Louz¨¢n afronta tres a?os de prisi¨®n por sobrecostes del campo de f¨²tbol de Mora?a
La delegada de la Xunta, Luisa Pi?eiro, se sienta en el banquillo junto al expresidente de la Diputaci¨®n de Ponteveddra y otros acusados por presunta prevaricaci¨®n y fraude en la ejecuci¨®n del proyecto
Una escisi¨®n de la voluminosa y frustrada Operaci¨®n Patos sentar¨¢ este viernes en el banquillo a Rafael Louz¨¢n, presidente de la Federaci¨®n Gallega de Futbol, por supuestos sobrecostes en las obras del estadio de Mora?a, que se ejecutaron hace siete a?os, durante la etapa en la que presidi¨® la Diputaci¨®n de Pontevedra. La fiscal¨ªa pide para ¨¦l una condena de 3 a?os de prisi¨®n por un presunto delito de prevaricaci¨®n.
Junto a ¨¦l tambi¨¦n ser¨¢ juzgada la delegada territorial de la Xunta y exalcaldesa de Mora?a, Luisa Pi?eiro, adem¨¢s de otros seis acusados de supuesto fraude y prevaricaci¨®n en la contrataci¨®n y sobrecoste de las obras del campo. La Fiscal¨ªa solicitada para ellos condenas de entre dos y cinco a?os de prisi¨®n.
El proyecto se aprob¨® en diciembre del 2011 para dotar al campo El Buelo de hierba artificial y otras obras en las instalaciones anexas. El presupuesto global, entre la redacci¨®n del proyecto y su ejecuci¨®n, rond¨® el mill¨®n de euros que se coste¨® a trav¨¦s de una subvenci¨®n discrecional del presidente Rafael Louz¨¢n. Las obras fueron contratadas por la firma Construcciones Eiri?a.
En 2013 se aprob¨® un proyecto modificado para ¡°ajustarse a las nuevas necesidades surgidas durante la ejecuci¨®n, y ello sin coste adicional sobre el presupuesto inicial¡±, seg¨²n recoge el escrito de acusaci¨®n del Ministerio Fiscal. Entonces se aprob¨® el reconocimiento de pago de la certificaci¨®n correspondiente, haciendo constar que no quedaba pendiente de ejecutar ninguna obra
Sin embargo, el fiscal sostiene que como la empresa Eiri?a hab¨ªa realizado obras no contratadas y fuera del proyecto aprobado a petici¨®n del Ayuntamiento de Mora?a, esta reclam¨® el pago de 86.816,47 euros. Por lo que present¨® una nueva certificaci¨®n en la que se aumentaban algunas partidas hasta llegar al importe total que reclamaba la constructora.
Pero al tratarse de una obra ejecutada con subvenci¨®n no se pod¨ªa rebasar el importe consignado, por lo que dicha certificaci¨®n no fue finalmente atendida. As¨ª, seg¨²n la Fiscal¨ªa de Pontevedra, ¡°se ide¨® un sistema artificioso, en fraude de ley, tendente a abonar a la empresa Eiri?a el importe que reclamaba sobre el presupuesto aprobado¡±. Y se hizo, presuntamente, con el acuerdo del presidente de la Diputaci¨®n, el director de infraestructuras de esta Administraci¨®n, el representante y el administrado de la empresa Eiri?a, la alcaldesa de Mora?a y el arquitecto.
En agosto de 2013, Luisa Pi?eiro solicit¨® una nueva subvenci¨®n a la Diputaci¨®n de Pontevedra en base a un proyecto t¨¦cnico de mejoras en el vestuario y gradas del campo de f¨²tbol que fue firmado por el arquitecto y acusado en este proceso, en el que se recog¨ªan obras ya ejecutadas. Finalmente la junta de gobierno provincial concedi¨® la ayuda con cargo a la partida de libre disposici¨®n del presidente.
Tres empresas optaron a la ejecuci¨®n de las obras, Eiri?a, Construcciones E.C. y Canalizaciones y Construcciones S., aunque el fiscal considera que la invitaci¨®n a estas dos ¨²ltimas fue un mero tr¨¢mite con apariencia de legalidad. ¡°Consta que al menos parte de los obras a que se refiere el proyecto del arquitecto ya hab¨ªan sido realizadas antes de la presentaci¨®n de la solicitud de subvenci¨®n por parte de la acusada Luisa Pi?ero y, especialmente, antes de que se firmase el acta de comprobaci¨®n de replanteo¡±, se?ala la acusaci¨®n p¨²blica.
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