Laura Borr¨¤s, un fichaje del independentismo que termina en el banquillo

Laura Borr¨¤s (52 a?os) posee una profunda cultura literaria. Antes de anunciar este jueves que congelaba su hiperactividad en las redes sociales para concentrarse en la defensa de su juicio por corrupci¨®n era habitual que publicara en Internet citas de autores c¨¦lebres. Mostraba predilecci¨®n por los cantos ¨¦picos que invocan a la resistencia y por los postulados que adulan la insurrecci¨®n. ¡°El hombre en rebeld¨ªa defensa lo que es¡±, escribi¨® en Twitter la v¨ªspera de su juicio, recordando a Albert Camus. Borr¨¤s siempre hizo gala de ir por libre, alguien capaz de movilizar a los independentistas de a pie porque huye de los clich¨¦s que rellenan los discursos de los que ella llama ¡°pol¨ªticos profesionales¡±.

Ah¨ª, en el supuesto amateurismo radica el comod¨ªn que esgrime para tratar de elevarse por encima del resto de altavoces del independentismo y defender la autenticidad de su mensaje. Por eso fue capaz de restar legitimidad al Ejecutivo que integraban sus compa?eros de Junts antes de romper con Esquerra, ¡°es un gobierno de colisi¨®n¡±, dijo, o de llamar ¡°imperfecto¡± el reglamento del Parlament que forz¨® su suspensi¨®n como presidenta de la C¨¢mara. Quiz¨¢ tambi¨¦n por eso, Borr¨¤s ha tenido que afrontar el juicio en una situaci¨®n de desamparo visible. El Govern de Esquerra le ha dado la espalda, lo mismo que la CUP y ?mnium, o que personalidades de su misma cuadrilla pol¨ªtica, como es el caso de Xavier Trias, Artur Mas, Jaume Gir¨® y Vict¨°ria Alsina.

Borr¨¤s mantiene que se la juzga porque su condici¨®n de independentista incomoda a la Justicia, una tesis que choca con los indicios que dice tener la Fiscal¨ªa para pedirle seis a?os de c¨¢rcel y 21 de inhabilitaci¨®n. La l¨ªder de Junts est¨¢ acusada de trocear contratos p¨²blicos para poderle adjudicar a dedo encargos a un amigo suyo cuando dirig¨ªa la Instituci¨® de les Lletres Catalanes, un organismo que depende de la consejer¨ªa de Cultura de la Generalitat. Su juicio arranc¨® este viernes en el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a.

Licenciada en Filolog¨ªa Catalana, fue entre libros donde Borr¨¤s cultiv¨® amistad con uno de sus valedores dentro de la pol¨ªtica, el expresident Quim Torra. En diciembre de 2017, estimulada por la agitaci¨®n posterior al refer¨¦ndum del 1-O, ¡°soy una hija del 1 de octubre¡±, ha dicho ella, acept¨® incorporarse a la lista de Junts per Catalunya a la que pon¨ªa cara Carles Puigdemont.

Borr¨¤s daba el paso como candidata independiente, pero su progresi¨®n fue fugaz, en el partido y en los puestos de mando del Govern. En cinco meses se hizo con la consejer¨ªa de Cultura, cargo que ostent¨® hasta dar el salto a Madrid para ser la voz de Junts en el Congreso de los Diputados. Paralelamente, Borr¨¤s exprimi¨® su tir¨®n popular para hacerse fuerte en su formaci¨®n y se trabaj¨® un c¨ªrculo de incondicionales. Arras¨®, con un 75% de los votos, en las primarias para ser la candidata de Junts a presidir la Generalitat y cuando qued¨® claro que era Esquerra quien se llevaba el mando del Govern trat¨® de administrar poder desde la presidencia del Parlament. En junio pasado se aup¨® a la presidencia de Junts y asumi¨® el cargo prometiendo ¡°estorbar¡± al Estado y a ERC. A la postre, fue precisamente Esquerra quien le dio la puntilla para apartarla del Parlament.

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