Un espejismo demosc¨®pico en Castilla y Le¨®n

?Para qu¨¦ convoc¨® el PP las elecciones en Castilla y Le¨®n un a?o largo antes de lo que correspond¨ªa? Si el presidente regional en funciones, Alfonso Fern¨¢ndez Ma?ueco, hubiera podido vislumbrar el resultado de los comicios del domingo, no los hubiera convocado. No cabe especulaci¨®n alguna sobre el deseo de los populares de favorecer a Vox. Tampoco de perseguir un trueque de Ciudadanos por la fuerza ultraderechista. No era esa la intenci¨®n, aunque sea el resultado. Un espejismo demosc¨®pico llev¨® a los populares a interrumpir abruptamente la legislatura con la previsi¨®n de lograr casi una mayor¨ªa absoluta que les permitiera gobernar libres y sin ataduras. El PP ha ganado, y tiene resuelto el discurso frente al PSOE de que el cambio de ciclo se acerca y que se consumar¨¢ en las generales. El friso queda con la victoria del PP, el ligero retroceso del PSOE, y con Unidas Podemos que da pasitos atr¨¢s. La coalici¨®n de gobierno nacional puede prepararse a sufrir de continuo el ataque del PP: el discurso de que son perdedores.

Ganar es lo que importa, pero disolver las Cortes y chocar con una legislatura de m¨¢s pactos y concesiones no deja de ser una absoluta contrariedad para el PP. La intenci¨®n de Pablo Casado de no pactar gobiernos de coalici¨®n con Vox escapa de su control. Santiago Abascal sentenci¨® el domingo por la noche que hab¨ªa escuchado la voz de los castellanos y leoneses y hab¨ªa entendido que su partido tiene que estar en el Gobierno, codo con codo con Ma?ueco y con el programa electoral de los ultraderechistas para la regi¨®n sobre la mesa. No era lo previsto para Ma?ueco ni para Casado. Tampoco esperaban que las plataformas provinciales fueran a demostrar tanto m¨²sculo.

El PP no lo vio venir. El ¨¦xito de Teruel Existe en 2019 y ahora de Soria ?Ya! ¡ªjunto a la de los partidos localistas Uni¨®n del Pueblo Leon¨¦s y Por ?vila¡ª avanza un fen¨®meno de trascendencia nacional. Un fracaso del bipartidismo y de los partidos tradicionales. El PSOE y el PP han ganado en cuatro provincias respectivamente, y la plataforma soriana barre en la suya.

En la liturgia postelectoral se ver¨¢ a Ma?ueco en conversaciones con todos los grupos, pero aunque dilate el momento final ser¨¢ Vox el que marque la pauta: Abascal quiere la vicepresidencia para su candidato, Juan Garc¨ªa-Gallardo. No solo eso, sino que impondr¨¢ al ganador de las elecciones que atienda las reivindicaciones de las plataformas provinciales.

Vox como valedor de las provincias, que no del Estado de las autonom¨ªas. Resultado extra?o porque el triunfo del PP lleva aparejado el crecimiento de Vox y de las plataformas. Poco importar¨¢ en los pr¨®ximos d¨ªas que la diferencia en votos y porcentaje entre el PP y el PSOE sea escasa.

El PP siempre gana en Castilla y Le¨®n, con la excepci¨®n de 2019 cuando fue adelantado por el PSOE pero sin resultado pr¨¢ctico. No es nuevo. Lo novedoso est¨¢ en el crecimiento sostenido y constante de Vox. Ya pas¨® cuando se repitieron las elecciones generales en 2019 y doblaron en representaci¨®n. Vox solo puede tener motivos de agradecimiento para los dos partidos nacionales y hegem¨®nicos.