problema: ?en qu¨¦ apartado de las librer¨ªas se puede colocar una obra que es ensayo, historia, memorias, teor¨ªa del arte y filosof¨ªa? Probablemente junto a Hist¨°ria de l¡¯univers, su pen¨²ltimo libro y alma gemela del ¨²ltimo. Finalmente, un aviso para navegantes, Memi March dijo que s¨®lo se ha publicado un 3% de lo que Pau cre¨® en vida en todas las facetas art¨ªsticas que abord¨®, ?estamos en la orilla de un oc¨¦ano?

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