La Audiencia de Valencia avala la instrucci¨®n contra Zaplana y despeja el inicio el juicio del ¡®caso Erial¡¯
La sala ve indicios de criminalidad en la presunta trama de cobro de comisiones por la que la Anticorrupci¨®n pide 19 a?os de c¨¢rcel para el expresidente valenciano y exministro
La Audiencia de Valencia ha avalado la instrucci¨®n del caso Erial, que afecta al que fuera presidente de la Generalitat valenciana entre 1995 y 2002, Eduardo Zaplana, del PP, y ha rechazado los recursos presentados por las defensas de los siete investigados por el supuesto cobro de comisiones en las adjudicaciones del plan e¨®lico y en la privatizaci¨®n de la Inspecci¨®n T¨¦cnica de Veh¨ªculos (ITV). El auto apunta a que los indicios obtenidos por la juez ¡°son m¨¢s que suficientes para ordenar la continuaci¨®n del procedimiento¡±.
El respaldo de la Audiencia al ¨²ltimo auto de la titular del juzgado n¨²mero 8 de instrucci¨®n es un paso decisivo en la apertura de juicio oral. La Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n pide 19 a?os para el que fuera tambi¨¦n ministro de Trabajo del Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, entre 2002 y 2004.
La secci¨®n quinta de la Audiencia considera que el auto recurrido contiene un ¡°detalle suficiente¡± de los hechos para continuar con el procedimiento en la vista oral, en la que se deber¨¢n resolver algunas de las cuestiones y nulidades planteadas por las defensas, seg¨²n ha adelantado el diario Las Provincias. En definitiva, que existen indicios criminales suficientes recopilados por la instrucci¨®n y la fiscal¨ªa para que la propia Audiencia abra juicio oral. El nuevo auto fue notificado este lunes a las partes.
El ¨²nico caso que sobresee la Audiencia es el de Mar¨ªa Teresa Garc¨ªa, esposa del entonces jefe de gabinete del exministro, Juan Francisco Garc¨ªa, que tambi¨¦n est¨¢ imputado. Seg¨²n dicta el auto, el juzgado no dispone de ¡°los indicios de criminalidad que se aprecian contra la misma¡±. De hecho, tal y como precisa, ¡°ha llegado a conocimiento de este Tribunal que se ha decretado el sobreseimiento provisional respecto a dicha investigada¡±.
La juez proces¨® a Zaplana tras detectar compras que la investigaci¨®n identific¨® como realizadas con el dinero il¨ªcito procedente de las comisiones. Adem¨¢s de varios inmuebles, hab¨ªa dinero en met¨¢lico que llegaba al exministro por distintas v¨ªas. Por ello, Anticorrupci¨®n pide el decomiso de 20,6 millones de euros que son los que los investigadores calcularon como movilizados por la organizaci¨®n a la que le achaca tambi¨¦n el delito de grupo criminal. De hecho, la confesi¨®n de uno de los presuntos testaferros de Zaplana, Fernando Belhot, permiti¨® que se recuperaran m¨¢s de seis millones de euros que fueron entregados al juzgado.
La hoja de ruta que traz¨® la trama para cobrar comisiones fue hallada en manos de Marcos Benavent, que se autodenomin¨® el yonqui del dinero. A este individuo le fue entregado por un empresario sirio que vivi¨® alquilado en el mismo piso que lo hab¨ªa hecho Zaplana y que, seg¨²n dijo, la encontr¨® casualmente. El expresidente de la Generalitat siempre ha cuestionado el inicio de las diligencias con este hallazgo.
Adem¨¢s de Zaplana, al que la juez le imputa los delitos de blanqueo de capitales, cohecho, falsedad en documento mercantil y prevaricaci¨®n administrativa, se sentar¨¢ en el banquillo otro expresidente de la Generalitat Valenciana Jos¨¦ Luis Olivas, para el que la Fiscal¨ªa pide seis a?os de c¨¢rcel. Junto a los dos expresidentes, ambos del PP, se sentar¨¢n en el banquillo un supuesto testaferro de Zaplana, Miguel Barcel¨®; el supuesto cerebro financiero de la trama, Francisco Grau, la secretaria del exministro de Trabajo, Mitsouko Henr¨ªquez, su exjefe de gabinete, Juan Francisco Garc¨ªa, y los hermanos empresarios Vicente y Jos¨¦ Cotino Escriv¨¢, familia del exdirector general de la Polic¨ªa Juan Cotino, entre otros.
Tras el auto de la juez de instrucci¨®n y el escrito de acusaci¨®n de Anticorrupci¨®n conocido el 10 de octubre, Zaplana reiter¨® su inocencia y se?al¨® que espera demostrarla en el juicio ¡°tras estos largos siete a?os de instrucci¨®n inquisitorial¡±.
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