La Fundaci¨®n Bofill propone cerrar aulas de la concertada para reducir los guetos escolares en Catalu?a
Un estudio de la entidad refleja que el pr¨®ximo curso un 11% de las plazas quedar¨¢n vacantes, pese a la reducci¨®n de ratios programada
Cerrar grupos de manera selectiva, tanto en escuelas p¨²blicas como, especialmente, en las concertadas. Esta es la receta que prescribe la Fundaci¨®n Bofill, experta en temas educativos, para luchar contra la segregaci¨®n escolar. Y es que el pr¨®ximo curso un 11% de las plazas de P3 quedar¨¢n vacantes, lo que permite a las familias tener m¨¢s margen para optar por escuelas que no sean guetos. La fundaci¨®n ha presentado este jueves el estudio La sobreoferta educativa en Catalu?a, 2022, en base a datos de 123 municipios que superan los 10.000 habitantes, en que piden al Departamento de Educaci¨®n una planificaci¨®n m¨¢s exhaustiva de las plazas, poniendo el foco en la concertada.
Educaci¨®n anunci¨® una bajada generalizada de las ratios de P3 ¡ªde 25 a 20 alumnos por aula¡ª para el pr¨®ximo curso, una medida que debe evitar el cierre masivo de grupos ante el descenso imparable de la natalidad (en septiembre habr¨¢ 3.474 alumnos menos de P3). El descenso de la ratio se aplicar¨¢ en el 86% de los grupos en la p¨²blica y en el 37% en la concertada. Esta diferencia se debe a que la privada tiene fijada por normativa la ratio para lograr la financiaci¨®n p¨²blica y el departamento est¨¢ pendiente de publicar el nuevo decreto de conciertos para poder intervenir m¨¢s en estos centros.
Seg¨²n el estudio de la Bofill, el marcado descenso de la natalidad ha generado en los ¨²ltimos cursos una sobreoferta de unas 10.000 plazas (aproximadamente un 15%), una cifra que, gracias al descenso de las ratios, bajar¨¢ hasta las 7.200 plazas vac¨ªas (un 11%). La mayor¨ªa de las vacantes se concentran las concertadas y en centros que acogen a m¨¢s alumnos vulnerables ¡ªconocidos como centros de alta o m¨¢xima complejidad¡ª. El problema yace en que cuando se incorporan alumnos en mitad del curso ¡ªla llamada matr¨ªcula viva¡ª, que acostumbran a ser alumnos de entornos empobrecidos, son los centros gueto los que los acogen, agudizando as¨ª la problem¨¢tica.
El exceso de oferta est¨¢ permitiendo, seg¨²n el estudio, que el 13% de los alumnos se escolaricen fuera de su barrio o localidad, y la mayor¨ªa de estos (un 63%) lo hacen en centros concertados, un sector donde las familias tienen menos problemas de acceso, ya que cuentan con una oferta muy grande de plazas que muchos no llenan.
La Fundaci¨®n considera que la participaci¨®n de la concertada en la lucha contra la segregaci¨®n no es suficiente. A nivel global, en los municipios de m¨¢s de 10.000 habitantes, el conjunto de plazas de P3 de la p¨²blica caer¨¢ un 11% por la reducci¨®n de ratios, mientras que en la concertada solo el 8%, seg¨²n datos de la Bofill. ¡°Estamos financiando con fondos p¨²blicos estos centros, as¨ª que la corresponsabilidad debe ser la misma que en la p¨²blica¡±, ha incidido el director de la fundaci¨®n, Ismael Palac¨ªn.
Esto se explica por el hecho de que la concertada ha decidido voluntariamente si reduc¨ªa la ratio, una decisi¨®n que no agrada a las patronales porque ello se traduce en una reducci¨®n de ingresos. Solo en casos puntuales, como en Terrassa, se ha logrado un acuerdo municipal para que este recorte de ratio afecte por igual a todas las escuelas.
Caso aparte es la ciudad de Barcelona, donde predomina la oferta de la concertada. En este caso, la reducci¨®n de la ratio afectar¨¢ m¨¢s este sector (que perder¨¢ un 14% de las plazas), mientras que la p¨²blica mengua un 10%.
Seg¨²n Palac¨ªn, la planificaci¨®n no se puede dejar en manos de la negociaci¨®n de los municipios con la concertada y ha urgido al departamento a aprobar el nuevo decreto de conciertos para que la oferta de plazas se pueda programar conjuntamente en la p¨²blica y la concertada. ¡°Se debe asegurar que la toma de estas decisiones complicadas no recae exclusivamente sobre el mundo local y especialmente sobre la escuela p¨²blica y se realiza bajo criterios de distribuci¨®n equilibrada¡±, ha incidido el director de la Bofill.
Para la Bofill, la reducci¨®n de la ratio de P3, es ¡°un primer paso¡± para corregir el problema de la segregaci¨®n. Pero no es suficiente. La fundaci¨®n propone que las ratios var¨ªen seg¨²n las caracter¨ªsticas de la escuela. Asimismo, piden un cierre selectivo de grupos. ¡°No puede ser que por no querer cerrar un grupo en una escuela con seis l¨ªneas [en clara referencia a las concertadas], se tenga que cerrar una escuela p¨²blica de una l¨ªnea¡±, ha apuntado Mar¨ªa Segurola, autora del estudio y responsable de pol¨ªticas contra la segregaci¨®n de la fundaci¨®n.
Igualmente, piden al departamento que, una vez acabado el proceso de inscripci¨®n, no se permitan nuevas incorporaciones durante el curso en el caso de las escuelas gueto. Tambi¨¦n piden a Educaci¨®n que planifique con m¨¢s tiempo la oferta de plazas, ya que los datos de natalidad se conocen con anterioridad suficiente.
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