El futuro de los pactos asoma en el ¨²ltimo adi¨®s a Ardanza

La muerte este lunes de Jos¨¦ Antonio Ardanza a los 82 a?os ha hecho revivir una etapa de la historia reciente del Pa¨ªs Vasco que el lehendakari dirigi¨® 14 a?os, entre 1985 y 1999, sobre dos bases s¨®lidas: la unidad de los dem¨®cratas frente al terrorismo de ETA y el acuerdo entre diferentes en la construcci¨®n de una sociedad en paz. Su figura emerge en plena campa?a electoral. Cientos de personas, autoridades, representantes pol¨ªticos e institucionales de todos los colores, le despidieron este mi¨¦rcoles en la capilla ardiente instalada con todos los honores en la palacio de Ajuria Enea, en Vitoria. En el adi¨®s a Ardanza hay una coincidencia general al destacar que fue un hombre de bien, un pol¨ªtico ¨ªntegro y, sobre todo, un defensor de la concordia y el pacto entre diferentes. Precisamente, el pactismo que le distingui¨® cobra actualidad durante la campa?a electoral el d¨ªa en que se celebraban sus honras f¨²nebres.

Los acuerdos ¡°entre distintos¡± que defendi¨® e impuls¨® Ardanza van a ser imprescindibles, s¨ª o s¨ª, tras el 21-A. Ning¨²n partido va a lograr ese d¨ªa la mayor¨ªa absoluta (38 esca?os en un Parlamento de 75 representantes), dicen las encuestas. Lo incierto del resultado electoral hace que el PNV sea el m¨¢s interesado en esconder sus cartas, pero la presi¨®n de sus adversarios le est¨¢ obligando a ense?arlas. En el primer debate televisivo entre candidatos, en RTVE el martes por la noche, el socialista Eneko Andueza puso en un aprieto a Joseba D¨ªez Antxustegi (sustituto de Imanol Pradales en ese programa): ¡°Aproveche para cerrar la puerta al ofrecimiento de EH Bildu de gobernar juntos¡±. El acuerdo con Bildu ¡°es muy dif¨ªcil, pr¨¢cticamente imposible¡±, le solt¨®, de sopet¨®n, el candidato del PNV. No estaba en su guion dejarlo tan claro.

?Y si EH Bildu gana estas elecciones? El Centro de Investigaciones Sociol¨®gicas (CIS) da ahora la victoria a la izquierda independentista, que obtendr¨ªa entre el 34,2% y el 35,1% de los votos, un paso de gigante con respecto a los resultados de hace cuatro a?os, cuando logr¨® el 28% (21 esca?os). En su ¨²ltimo sondeo, conocido este mi¨¦rcoles, el PNV, que casi siempre ha ganado en los comicios vascos (en 1986 gan¨® el PSE), podr¨ªa perder la hegemon¨ªa pol¨ªtica. La plancha encabezada por Imanol Pradales recibir¨ªa entre el 32,6% y el 33,5% de los apoyos, muy lejos del 39% que acumul¨® en 2020. Con esta previsi¨®n, la formaci¨®n del futuro Gobierno vasco quedar¨ªa en manos de los socialistas vascos, tercera fuerza con un 13,1%-14,1% de los sufragios, y de nuevo con la capacidad de decidir qui¨¦n ser¨¢ el pr¨®ximo lehendakari. Las fuerzas de la izquierda confederal, Elkarreklin Podemos y Sumar, rozan el l¨ªmite del 3% de los votos que dan un asiente en el Parlamento, al igual que Vox, cuyo esca?o sigue estando en el alero.

El panorama que dibuja la demoscopia refuerza la teor¨ªa de que se necesitar¨¢ el entendimiento entre diferentes a partir del 22 de abril. El PSE-EE, socios del PNV en el Ejecutivo aut¨®nomo y en las principales instituciones vascas desde 2015, ya ha marcado sus l¨ªmites: no apoyar¨¢ a un lehendakari de Bildu. Lo ha dicho Andueza por activa y por pasiva, aunque el PNV desconf¨ªa de ello, porque ¡°la decisi¨®n la va a tomar el se?or [Pedro] S¨¢nchez¡±.

La encuesta de 40dB. para EL PA?S y la SER recog¨ªa a finales de marzo pasado cu¨¢les eran las preferencias de los vascos sobre el futuro Gobierno. La opci¨®n mejor valorada es la repetici¨®n de la alianza PNV-PSE, que recibe el respaldo del 28,4% de los consultados, frente a un 23,4% que se inclinan por un pacto entre nacionalistas (PNV y EH Bildu). Casi la mitad de los votantes del PNV (el 48,5%) se inclinan por seguir gobernando con los socialistas vascos. En cambio, los simpatizantes de la izquierda independentista (un 46,8%) se decantan mayoritariamente por una alianza con sus grandes rivales, el PNV, tras estos comicios. Una entente entre partidos de izquierdas (Bildu y PSE), que dejar¨ªa al PNV en la oposici¨®n si diesen los n¨²meros, es la opci¨®n preferida (un 56,5%) de los votantes de Podemos y defendida por el 39,7% del electorado fiel al partido de Arnaldo Otegi.

Si gana Bildu, el PP est¨¢ dispuesto a cerrarle el paso al Gobierno vasco, aunque esta vez, asegura su candidato Javier de Andr¨¦s, no lo har¨ªa gratis et amore, como ocurri¨® tras los comicios municipales y forales de 2023, cuando fue clave para impedir que EH Bildu se hiciese con el poder en Gipuzkoa, Vitoria y Durango (Bizkaia). Tanto Podemos como Sumar, cuya capacidad decisoria parece escasa, ya han adelantado su deseo de conformar una gran familia de izquierdas y progresista que incluir¨ªa a Bildu y al PSE, aunque esta no tiene muchas posibilidades de que sea una realidad.

La coalici¨®n abertzale que encabeza Pello Otxandiano, presente en las exequias de Ardanza este mi¨¦rcoles, aspira a extrapolar a Euskadi las ¡°experiencias interesantes¡± de Navarra o de Pamplona . Otegi suele preguntarse por qu¨¦ el entendimiento que tiene su partido con el PSOE en Madrid y en Navarra no se puede trasladar a la pol¨ªtica vasca. Hay un m¨ªnimo ¨¦tico que lo impide, insisten los socialistas vascos, que exigen a Bildu una condena firme de la actuaci¨®n de ETA. Andueza fue el ¨²nico candidato que interpel¨® sobre este asunto a la candidata de Bildu Nerea Kortajarena en el debate de TVE: ¡°Tiene una oportunidad aqu¨ª mismo para condenar la violencia de ETA y abrir un nuevo tiempo en Euskadi¡±. La respuesta fue un silencio inc¨®modo.

¡°No toca hablar de pactos, eso a partir del 22¡å, aseguran en el PNV el mismo d¨ªa que se despide solemnemente a Ardanza entre alabanzas por su contribuci¨®n a favor del pactismo, un legado pol¨ªtico que no recibir¨¢ sepultura en Euskadi.