La pol¨ªtica de las emociones sepulta el debate
Los esl¨®ganes sustituyen al contenido y dejan fuera de foco asuntos como la gesti¨®n de la pandemia o la desigualdad
Isabel D¨ªaz Ayuso traz¨® una met¨¢fora involuntaria de la campa?a del 4-M en la carta que envi¨® a todos los electores madrile?os. Donde los dem¨¢s candidatos se presentaban y resum¨ªan sus propuestas, la cabeza de lista del PP incluy¨® su foto, un lema ¡ª ¡°libertad¡± o ¡°seguridad¡±¡ª y un folio en blanco. Dif¨ªcil encontrar un icono m¨¢s expresivo de lo que ha sido esta campa?a: esl¨®ganes tremebundos, agresividad desatada y escaso contenido. El mundo se enfrenta a una cat¨¢strofe sanitaria y econ¨®mica, mientras en Madrid ¡ªuna de las regiones europeas m¨¢s golpeadas por la pandemia¡ª se discute del comunismo, del fascismo y de la libertad de tomarse unas ca?as.
No hay muchos precedentes de una campa?a tan an¨®mala y encanallada. Y por eso florecen los diagn¨®sticos desoladores en su balance. Lo es el de Jos¨¦ Mar¨ªa Lassalle, profesor, ensayista y exdiputado del PP: ¡°Asistimos a un escal¨®n m¨¢s de un proceso populista en el que las campa?as ya no se proponen como una reflexi¨®n sobre la gesti¨®n, sino que eso es sustituido por lo que en la jerga de las redes sociales se llama ¡®experiencias¡¯. Hay un populismo estructural al que no le interesa nada la gesti¨®n, solo administrar las emociones¡±.
No es menos amarga la conclusi¨®n de Jorge Urd¨¢noz, polit¨®logo y profesor de la Universidad de Navarra: ¡°Diez a?os despu¨¦s del 15-M, la vieja pol¨ªtica se ha ense?oreado de la situaci¨®n y se ha mostrado incluso peor y m¨¢s incomprensible que la del bipartidismo¡±. Una pol¨ªtica ¡°radicalizada¡±, que solo persigue ¡°la destrucci¨®n del adversario¡± y que funciona a base de ¡°esl¨®ganes vac¨ªos¡±, se?ala Urd¨¢noz.
Al margen del ¨²nico debate entre candidatos, el ruido ha apagado la discusi¨®n sobre la pandemia, en una comunidad en la que murieron 5.000 ancianos en residencias y que es la segunda de Espa?a que menos dinero per c¨¢pita destina a sanidad. Como apenas se ha hablado de desigualdad, cuando Madrid es la regi¨®n que m¨¢s aporta al PIB nacional y tiene al 42% de la poblaci¨®n con dificultades para llegar a fin de mes.
La consultora Ver¨®nica Fumanal, que ha asesorado a Pedro S¨¢nchez y Albert Rivera, cree que ha sido la izquierda ¡ªcon la excepci¨®n de M¨¢s Madrid¡ª la que se ha dejado ¡°arrastrar al marco que Ayuso le ha impuesto¡±: presentar la contienda como ¡°un combate ideol¨®gico para no discutir sobre la gesti¨®n¡±. En el caso del PSOE, seg¨²n Fumanal, renunci¨® incluso a dar la batalla de la pol¨ªtica fiscal. ¡°Y as¨ª no se ha hablado casi nada de educaci¨®n o desigualdad, mientras todo el mundo entraba a todas las provocaciones¡±
Los partidos se culpan mutuamente de haber embarrado el debate. Y se quejan de que los medios prestan m¨¢s atenci¨®n al chascarrillo y la frase gruesa que a las cuestiones de fondo. El ruido ha sido tan ensordecedor, alegan, que ha sepultado propuestas y reflexiones sobre asuntos que s¨ª afectan a la vida de la gente.
De ?ngel Gabilondo se ha hablado mucho en los ¨²ltimos d¨ªas por el endurecimiento de su tono contra la ultraderecha, pero, al tiempo, el candidato socialista ha mantenido una agenda intensa con actos sobre educaci¨®n, feminismo e inmigraci¨®n. Cuestiones como las elevadas tasas universitarias o la falta de centros de salud y colegios en las ciudades del sur de Madrid han estado muy presentes en sus discursos. Pero en su equipo de campa?a admiten que es muy dif¨ªcil que trascienda todo eso con tal grado de polarizaci¨®n. ¡°Cuanto menos se hable de gesti¨®n y de programas, mejor para Ayuso¡±, lamentan. En los ¨²ltimos d¨ªas, han intentado cambiar el paso con el anuncio de un abono de transporte joven gratuito durante dos a?os que beneficiar¨ªa a 1,7 millones de madrile?os.
Tambi¨¦n Ayuso se ha prodigado en los actos sectoriales. ¡°Y ha hablado cada d¨ªa de impuestos, educaci¨®n, sanidad¡ Lleva 30 d¨ªas vinculando el concepto de libertad a la fiscalidad, la educaci¨®n o los horarios comerciales¡±, se?ala un dirigente del PP, quien concluye: ¡°Lo que ha ocurrido es achacable a la izquierda¡±. Ayuso ha recuperado viejas banderas de Esperanza Aguirre: su defensa del modelo educativo biling¨¹e, de los horarios comerciales sin limitaci¨®n o de la educaci¨®n concertada. Pero apenas ha ofrecido proyectos nuevos y en sus m¨ªtines ha presentado las elecciones como un plebiscito entre ella y S¨¢nchez.
Ciudadanos ha evitado dos temas de los que habl¨® mucho en el pasado. El primero, la lucha contra la corrupci¨®n, una de sus banderas, pero que, seg¨²n las encuestas de su equipo de campa?a, ha ¡°cansado¡± a la poblaci¨®n. El otro, la gesti¨®n de la pandemia de Ayuso, muy cuestionada por Ignacio Aguado, su vicepresidente de Ciudadanos. El nuevo candidato, Edmundo Bal, a la vista tambi¨¦n de las encuestas sobre las preferencias de sus votantes, ha aparcado esas cr¨ªticas y se ha centrado en propuestas como el refuerzo de 11.000 sanitarios y la reducci¨®n de las listas de espera.
M¨¢s Madrid lo dej¨® claro en su lema electoral: Lo que de verdad importa. Su jefe de campa?a, Pablo G¨®mez Perpiny¨¤, dice que eran conscientes de que ¡°el ruido y la pol¨¦mica terminan triunfando¡± debido a la ¡°mediatizaci¨®n de la pol¨ªtica¡±. Y aun as¨ª, su apuesta por temas como la mejora de los servicios p¨²blicos y de los cuidados s¨ª que ha logrado abrirse paso entre el barullo: ¡°Esto no puede ser un Madrid-Bar?a. M¨¢s all¨¢ de las informaciones que copan los medios, lo que de verdad importa a la gente son los centros de salud, los colegios, la vacunaci¨®n... Creo que nuestra estrategia ha funcionado¡±.
Aunque de Pablo Iglesias se ha hablado en los ¨²ltimos d¨ªas sobre todo por su disyuntiva de ¡°democracia o fascismo¡±, el candidato de Unidas Podemos no ha dejado de referirse en cada mitin a la sanidad y educaci¨®n p¨²blicas ¡ªpropone 1.000 millones m¨¢s de inversi¨®n para cada una de esas ¨¢reas¡ª, de una fiscalidad que grave a los m¨¢s ricos o de la regulaci¨®n del precio de la vivienda. ¡°?De qu¨¦ van estas elecciones? ?De propuestas o del peligro del fascismo?¡±, se pregunt¨® en un acto el pasado jueves. ¡°Precisamente porque hacemos este tipo de propuestas y cuando gobernamos las peleamos hasta el final, el fascismo aparece como un peligro¡±. El feminismo o el transporte p¨²blico han sido otros temas muy repetidos en su campa?a.
Tambi¨¦n Vox ha dejado algunas propuestas: menos impuestos, m¨¢s seguridad y apertura total de comercios y hosteler¨ªa. Pero, en su caso, la decidida apuesta por el ruido se ha escenificado sin mucho disimulo: su gran aportaci¨®n ha sido una campa?a contra la acogida de ni?os inmigrantes.
Un ¡°laboratorio de la guerra cultural¡± que viene
A Jos¨¦ Mar¨ªa Lassalle, ya alejado de la pol¨ªtica, la campa?a madrile?a no ha hecho m¨¢s que acrecentarle su pesimismo sobre el futuro inmediato de la discusi¨®n p¨²blica en Espa?a: ¡°Esto ha sido el laboratorio de la guerra cultural que nos espera en las pr¨®ximas generales¡±. ?C¨®mo se puede tomar en serio que estas elecciones son un combate entre comunismo y el fascismo?. ¡°Porque el lenguaje pol¨ªtico se ha contaminado tambi¨¦n de las teor¨ªas de la conspiraci¨®n y de las paranoias colectivas que proliferan en las redes¡±, contesta Lassalle.
Cada vez son m¨¢s las voces que culpan de estas campa?as sin contenidos al poder que han ido acumulando los asesores de comunicaci¨®n de los partidos. ¡°Yo digo que hay pol¨ªticos con asesores y pol¨ªticos asesorizados¡±, apunta Jorge Urd¨¢noz. ¡°Los primeros se rodean de gente que sabe de temas concretos. Los segundos no tienen ideolog¨ªa y se entregan a los expertos en comunicaci¨®n¡±.
Ver¨®nica Fumanal, presidenta de la Asociaci¨®n de Comunicaci¨®n Pol¨ªtica, sostiene que hay una idea equivocada sobre el poder de los consultores: ¡°Nosotros tenemos influencia, pero no poder. El que decide es el pol¨ªtico. Yo nunca he obligado a ninguno a hacer algo que no quer¨ªa¡±. Pero Fumanal no oculta que ha cambiado la naturaleza de la pol¨ªtica: ¡°La pol¨ªtica ahora forma parte del entretenimiento y los pol¨ªticos funcionan como celebrities. As¨ª lo han creado entre los medios, las audiencias y los propios pol¨ªticos. Si alguien va a la tele a hablar de presupuestos, la gente cambia de canal¡±. En esas circunstancias, se?ala, la labor de los consultores es elaborar mensajes ¡°sencillos¡±. Y matiza: ¡°Sencillos, no simples. Lo sencillo no tiene por qu¨¦ ser simple¡±.
Con informaci¨®n de Juan Jos¨¦ Mateo, Jos¨¦ Marcos, Elsa Garc¨ªa de Blas, Manuel Viejo, Paula Chouza y Xos¨¦ Hermida.
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