Bares de Barcelona: ¡°Si no quieren ampliar terrazas, que no nos hagan perder tiempo¡±

Retrasos y caos. La consolidaci¨®n de las terrazas de bares y restaurantes que se ampliaron durante la pandemia en Barcelona est¨¢ resultando m¨¢s complicada de lo que se previ¨®. Los plazos van con (mucho) retraso, los servicios t¨¦cnicos de los distritos est¨¢n desbordados, restauradores que presentaron solicitudes en febrero o marzo no tienen respuesta o les han denegado mantener sillas y mesas en el asfalto¡­ Y el Gremio de Restauraci¨®n de Barcelona habla de ¡°un incumplimiento masivo por parte del Ayuntamiento, con riesgo de que acabe en una gran estafa, porque el mensaje que se lanz¨® fue que las ampliaciones en calzada se mantendr¨ªan¡±, reprocha el director general de la patronal, Roger Pallarols. ¡°El volumen de denegaciones en calzada es alt¨ªsimo¡±, asegura.

El Ayuntamiento responde que todav¨ªa no tiene cifras de aceptaciones y denegaciones, porque el proceso no ha terminado y se pueden presentar alegaciones en cada resoluci¨®n. ¡°Cada distrito gestiona las peticiones, no es lo mismo el volumen del Eixample, las condiciones del espacio p¨²blico de Ciutat Vella o las de Nou Barris¡±, indican fuentes municipales, que niegan que en Ciutat Vella se haya respondido no al 99% de peticiones, como mantiene el gremio. El caso de este distrito es especial porque hablamos de ampliaciones en aceras, no en la calzada.

El 77% de los bares y restaurantes que ampliaron sillas y mesas ha solicitado mantenerlas. Eran 3.600 licencias extraordinarias, y las peticiones de consolidaci¨®n son algo m¨¢s de 2.800 indica el Ayuntamiento. Del total de extraordinarias, algo menos de la mitad (1.500) se ubicaron en la calzada: en plazas de aparcamiento en chaflanes o lineales. Desde febrero, el Consistorio repite el mensaje de que la mayor¨ªa de las terrazas en calzada ¡°se podr¨¢n quedar pr¨¢cticamente todas instalando las plataformas homologadas¡±. ¡°Con el objetivo de que en verano todas las terrazas en calzada que se consoliden ya dispongan del mueble¡±, apuntaba en un comunicado de febrero. En el caso de las mesas y sillas ubicadas en las aceras, y para preservar el espacio p¨²blico, se aplicar¨¢ la ordenanza de 2018, previa a la pandemia, precisaba.

Pero basta bajar a la calle para comprobar que, en el caso de la calzada, la no respuesta o denegaci¨®n est¨¢ a la orden del d¨ªa y por razones diversas. En un recorrido del Guinard¨® al parque de la Ciutadella, este diario ha encontrado las negativas que siguen: un plano con una escala incorrecta, un bar demasiado peque?o para tener cuatro sillas fuera, una ubicaci¨®n entre dos pasos cebra, o el argumento de que el Consistorio tiene previsto intervenir en el chafl¨¢n (sin explicar en qu¨¦ consiste la actuaci¨®n.). O silencio.

¡±Si no ten¨ªan la intenci¨®n de conceder las ampliaciones y mantener las terrazas, que no nos hagan perder tiempo y dinero¡±, se queja Laura, al frente de un bar de tapas familiar en la calle de Proven?a, en el l¨ªmite entre el Eixample y Sant Mart¨ª. Ten¨ªa tres mesas en la acera antes de la pandemia y le concedieron cuatro m¨¢s en calzada. Ahora, sin distancias de seguridad, pide seis. Se las han denegado porque el bar es peque?o. ¡°De momento nos hemos gastado 900 euros por el proyecto y los tr¨¢mites a trav¨¦s del gremio¡±, explica. La terraza est¨¢ ampliada en un chafl¨¢n y para hacerla m¨¢s agradable instalaron una tarima de madera y jardineras con flores. ¡°Aqu¨ª trabajamos una familia y la terraza nos ha permitido vivir tranquilos¡±, asegura. Han recurrido. En el mismo chafl¨¢n, otro local ha pedido consolidar y la respuesta fue que faltaba documentaci¨®n. Present¨® los papeles hace casi dos meses y no tiene respuesta. ¡°Vendieron que las de calzada ser¨ªan definitivas¡±, recuerda su due?o.

En el Camp de l¡¯Arpa, al restaurante A Ca?ota le tocan 12 mesas en la acera porque es grande, dentro tiene dos comedores. Pandemia a parte, el distrito les hizo reubicar las mesas en una hilera, cuando antes estaban en una ampl¨ªsima esquina. Con la pandemia, les concedieron otras seis en plazas de aparcamiento, pero lejos de la puerta. Los camareros acumulan kil¨®metros con la bandeja hasta lo que llaman ¡°la zona Colau¡±. Ahora, la idea era reubicar las dos zonas: la hilera de mesas de la calzada con las de la acera. Pero les han denegado las segundas por la escala del plano adjunto a la documentaci¨®n. ¡°Ten¨ªamos la ilusi¨®n, hemos contratado m¨¢s personal¡­ y resulta que hay ¡®deficiencias documentales¡¯¡±, lamenta Manuel, que cont¨® con el gremio para presentar la solicitud, los 900 euros que los bares citan y que la entidad justifica por las tarifas de las ingenier¨ªas que hacen los proyectos y tramitan el papeleo.

Junto a la Ciutadella, en una esquina de la calle de Sardenya hay dos locales: Mensana y Doobop. Vasili es el due?o de los dos, que ampliaron la terraza en el asfalto durante la pandemia. Han solicitado consolidarlas. En una, el Ayuntamiento lo deneg¨® primero por deficiencias en el ba?o (que no exist¨ªan). Recurrieron y ahora el motivo de la denegaci¨®n es ¡°porque en la esquina est¨¢ prevista una actuaci¨®n¡±, no le dicen cu¨¢l, asegura Vasili. De la otra solicitud no tiene respuesta. Profesores de la Universidad Pompeu Fabra, vecinos y familias de la escuela Brusi han apoyado al bar con cartas. Vasili no se queja por las tarifas del gremio: ¡°Tambi¨¦n han conseguido cosas para la restauraci¨®n¡±. Esta semana, el bar ten¨ªa m¨¢s mesas y sillas de las permitidas en la acera, algunas pegadas a la fachada, lo que no est¨¢ permitido. El due?o aseguraba que era mobiliario del Doobop, que tiene el interior en obras y provisionalmente las ha sacado a la calle. ¡°Si nos deniegan las ampliaciones tendr¨¦ que pagar finiquitos, cuanto m¨¢s facturemos antes, mejor¡± apunta.

Otros han decidido tirar la toalla. No ven claro el gasto. H¨¦ctor, del Bar Esplugas de la calle de Sant Quint¨ª, no ha pedido la consolidaci¨®n de las mesas en la acera. ¡°No tenemos 10.000 euros para la tarima ni 900 para los tr¨¢mites de los t¨¦cnicos. Adem¨¢s, no te dicen cu¨¢nto tiempo te dejar¨¢n tenerla, no s¨¦ si compensar¨ªa la inversi¨®n¡±.

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