Ximo Puig, a la b¨²squeda del liderazgo perif¨¦rico

El presidente de la Generalitat valenciana, el socialista Ximo Puig, se posiciona como referente de la Espa?a perif¨¦rica, en contrapeso de la centralidad que ejerce Madrid y en puente con Catalu?a, su vecino del norte y principal socio comercial. Ferviente federalista, ha hecho de la reforma de la financiaci¨®n auton¨®mica, que tanto perjudica a la comunidad, su gran causa y para defenderla ha buscado complicidades con presidentes auton¨®micos de otros partidos, como el andaluz Juan Manuel Moreno Bonilla, del PP, con el que mantendr¨¢ una reuni¨®n en Sevilla el 21 de septiembre. Tras tomar partido por Susana D¨ªaz hace un lustro en su intento de liderar el PSOE, la relaci¨®n con Pedro S¨¢nchez se ha tornado ahora fluida.

Con nueve presidentes auton¨®micos socialistas, Ferraz evita hacer distinciones y transmitir la idea de que Puig sea el bar¨®n del momento. En el cuartel general del PSOE nadie quiere menoscabar las buenas relaciones con la mayor¨ªa de l¨ªderes territoriales. Pero eso no quiere decir que en privado se reconozca la labor del presidente de la comunidad m¨¢s poblada donde gobiernan los socialistas. La direcci¨®n federal tiene muy presente el respaldo, sin peros ni matices, de Puig a la concesi¨®n el pasado junio de los indultos a los l¨ªderes independentistas que fueron condenados por sedici¨®n y malversaci¨®n tras su papel en el proc¨¦s. Frente a la inquietud inicial que se extendi¨® a lo largo y ancho del socialismo por la posible reacci¨®n de su electorado ¡ªel m¨¢s claro fue el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano Garc¨ªa-Page, que lleg¨® a advertir que supondr¨ªa un ¡°grave error¡± ante la falta de arrepentimiento de los beneficiados por la medida de gracia¡ª, el presidente valenciano defendi¨® su concesi¨®n. Lo hizo exponi¨¦ndose en un carrusel de entrevistas en unas semanas de much¨ªsima presi¨®n. Finalmente, el rechazo a los indultos se disip¨® en el PSOE tras un mes de asimilaci¨®n.

Hay otros motivos por los que Puig ha visto crecer su notoriedad en la pol¨ªtica espa?ola. Hace seis a?os fragu¨® con otras fuerzas de izquierdas, Comprom¨ªs y Unides Podem, una coalici¨®n de gobierno inimaginable entonces en el PSOE. El pacto del Bot¨¢nico permiti¨® que una coalici¨®n progresista gobernase la Comunidad Valenciana despu¨¦s de m¨¢s de 20 a?os de hegemon¨ªa del PP. La experiencia del mestizaje pol¨ªtico ha demostrado que funciona, como demuestra la aprobaci¨®n de seis presupuestos auton¨®micos, pese a las diferencias y los choques entre los socios, especialmente entre los socialistas y Comprom¨ªs. Con todas las distancias, el Gobierno ha terminado replicando un modelo parecido. ¡°El modelo aqu¨ª con Podemos elimin¨® muchas reticencias y muchos miedos a nivel estatal¡±, afirman fuentes del socialismo valenciano.

Otro activo de Puig frente al PSOE es su promoci¨®n de las comunidades perif¨¦ricas frente a la visi¨®n centralista y monocorde de los sectores m¨¢s conservadores de la derecha. Los choques que ha protagonizado con Isabel D¨ªaz Ayuso por la pol¨ªtica fiscal de Madrid ¡ªes la ¨²nica comunidad que bonifica al 100% el impuesto de patrimonio, y ha eliminado en la pr¨¢ctica el de sucesiones y donaciones con una bonificaci¨®n del 99%¡ª han contribuido a poner en la agenda p¨²blica un asunto de mucho inter¨¦s para La Moncloa: la armonizaci¨®n fiscal. El Gobierno trabaja en una reforma tributaria, que fijar¨ªa un m¨ªnimo en los impuestos concedidos a las autonom¨ªas.

Cuando Puig habla de federalismo y del efecto capitalidad, que a su juicio ha convertido a Madrid en ¡°una gran aspiradora¡± que absorbe recursos y poblaci¨®n de otras comunidades, pretende abrir los ojos a la importancia que tiene la vida auton¨®mica en el conjunto del Estado. ¡°Y ah¨ª creemos que s¨ª est¨¢ consiguiendo que cale que hay factores de desigualdad que tienen que ver con los impuestos cedidos, con los propios, con una manera de gestionar que pone en peligro el Estado del bienestar o lo revaloriza¡±, apuntan fuentes del Consell. ¡°El eje de su discurso es igualdad entre ciudadanos y respeto a la diversidad de los territorios¡±.

El pol¨ªtico valenciano tambi¨¦n es una de las voces que plantea con m¨¢s ah¨ªnco un Estado federal como soluci¨®n a la crisis territorial en Catalu?a. El dise?o pol¨ªtico de la Espa?a perif¨¦rica ha sido una constante en su discurso. El Consell ha tendido puentes con Catalu?a despu¨¦s de la inexistente relaci¨®n durante el proc¨¦s y prueba de ello es el encuentro del mi¨¦rcoles con el presidente catal¨¢n Pere Aragon¨¨s en Valencia. La Comunidad Valenciana es una de las primeras interesadas en normalizar la relaci¨®n. ¡°Puig tiene su propia estrategia pero si puede ayudar, lo hace. Nosotros no hemos organizado un encuentro con Aragon¨¨s porque le interese a S¨¢nchez sino porque nos conven¨ªa a nosotros. Creemos en el di¨¢logo, en la necesidad de tender puentes y en la transversalidad¡±, exponen las mismas voces de la Generalitat.

Puig se ha mostrado adem¨¢s especialmente activo en su pol¨ªtica de alianzas con otras comunidades aut¨®nomas perjudicadas por el sistema de financiaci¨®n auton¨®mica, caducado desde 2014. ¡°Los valencianos tienen un estado auton¨®mico muy consolidado pero que no cuenta con los recursos econ¨®micos para ser igual que los c¨¢ntabros o los riojanos¡±, explican en Valencia. En ese objetivo, Puig ha tejido, o al menos lo est¨¢ intentando, complicidades con la presidenta de Baleares, Francina Armengol, con el presidente catal¨¢n Pere Aragon¨¨s y con su hom¨®logo andaluz, Juan Manuel Moreno, del PP, en favor de una financiaci¨®n en funci¨®n de la poblaci¨®n. El reciente frente auton¨®mico que promueve Garc¨ªa-Page y otras autonom¨ªas del interior, m¨¢s despobladas, se interpreta desde la Generalitat como una reacci¨®n a los movimientos de Puig que ha logrado colocar en la agenda la necesidad de reformar el sistema de financiaci¨®n.

La sinton¨ªa entre S¨¢nchez y Puig, ambos secretarios generales in pectore ¡ªno tendr¨¢n rivales en sus respectivos congresos¡ª, ha crecido gradualmente despu¨¦s de sus grandes recelos del pasado. Ahora la relaci¨®n est¨¢ muy engrasada, como demuestra el trato con La Moncloa y con Ferraz. Una prueba es que ha recibido el visto bueno para intentar una alianza con Moreno para la renovaci¨®n del sistema de financiaci¨®n. Previamente, Puig cerr¨® una posici¨®n com¨²n con Juan Espadas, que en julio relev¨® a Susana D¨ªaz como secretario general del PSOE de Andaluc¨ªa. ¡°Entendemos que el presidente del Gobierno ha visto en Puig lealtad y un modelo valenciano ¨²til para la izquierda en Espa?a, por su gesti¨®n de la pandemia y por la estabilidad de la coalici¨®n de gobierno pese a los altibajos¡±, esgrimen en la Generalitat.

Entre las fuentes consultadas de la ejecutiva federal hay quien duda de que Puig tuviera la misma presencia si Jos¨¦ Luis ?balos siguiese siendo el secretario de Organizaci¨®n. Puig, como la pr¨¢ctica totalidad del establishment socialista, apoy¨® a Susana D¨ªaz en las primarias de 2017 mientras que el exn¨²mero tres del PSOE fue uno de los pocos apoyos org¨¢nicos relevantes que Pedro S¨¢nchez mantuvo tras su dimisi¨®n en el convulso comit¨¦ federal del 1 de octubre de 2016. ?balos era entonces el secretario general de la provincia de Valencia, la segunda con m¨¢s militantes tras Sevilla. Que S¨¢nchez reapareciera meses despu¨¦s en un acto con militantes en la localidad de Xirivella no fue casual. Tras la reelecci¨®n de S¨¢nchez, Puig fue el primer bar¨®n al que Ferraz intent¨® descabalgar de su federaci¨®n. El presidente de la Generalitat se tuvo que emplear a fondo y fue reelegido secretario general del PSPV-PSOE contra al candidato sanchista y alcalde de Burjassot, Rafa Garc¨ªa. Puig obtuvo un respaldo del 56,7% en las primarias frente al 42,3% de Garc¨ªa.

La ca¨ªda de ?balos coincide con el auge de Puig, que ha ganado foco las ¨²ltimas semanas. Una de las razones es que ser¨¢ el anfitri¨®n en el 40? Congreso Federal del PSOE en Valencia, que se celebrar¨¢ del 15 al 17 de octubre en la capital mediterr¨¢nea. ¡°El c¨®nclave federal es en Valencia porque en estos momentos somos un modelo dentro del partido¡±, concluyen fuentes del Gobierno valenciano.