Dulce final para ¡®Alm¨ªbar¡¯, el caballo desahuciado de la Generalitat
El periodista Juan Ram¨®n Lucas y la modelo Sandra Ibarra cuidar¨¢n del caballo en Asturias, tras un acuerdo con el Instituto Catal¨¢n del Suelo
Los Reyes Magos han llegado tarde este a?o al matrimonio de Juan Ram¨®n Lucas y Sandra Ibarra. El pasado 6 de enero, el periodista se enter¨® por EL PA?S de la historia de Alm¨ªbar, un caballo al que el Instituto Catal¨¢n del Suelo (Incas¨°l) le buscaba hogar. El equino hab¨ªa sido abandonado en Mollet (Barcelona), tras el desahucio de unas barracas ilegales. Desde ese d¨ªa la pareja se interes¨® por adoptarlo y hace una semana lleg¨® el dulce final. Alm¨ªbar, alaz¨¢n de 22 a?os, pasar¨¢ lo que le quede de vida disfrutando del verde de la sierra de Cuera, en Asturias, y compartiendo pradera, sal y pienso con los otros miembros de su nueva manada: Magnum, Bella, Zeus, Diana y Max.
El regalo se hizo esperar, pero lleg¨® la tarde del pasado viernes, tras casi un a?o de periplo legal, m¨¢s de 750 kil¨®metros de lento viaje por carretera y dejando alg¨²n coraz¨®n roto en el camino. Aparte del aserr¨ªn, solo tra¨ªa consigo la carta de identificaci¨®n que su due?o original tambi¨¦n dej¨® atr¨¢s. Datos telegr¨¢ficos: Hispano¨¢rabe, de 22 a?os (suelen vivir m¨¢ximo 30), castrado y con remolinos en la cabeza, la nuca y el pecho. ¡°Tiene una muy buena pisada. Si te fijas en la zancada ves que lleva los pies [patas traseras] m¨¢s adelante que la huella de las manos [delanteras]¡±, dice el locutor mientras se?ala la tierra.
Un caballo as¨ª lo tiene dif¨ªcil para encontrar un nuevo hogar. Hace casi un a?o, el letrado que asist¨ªa al desahucio en el parque de la sierra de Galliners se qued¨® de piedra al encontrar al equino atado a un poste, junto a un huerto que un hombre visitaba los fines de semana. Por ley, los bienes abandonados quedan bajo custodia p¨²blica. El juez, efectivamente, encarg¨® a la entidad la tutela del caballo a la espera de decidir su futuro. Se opt¨® por la soluci¨®n m¨¢s f¨¢cil: llevarle al cercano Castillo de Mogoda, tambi¨¦n del organismo de la Generalitat que gestiona el suelo p¨²blico. Jos¨¦ Luis S¨¢nchez y Toni P¨¦rez, dos empleados del Incas¨°l, tuvieron que ir r¨¢pidamente a por el animal y, sin saber c¨®mo reaccionar¨ªa, traerle caminando lentamente por todo el lateral de la autov¨ªa C-17.
Alm¨ªbar viv¨ªa con un marqu¨¦s. Literalmente. El castillo perteneci¨® al Marqu¨¦s de Comillas y pas¨® a la Generalitat en 1980. S¨¢nchez y P¨¦rez tiraron de ingenio y consejos de amigos para acomodar al equino en unas caballerizas que llevaban d¨¦cadas vac¨ªas. Desde un principio, como a Lucas, les impresion¨® su nobleza y la aparente necesidad constante de compa?¨ªa. Hasta enero, la Generalitat hab¨ªa fracasado en sus intentos de encontrar un proyecto social que se hiciera cargo del cuadr¨²pedo. Mientras, el equino ya hab¨ªa acabado con todos los higos, peras y n¨ªsperos de los alrededores de Mogoda. La propuesta de Lucas (que asume toda la manutenci¨®n) era la m¨¢s ventajosa aunque, eso s¨ª, la que m¨¢s romp¨ªa el coraz¨®n de S¨¢nchez y P¨¦rez y otros empleados del castillo, completamente encantados con el alaz¨¢n.
En este mundo de usar y tirar, tristemente encaja la pregunta de para qu¨¦ alguien quiere un equino ya en tiempo de descuento. ¡°La gente simplifica la relaci¨®n con el caballo a estar encima de ¨¦l, pero pasa mucho m¨¢s a pie de tierra¡±, defiende Ibarra. Tras sobrevivir a dos leucemias y dedicar su vida a la sensibilizaci¨®n sobre el c¨¢ncer, explica que la manera de relacionarse con el mundo ha cambiado y en los caballos ha encontrado otro significado de lo que es la confianza. El director del programa La Br¨²jula, en Onda Cero, tambi¨¦n los disfruta a su manera: hace sus meditaciones rodeado de los animales. ¡°Tienen un lenguaje silencioso impresionante. Lo disfrutas m¨¢s que los paseos¡±, apunta.
El origen del idilio con los cuadr¨²pedos tiene an¨¦cdota. ¡°?Mi segundo caballo me dej¨® por mi mujer!¡±, bromea Lucas cuando recuerda el origen de su amor por los equinos. Naci¨® en Madrid pero su familia es de Boquerizo, cerca de la propiedad donde el ¨²nico l¨ªmite de la manada es el de las 2,5 hect¨¢reas de terreno. Pero el clic de verdad lleg¨® gracias a su relaci¨®n con el rejoneador y criador Sergio Vega. Su primer animal fue Buler¨ªa, hace 15 a?os. Despu¨¦s lleg¨® H¨¦rcules, de car¨¢cter tormentoso y que una Ibarra completamente inexperta logr¨® cambiar desde el d¨ªa uno. Desde entonces Lucas le llama ¡°la abrazadora de caballos¡±.
Y, de momento, esos abrazos parecen estar siendo claves en la integraci¨®n de Alm¨ªbar. No es una tarea f¨¢cil, especialmente por la vida en soledad que hab¨ªa llevado hasta ahora. Hay espacio y alimento para todos, pero la naturaleza gregaria de los caballos manda. Ya hab¨ªan vivido ese proceso cuando los hermanos Zeus y Diana se sumaron en 2019 a Bella, Max y Magnum, que con sus 11 a?os tiene ejerce de l¨ªder de la manada. ¡°Puede tardar un d¨ªa o una semana. O no pasar¡±, dijo Lucas el pasado s¨¢bado mientras Ibarra le cantaba al reci¨¦n llegado, abrazada a su cuello, ante la mirada atenta del resto de la manada. A¨²n siguen separados, explic¨® ayer el periodista v¨ªa telef¨®nica. La ¡°abrazadora de caballos¡± est¨¢ en Asturias siguiendo el proceso. ¡°No tenemos prisa¡±, apostill¨®. Aunque tambi¨¦n hay adelantos. Alm¨ªbar ya se acerca al viejo casta?o que la manada usa para rascarse.
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