Dos pueblos vecinos, pero solo uno mira al cielo

El sol seca la tierra, todav¨ªa h¨²meda, que desprende un agradable olor a petricor. Ha ocurrido algo excepcional en Cubelles, el ¨²ltimo pueblo al sur de la provincia de Barcelona: ayer llovi¨®.

¡°Es incre¨ªble c¨®mo ha subido el nivel. Hace dos d¨ªas estaba seco. Por este r¨ªo ahora casi nunca baja agua¡±, dice ?lex Noheda, regidor de Medio Ambiente, asom¨¢ndose al renacer de un peque?o humedal que se conforma en la desembocadura del r¨ªo Foix. Jaume, un joven espigado que trabaja como t¨¦cnico ambiental, se acerca segundos despu¨¦s. Se dirige a un peque?o destrozo en una tuber¨ªa de aguas fluviales que desemboca en la playa. Frente a ¨¦l, dos vecinas contemplan los trabajos de los operarios mientras toman un caf¨¦ el d¨ªa de Sant Jordi. Sobre la mesa, un primer tema de conversaci¨®n: ¡°?Viste? Ayer llovi¨®¡±.

Algo habitual en primavera, que del cielo caiga lluvia y del r¨ªo baje agua, se ha convertido durante los ¨²ltimos cuatro a?os en fen¨®meno paranormal en el Garraf, una de las comarcas catalanas m¨¢s afectadas por la sequ¨ªa m¨¢s intensa desde que existen registros pluviom¨¦tricos (1905). Desde febrero, el 80% de los catalanes ¡ªde las provincias de Girona y Barcelona¡ª conviven con la declaraci¨®n de emergencia por sequ¨ªa, la m¨¢s grave que recoge la ley catalana y que supone limitaciones dom¨¦sticas (200 litros al d¨ªa), industriales (un 25% de reducci¨®n) y agr¨ªcolas (hasta un 50%). Adem¨¢s, proh¨ªbe regar jardines o llenar piscinas, entre otras medidas.

La hist¨®rica escasez h¨ªdrica ha puesto contra las cuerdas al Govern en minor¨ªa de ERC, abocado a hacer malabares para garantizar el consumo dom¨¦stico, sin hacer gripar ninguna de las tres poleas que impulsan la locomotora catalana: la industria, el sector primario y el turismo. De trasfondo, la llamada institucional a un ahorro generalizado bajo un lema dist¨®pico ¡®El agua no cae del cielo¡¯, y la promesa de que esta ser¨¢ la ¨²ltima gran crisis h¨ªdrica de Catalu?a porque, en cinco a?os, la comunidad ya ¡°no depender¨¢ de las lluvias¡±. La tecnolog¨ªa al rescate en la era de la emergencia clim¨¢tica.

El regidor Noheda pertenece a Comprom¨ªs municipal, la formaci¨®n que gobierna los 16.000 habitantes de Cubelles, en coalici¨®n con el PSC y los comunes tras las elecciones de mayo de 2023. Ni un a?o en el cargo y ya baila con la sequ¨ªa m¨¢s fea. ¡°Es impresionante c¨®mo aprieta la presi¨®n tur¨ªstica. Muchos dicen estar a favor del medio ambiente, pero vienen aqu¨ª y quieren la piscina llena¡±, cuenta este bi¨®logo. En su particular cruzada tecnol¨®gica contra la sequ¨ªa, el regidor explica que este verano el Consistorio adquirir¨¢ un dron para controlar desde el cielo que los vecinos obedecen a la prohibici¨®n de llenar piscinas, un reto con dificultades: ¡°Controlar esto es complicad¨ªsimo. Cubelles es un pueblo de segundas residencias. Si miras en Google Maps, ver¨¢s la cantidad de casas con piscina repartidas por la monta?a...¡±, explica. Noheda no deja de sorprenderse ante distintas actitudes: ¡°Una comunidad de vecinos en primera l¨ªnea de mar pretend¨ªa contratar una peque?a desaladora port¨¢til privada para llenar su piscina. Tengo la sensaci¨®n de que muchos ya viven de espaldas a la naturaleza...¡±, resume.

Cubelles tendr¨¢ desaladora, pero esta no ser¨¢ peque?a ni port¨¢til, y tampoco funcionar¨¢ en 2024. Como un n¨¢ufrago sediento, el resto de Catalu?a mira al mar de este municipio residencial para saciar su sed. En las afueras de este municipio es donde est¨¢ previsto que, para 2029, funcione la gran f¨¢brica de agua que, en palabras del propio Govern, har¨¢ que Catalu?a no dependa m¨¢s de las lluvias.

Que Cubelles sea el lugar elegido para instalar la desaladora no es algo casual: es el ¨²ltimo pueblo al sur de la provincia de Barcelona y el anteproyecto se dise?¨® en un principio para que la instalaci¨®n tambi¨¦n enviara agua desalada en direcci¨®n a Tarragona. Una conexi¨®n que, a juicio de los ecologistas, encubr¨ªa una conexi¨®n con el sistema hidrol¨®gico del Ebro. ¡°Un caballo de Troya¡±, seg¨²n los activistas, para en un futuro poder bombear agua del r¨ªo hacia Barcelona. El consejero de Acci¨®n Clim¨¢tica, David Mascort, asegur¨® a este diario en marzo que se hab¨ªa encargado personalmente de borrar del mapa esa conexi¨®n.

Catalu?a es un mapa parcelado por sistemas hidrol¨®gicos y eso explica la kafkiana situaci¨®n que se vive entre Cunit y Cubelles: los dos municipios comparten la misma playa, pero en un lado tienen agua y en el otro, no. En Cunit se pueden llenar piscinas y regar jardines sin restricciones. Pero a pocos metros, en Cubelles, estas actividades est¨¢n prohibidas bajo amenaza de sanci¨®n. Una situaci¨®n que puede causar tensiones por el agua, sobre todo en verano, admite una fuente t¨¦cnica de la Generalitat.

La frontera invisible del agua encuentra su raz¨®n de ser en el Ebro. ¡°El minitrasvase se termina aqu¨ª porque este es el primer pueblo de la provincia de Tarragona. Y ese el sistema hidrol¨®gico por el que nos regimos¡±, explica el hom¨®logo de Noheda al otro lado de la playa. Jos¨¦ Manuel Cabada (PSC), concejal de medio ambiente de Cunit, explica que el Ayuntamiento decidi¨® aplicar medidas de ahorro ¡°por sentido com¨²n¡± y ¡°en solidaridad de sus vecinos de Cubelles¡±, a pesar de que en su municipio no hay declarada ninguna alerta por sequ¨ªa. El Ayuntamiento ha reducido el riego municipal y ha inhabilitado las duchas de las playas: ¡°No tendr¨ªa sentido que en un lado de la playa pudieran usar agua y en el otro no. Hay unos m¨ªnimos que quer¨ªamos cumplir¡±, enfatiza.

Esa frontera ficticia es una muestra de la gigantesca obra civil que vertebra Catalu?a bajo tierra. Un esqueleto de tubos, estaciones de bombeo, depuradoras, plantas regeneradoras, desaladoras y presas que bombean de un lado a otro millones de litros a diario para regar campos, echar a andar las f¨¢bricas y llenar las piscinas de una costa llena de turistas. Y por las tripas, emerge la otra cara: embalses secos, r¨ªos llenos de obst¨¢culos artificiales y la mitad de los acu¨ªferos del territorio contaminados, seg¨²n datos del propio Govern.

Llamadas a levantar el acelerador

La grave sequ¨ªa ha hecho crecer las voces que piden un ¡°decrecimiento¡± de la econom¨ªa, como limitar el turismo. Las protestas las ha capitaneado el movimiento Aigua ¨¦s Vida, que aglutina asociaciones ecologistas y sociales. Su cara m¨¢s visible es la de Dante Maschio (28 a?os) quien ha logrado colocar sus mensajes en los medios para tratar de influir en la pol¨ªtica del Govern presionando, por ejemplo, para que se opusiera tajantemente a otra pol¨ªtica de trasvases. ¡°No esper¨¢bamos llegar a esta gran sequ¨ªa. Son 43 meses, cuando la de 2008 dur¨® 18. Aunque nosotros llev¨¢bamos alertando desde hace a?os que pod¨ªamos llegar a esta situaci¨®n, y advert¨ªamos de que se ten¨ªan que priorizar usos del agua¡±, recuerda Maschio.

?Marcar¨¢ un antes y un despu¨¦s esta sequ¨ªa en las presentes y futuras generaciones? Maschio responde: ¡°Tengo amigas que tienen hijos de tres a?os que apenas han visto llover en su corta vida. Cuando cae agua del cielo, lo viven como algo nuevo, como una aut¨¦ntica fiesta¡­ todo deja imprenta¡±. Luis Babiano, gerente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Operadores P¨²blicos de Abastecimiento y Saneamiento (Aeopas), opina por su parte que la crisis h¨ªdrica puede ser una oportunidad para frenar las p¨¦rdidas por las fugas de agua¨D Cubelles pierde el 40% de su suministro¨D. ¡°Hay que crear urgentemente planes provinciales de los servicios de agua y un plan de choque de reducci¨®n de p¨¦rdidas¡±, reclama.

El catedr¨¢tico en Geograf¨ªa F¨ªsica de la Universidad de Barcelona Javier Mart¨ªn Vide nota una sensibilidad creciente en la ciudadan¨ªa, algo que ya ocurri¨® en la gran sequ¨ªa de 2008, cuando los barceloneses redujeron su consumo de agua en 29 litros de media diarios (de 135 a 106). En el ¨²ltimo a?o, el consumo ha bajado otro 10%. Seg¨²n los datos del ¨²ltimo CIS catal¨¢n, la sequ¨ªa se ha convertido en la primera preocupaci¨®n de los ciudadanos. La emergencia clim¨¢tica ser¨¢ una de las cuestiones de la campa?a para las elecciones catalanas del 12-M. ¡°La sequ¨ªa ha traspasado fronteras. Hab¨ªa semanas en las que cada d¨ªa me llamaban medios de comunicaci¨®n de distintos pa¨ªses para preguntar sobre la situaci¨®n de Barcelona. Veo inquietud en mi entorno, en los pasillos, en los ascensores. A diario. La gente habla de que ya no llueve. La situaci¨®n es tan grave que hay quienes incluso ya hablan en pasado. Dicen: ¡®Antes, cuando s¨ª llov¨ªa¡±.

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