El PSC se juega el 23-J consolidar su poder en Madrid
Los socialistas catalanes dirigen ahora cinco empresas de control estatal y acumulan dos ministerios, la presidencia del Congreso, la portavoc¨ªa en el Senado
La avalancha azul de las elecciones del 28-M tuvo solo un gran muro de contenci¨®n: Catalu?a. El PSC ha ganado las municipales en la comunidad, superando de nuevo a las formaciones independentistas, y devolviendo la pel¨ªcula a la fotograf¨ªa electoral preproc¨¦s. La cereza del pastel lleg¨® hace una semana, al lograr Jaume Collboni la alcald¨ªa de Barcelona. Los socialistas catalanes viven un momento dulce que no solo lo reflejan las urnas sino tambi¨¦n un protagonismo en la estructura pol¨ªtica y econ¨®mica de la Administraci¨®n del Estado que no se ve¨ªa, coinciden expertos y personas del partido, desde la ¨¦poca de Felipe Gonz¨¢lez. La operaci¨®n tiene padres, Salvador Illa y Miquel Iceta, pero se juega el todo o nada de su consolidaci¨®n el 23-J si hay un cambio de color.
La relaci¨®n de cargos procedentes de la ¨®rbita del PSC no es nada despreciable: la presidenta del Congreso, Meritxell Batet; los ministros de Cultura, Miquel Iceta, y de Transporte, Raquel S¨¢nchez; la portavoz de la bancada socialista en el Senado, Eva Granados. La lista gana un peso notable si se suman los presidentes de hasta cinco empresas de control p¨²blico: Mauri Lucena, exdiputado del PSC, preside Aena; Ra¨¹l Blanco, Renfe; Jordi Hereu, Hispasat; Marc Murtra, Indra; y Antonio Llard¨¦n, Enag¨¢s. Y el sottogoverno del Ejecutivo.
Parte de esa decena de personas celebra cenas de forma algo habitual en Madrid, organizadas a menudo, explica uno de los presentes, por el secretario de Estado de Deporte, V¨ªctor Francos. Aunque uno de los asistentes asegura que no hay organizaci¨®n madrile?a del PSC, no hay movimiento de partido que no conozca Illa, en Barcelona. ¡°Me da la sensaci¨®n de que nuestra participaci¨®n aqu¨ª no es de representaci¨®n del PSC sino del hist¨®rico de tradici¨®n de gesti¨®n p¨²blica¡±, afirma un alto cargo, que pone como ejemplo el hecho de que la mayor¨ªa de esos nombres no se han planteado ni presentarse a listas y su futuro queda a la expectativa del resultado electoral.
Habr¨ªa que remontarse a tiempos de Narc¨ªs Serra como vicepresidente del Ejecutivo de Gonz¨¢lez, entre 1991 y 1995, para encontrar un peso pol¨ªtico y de influencia superior. Con Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero comenz¨® un proceso de ¡°reconocimiento del PSC dentro de la familia socialista¡±, seg¨²n Juan Rodr¨ªguez Teruel, profesor de Ciencia Pol¨ªtica de la Universidad de Valencia. Para el tambi¨¦n autor del libro Los ministros de la Espa?a democr¨¢toca, esa v¨ªa qued¨® truncada en 2006 por el mal desenlace de las negociaciones del Estatut, cuando desde La Moncloa se puente¨® a Pasqual Maragall y se pact¨® con CiU. ¡°Teniendo en cuenta el peso de la poblaci¨®n de Catalu?a, quiz¨¢s es una proporci¨®n razonable; lo extra?o era la infrarepresentaci¨®n de antes¡±, a?ade otro de los miembros catalanes del actual sotogoverno estatal.
S¨¢nchez, al llegar al Gobierno, no solo retoma la relaci¨®n en ese punto de reconocimiento entre partidos sino que pone a los socialistas catalanes en una posici¨®n privilegiada y les premia su fidelidad. ¡°Sab¨ªa que necesitaba a Catalu?a para ganar las elecciones, ayud¨® a los ¨²nicos que marcaron perfil absteni¨¦ndose en la investidura de Rajoy en 2016 [el PSOE vot¨® s¨ª]. Iceta es sanchista desde el primer momento¡±, recuerda un exalto cargo de la Generalitat. El que fuera presidente de la bancada socialista en el Parlament y primer secretario del PSC es quien le hablaba al o¨ªdo entonces a S¨¢nchez sobre el tema catal¨¢n, pero no solo.
La fuerza de la covid para unir a PSOE y PSC
Tras la moci¨®n de censura, Iceta se esmera en que la presencia del PSC en el nuevo Gobierno no se limite solo a caras muy visibles sino que trabaja para extender su presencia en los cargos de segunda y tercera filas m¨¢s all¨¢ de los asesores que implica el aterrizaje de un ministro catal¨¢n. De los tiempos de Zapatero se rescatan t¨¦cnicos como Manel Villalante o Pancho T¨¢boas pero, por ejemplo, Pilar D¨ªaz aterriza en la secretaria de Estado de Servicios Sociales (no revalida el cargo posteriormente) o Raul Blanco en la secretar¨ªa general de Industria (ahora preside Renfe).
La pandemia tambi¨¦n tuvo sus efectos en la relaci¨®n entre PSOE y PSC. Illa, exalcalde de La Roca del Vall¨¨s y que tambi¨¦n fue el jefe de gabinete de Collboni en Barcelona hasta 2016, lleg¨® a la cartera de Sanidad en una reorganizaci¨®n del Gobierno pero jam¨¢s se imagin¨® que ni llegar¨ªa una pandemia mundial ni que su gesti¨®n le llevara a acercarse de una manera tan ¨ªntima con S¨¢nchez. ¡°Un amigo de la mili es un amigo de toda la vida¡±, comenta un exl¨ªder del PSC barcelon¨¦s. La imagen m¨¢s gr¨¢fica de ese cambio de polaridad es el env¨ªo a Iceta al Ministerio de Cultura (dejando el de Pol¨ªtica Territorial) y que eso coincidiera tambi¨¦n con el relevo en la secretar¨ªa general del PSC. Illa ha ahondado en el plan de expansi¨®n de poder del socialismo catal¨¢n iniciado por Iceta, pero dando su toque. ¡°Iceta se asegur¨® una buena presencia de cargos pero no con visi¨®n de poder econ¨®mico. Eso es un rasgo m¨¢s de Illa, como buen secretario de organizaci¨®n que fue¡±, comenta una exdiputada socialista.
El plan del PSC para Catalu?a pasa por cumplir expectativas en dos temas de infraestructuras clave: el aeropuerto de El Prat y Rodalies. Tener a gente de su ¨®rbita en la direcci¨®n de esas carteras est¨¢ en la base de su hoja de ruta, pero todo puede saltar por los aires si no hay un Gobierno socialista tras el 23-J. Si S¨¢nchez no repite, el proceso de b¨²squeda de un sucesor abrir¨¢ un gran debate en el que Illa podr¨ªa tener n¨²meros gracias a la buena imagen que dej¨® su gesti¨®n de la pandemia. Rodr¨ªguez Teruel cree que ser¨¢ ¡°la prueba del algod¨®n sobre el reconocimiento al PSC¡±. Ni Serra, ni Josep Borrell, ni Carme Chac¨®n la pasaron cuando quisieron liderar al PSOE y, ah¨ª s¨ª, se vio al PSC como algo intruso.
Rodr¨ªguez Teruel recuerda pese a que Josep Borrell lleg¨® a ser Secretario de Estado de Hacienda de entre 1991 y 1984 o David Vegara estuvo en la de Econom¨ªa, ¡°nunca ha habido actores del PSC en puestos clave de pol¨ªtica econ¨®mica¡±, a parte del tema industrial. Ese ser¨ªa, por ahora, el h¨¢ndicap de la estrategia que pretende cimentar m¨¢s el poder de los socialistas en Madrid y que ser¨ªa homologable a la que en su d¨ªa tuvo el PSOE andaluz. El otro inconveniente, a?ade, es la falta no solo de personas de la ¨®rbita del PSC sino de nacidos en Catalu?a dentro de los aspirantes a la oposici¨®n anual en el Cuerpo de T¨¦cnicos del Estado. En 2019, representaron el 1,3 del total y 2019 no llegaron ni al 9%.
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