Seis meses del incendio del edificio de Campanar en Valencia: ¡°Queremos saber por qu¨¦ se desarroll¨® tan r¨¢pido¡±
Los afectados encaran la investigaci¨®n judicial del suceso en el que murieron 10 personas. En septiembre empezar¨¢ el desescombro, que durar¨¢ cuatro meses, y luego el proyecto de rehabilitaci¨®n
Han pasado seis meses desde que un virulento incendio consumiese en un tiempo r¨¦cord un complejo entero de viviendas en el barrio valenciano de Campanar, cobr¨¢ndose la vida de 10 de sus vecinos y destrozando 138 residencias. Un gran esqueleto negruzco da hoy idea del horror vivido la tarde y noche del pasado 22 de febrero. ¡°Es como volver a empezar de cero¡±, apunta medio a?o despu¨¦s Enrique Salvador, propietario de uno de los pisos calcinados y presidente de la Asociaci¨®n de Propietarios Afectados por el Incendio de Campanar (Aproicam), que re¨²ne al 99% de los due?os de los inmuebles. Sus esperanzas est¨¢n puestas en la investigaci¨®n judicial del suceso: saber qu¨¦ ocurri¨®, por qu¨¦ y que se depuren si hay responsabilidades, y en la rehabilitaci¨®n del complejo de viviendas que el fuego redujo a cenizas.
¡°No queremos caer en el olvido porque el problema sigue ah¨ª¡±, explica Salvador, de 33 a?os, meses despu¨¦s. El presidente de los propietarios afectados enumera los tres grandes objetivos de la asociaci¨®n. Explica que han conseguido encaminar la rehabilitaci¨®n del inmueble ¡ªuna vez un informe dictamin¨® que la estructura lo permit¨ªa¡ª y en septiembre empezar¨¢n las obras de desescombro, es decir se vaciar¨¢ el edificio de cenizas y dem¨¢s elementos inservibles. Calculan que el desescombro durar¨¢ unos cuatro meses y paralelamente se contrat¨® en julio al despacho de arquitectura Arqueha para que redacte un proyecto de rehabilitaci¨®n que se prolongar¨¢ siete meses. El coste del derribo ser¨¢n de 1,5 millones de euros y el del proyecto, otros 1,1 millones. Cuando acaben ambos procesos, la comunidad de propietarios convocar¨¢ un concurso para adjudic¨¢rselo a una constructora que sea t¨¦cnicamente capaz de hacer la reconstrucci¨®n. Y todo eso financiado a priori por las aseguradoras, apunta el presidente de Aproicam. ¡°Estamos en conversaciones con ellas para que lo saquen adelante¡±, apunta.
Su segundo objetivo es que ninguno de los propietarios se vea obligado a pagar a la vez la hipoteca de la casa siniestrada y el alquiler de su actual alojamiento. ¡°Queremos que estas ayudas y la moratoria de las hipotecas con los bancos est¨¦ vinculada al periodo de rehabilitaci¨®n del edificio. En esa tesis estamos y las Administraciones [Generalitat, Ayuntamiento de Valencia y Delegaci¨®n del Gobierno] se han mostrado partidarias de ayudarnos¡±. La Generalitat ha pagado unos 970.000 euros en ayudas a los afectados, seg¨²n fuentes de la Administraci¨®n auton¨®mica.
En tercer lugar, la asociaci¨®n va a ofrecer ayuda psicol¨®gica o cualquier acci¨®n que beneficie a los afectados para superar la tragedia. El joven hace una menci¨®n especial al apoyo recibido de la asociaci¨®n Valientes, una escuela ubicada detr¨¢s de la finca siniestrada que empez¨® a recoger y repartir ayuda el mismo d¨ªa del siniestro. ¡°Son ¨¢ngeles para nosotros¡±, confiesa Salvador. ¡°Mucha gente est¨¢ siendo consciente ahora de lo ocurrido. Cada persona tiene un ritmo. Adem¨¢s, hay gente de todo tipo, familias con hijos que no pueden asumir un coste elevado de alquiler, otras compuestas por personas mayores que ya no pueden rehipotecarse, familias monoparentales, otras en situaci¨®n de desempleo¡¡±. En l¨ªneas generales, las entidades financieras han aprobado periodos de carencia para el pago de las hipotecas.
Los afectados, propietarios e inquilinos, fueron realojados ¡ªlos que lo necesitaron¡ª en un edificio de viviendas p¨²blicas del Ayuntamiento de Valencia en el barrio de Safranar. Ah¨ª han vivido durante seis meses unas 99 familias pero el pr¨®ximo lunes, 26 de agosto, vence el plazo que el consistorio dio para que buscasen otro piso, dando por sentado que si hab¨ªa alg¨²n caso de vulnerabilidad, el Ayuntamiento buscar¨ªa otro recurso. Quedan todav¨ªa unas 41 familias, la mayor¨ªa viv¨ªan de alquiler en el complejo siniestrado.
En el plano judicial, la Audiencia Provincial de Valencia acord¨® el 25 de junio la reapertura de la investigaci¨®n que en marzo archiv¨® provisionalmente el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 9 de Valencia, al considerar que hab¨ªa que practicar nuevas diligencias que aclaren todas las circunstancias del suceso. La reapertura se decret¨® a ra¨ªz de un recurso de familiares de los cuatro miembros de una familia que perdieron la vida en el incendio, al que se adhirieron total o parcialmente la Fiscal¨ªa y otras partes como la comunidad de propietarios del edificio o la asociaci¨®n de damnificados por el incendio de Campanar. ¡°Queremos saber por qu¨¦ se origin¨® ese incendio y por qu¨¦, sobre todo, se desarroll¨® tan r¨¢pido. Queremos que se depuren si hay responsabilidades y lo m¨¢s importante, justicia para las 10 v¨ªctimas mortales¡±, subraya el presidente de Aproicam.
Ignacio Grau, abogado que representa a las familias de siete de los 10 fallecidos, incide en el retraso que arrastra la investigaci¨®n por el archivo de la causa. ¡°Queremos saber las causas del incendio y de los fallecimientos. Si el fuego se inicia a las 17,30 horas, ?por qu¨¦ hay v¨ªctimas que mueren horas despu¨¦s?. Queremos conocer el relato de lo que sucedi¨® en aquellas horas. Son dudas y para eso est¨¢ la instrucci¨®n judicial¡±, subraya. Las familias de los fallecidos est¨¢n pendientes de conocer en septiembre cu¨¢les son las resoluciones que dicte el juez sobre las diligencias de investigaci¨®n que han solicitado las partes personadas en la causa, avanza Grau.
Seg¨²n el informe elaborado por la Polic¨ªa Cient¨ªfica, el fuego se origin¨® en el apartamento 86 de la torre m¨¢s alta del complejo residencial ¡ªque en menos de una hora calcin¨® las 138 viviendas de sus dos bloques¡ª a partir de una peque?a fuga de refrigerante en el condensador del frigor¨ªfico de la cocina de ese piso. El fuerte viento de poniente que soplaba aquella tarde favoreci¨® la propagaci¨®n de las llamas.
Los afectados tratan de seguir con sus vidas. A una de ellas, Ana Mar¨ªa Vela, de 65 a?os, el fuego le pill¨® en el trabajo y recuerda aquellos momentos como si de una pel¨ªcula se tratara. Vela agradece el apoyo del Ayuntamiento y de otras autoridades por el trato recibido. Es una de las propietarias que ha vivido en el edificio municipal de Safranar hasta que a finales de julio se traslad¨® a un alojamiento de alquiler, donde vive acompa?ada de su madre de 84 a?os. ¡°Sigo sin entender qu¨¦ ocurri¨®, por qu¨¦ en poco menos de una hora pas¨® aquel horror¡±., explica. ¡°Trato de aplacar y esconder el ronroneo interno de qu¨¦ pasar¨¢ dentro de ocho meses [es el tiempo que tiene aplazado el pago de la hipoteca] pero de vez en cuando me asalta y tengo que decirme: ¡®mira Ana, como dec¨ªa aquella pel¨ªcula, ya llorar¨¢s ma?ana, ahora hay que continuar adelante¡¯. Pero s¨ª, es una preocupaci¨®n que no desaparece¡±, concluye.
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