La falta de ox¨ªgeno asfixia al m¨²jol del Segura

Las playas cercanas a la desembocadura del r¨ªo Segura en Guardamar del Segura (Alicante) llevan d¨ªas sembradas de decenas de cad¨¢veres de peces. De una especie en concreto, el m¨²jol, un pez de agua dulce abundante en la zona. La proximidad del Mar Menor a las aguas de esta localidad del sur de la provincia hizo, en un principio, saltar todas las alarmas. Sin embargo, tanto la Confederaci¨®n Hidrogr¨¢fica del Segura (CHS), responsable de la cuenca, como la Generalitat Valenciana y el servicio de protecci¨®n de la naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil han realizado anal¨ªticas que demuestran que no se han producido vertidos letales. El problema es que los ¨²ltimos tramos del cauce vienen con niveles m¨ªnimos de ox¨ªgeno. Y el m¨²jol se asfixia en su propio r¨ªo.

El alcalde de Guardamar, Jos¨¦ Luis S¨¢ez, se?ala que se trata de un fen¨®meno recurrente que sucede al final del verano, en la ¨¦poca de desove del m¨²jol, aunque reconoce que, en esta ocasi¨®n, ¡°el n¨²mero de ejemplares muertos ha sido superior a lo normal¡±. El calor que se va acumulando a lo largo del verano eleva la temperatura del agua y genera una fuerte ¡°proliferaci¨®n de algas¡± en el tramo final del Segura. El desove obliga a esta especie, adem¨¢s, a realizar un ¡°esfuerzo¡± extra que le obliga a consumir m¨¢s ox¨ªgeno. Y, al no poder respirar con facilidad en el agua dulce, los peces mueren, la corriente arrastra los cad¨¢veres hacia la desembocadura y las playas se convierten en una morgue de m¨²joles.

S¨¢ez, que se?ala que este es el ¡°cuarto episodio¡± similar que ha vivido en sus seis a?os como alcalde, ratifica que tanto la CHS como el Seprona han realizado sus estudios. Y los resultados son negativos. Desde la entidad dependiente del Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica y el Reto Demogr¨¢fico apuntan la misma conclusi¨®n. Los an¨¢lisis no detectan ning¨²n tipo de vertido que haya podido afectar a la flora y fauna del ¨²ltimo tramo del Segura. Tambi¨¦n inciden en que los ¨²ltimos 500 metros del r¨ªo antes de desaguar en el Mediterr¨¢neo son competencia de Costas y de la Generalitat Valenciana. Y fuentes del Gobierno auton¨®mico manifiestan que han realizado una comprobaci¨®n ¡°de rutina¡± en el litoral guardamarenco y tampoco han encontrado nada extra?o que se pueda relacionar con la masacre del m¨²jol.

Otras fuentes conocedoras de la gesti¨®n del r¨ªo, sin embargo, aseguran que el Segura baja con demasiada agua desde el ¨²ltimo azud, la barrera artificial que se utiliza para canalizar el agua para usos agr¨ªcolas. Y que, tal como ha adelantado el diario Informaci¨®n, este excepcional volumen podr¨ªa deberse al desembalse de agua para oxigenar y refrescar las aguas del r¨ªo y, as¨ª, evitar la muerte de las especies del Segura. Las fuentes consultadas explican que en su parte final, por el cauce del Segura solo baja agua de riego y de depuradora, con un exceso de nutrientes procedentes de los cultivos. Esta saturaci¨®n de fertilizantes provoca ¡°una explosi¨®n de un tipo de alga¡± que impiden el paso de la luz al fondo fluvial. ¡°El plancton, los peces y las algas¡± acaban muriendo en la oscuridad, toda una convocatoria masiva para las bacterias que se encargan de la descomposici¨®n de la materia org¨¢nica, ¡°que consumen una gran cantidad de ox¨ªgeno¡±.

Como, adem¨¢s, ¡°la alta temperatura del agua impide la retenci¨®n de ox¨ªgeno¡±, las especies animales son incapaces de sobrevivir. ¡°En los ¨²ltimos d¨ªas, por la zona en la que apenas baja agua est¨¢n fluyendo entre 5 y 8 metros c¨²bicos por segundo¡±, un aluvi¨®n que las mismas fuentes atribuyen a la CHS. Sin embargo, la entidad de cuenca lo niega. ¡°No hemos desembalsado m¨¢s agua para oxigenar el r¨ªo¡±, declaran. ¡°Lo ¨²nico que controlamos es que en cada tramo fluya el caudal ecol¨®gico que marca el plan de cuenca¡±. A S¨¢ez tampoco le consta ning¨²n aporte de emergencia que evite la presencia de peces muertos en las playas del municipio que gobierna. El m¨²jol, mientras, sigue acumulando bajas.