Final para la pesadilla de 100 mayores
El Ayuntamiento de Alcorc¨®n adquiere todas las viviendas del Plan Permuta y garantiza que los moradores no tendr¨¢n que volver a sus antiguas casas
Final a una pesadilla para unos 100 mayores de Alcorc¨®n, que durante m¨¢s de un a?o han visto peligrar el poder quedarse en los pisos en los que residen desde hace m¨¢s de una d¨¦cada. El Ayuntamiento de la localidad ha llegado a un acuerdo de compra con los administradores concursales de la empresa municipal de la vivienda. De esta forma, los beneficiarios del llamado Plan Permuta no tendr¨¢n que volver a sus antiguas casas en el centro del municipio. Muchas de ellas fueron okupadas o carecen de las m¨ªnimas condiciones de accesibilidad para estas personas.
El llamado Plan Permuta se puso en marcha a finales de la d¨¦cada pasada por parte de la Empresa Municipal de Gesti¨®n Inmobiliaria de Alcorc¨®n (Emgiasa, de titularidad 100% municipal), mientras se constru¨ªa el nuevo barrio de la localidad, el Ensanche Sur, con m¨¢s de 7.000 viviendas, en su mayor¨ªa de promoci¨®n p¨²blica. El equipo de gobierno, bajo el mandato del PSOE, ide¨®, como hab¨ªa pisos de sobra para la demanda de la ciudad, un sistema para las personas mayores de 70 a?os que vivieran en casas con problemas de accesibilidad o para minusv¨¢lidos. Muchos resid¨ªan en terceras y cuartas plantas del casco antiguo, sin ascensor, lo que les limitaba e incluso imped¨ªa hacer una vida normal, como salir a la calle.
Los beneficiarios recib¨ªan una vivienda en plantas bajas de los nuevos edificios promovidos por Emgiasa y a cambio entregaban sus pisos al Ayuntamiento. Este los dedicar¨ªa a alquilar a un precio reducido entre j¨®venes menores de 30 a?os, dada la cercan¨ªa de la Universidad Rey Juan Carlos, entre otros motivos.
El plan fue suscrito por 88 mayores, que a finales de la d¨¦cada pasada se mudaron al nuevo barrio de Alcorc¨®n. Lo que fall¨® en este plan es que parte de sus antiguas no se sacaron al alquiler y algunas de ellas fueron okupadas. As¨ª terminaron destrozadas e incluso inhabitables. Tuvieron que ser valladas y protegidas con ladrillos para evitar nuevas okupaciones.
Con la llegada del PP al poder en el Ayuntamiento de Alcorc¨®n, Emgiasa pidi¨® en 2012 el concurso de acreedores voluntario. La crisis de 2008 pasaba mella y parte de los adjudicatarios no pod¨ªan hacer frente al pago de sus hipotecas. Adem¨¢s, la empresa municipal acometi¨® una obra fara¨®nica, como el Centro de Creaci¨®n de las Artes de Alcorc¨®n (CREA), en el barrio de San Jos¨¦ de Valderas, con un presupuesto de 140 millones. Eso, unido a la construcci¨®n de aparcamientos y locales p¨²blicos en la localidad y una sentencia que obligaba a pagar 52 millones de euros a los propietarios del suelo del Ensanche Sur, llevaron a Emgiasa a una situaci¨®n insostenible. As¨ª lo vio al menos el equipo de gobierno, en contra de la opini¨®n de parte de la oposici¨®n. El pasivo alcanzaba los 333 millones de euros.
Los administradores concursales propusieron en 2014 que las viviendas del Plan Permuta fueran adquiridas por el propio Ayuntamiento, dado que en definitiva cumpl¨ªan una funci¨®n social. Un escrito municipal rechaz¨® la oferta por varios motivos. El plan lo ejecut¨® Emgiasa ¨Cno el Consistorio-; la Ley de Racionalizaci¨®n y Sostenibilidad le imped¨ªa a la Corporaci¨®n aportar dinero a empresas p¨²blicas y se carec¨ªa de un t¨ªtulo jur¨ªdico apropiado para realizar esa adquisici¨®n, seg¨²n el recurso municipal. Pero el m¨¢s importante era que, como el Ayuntamiento no ten¨ªa entonces ¡°recursos econ¨®micos suficientes¡±, aconsejaba que las entidades bancarias presentes en el concurso de Emgiasa se hicieran con esas viviendas.
Los a?os pasaron y el concurso fue avanzando no sin dificultades. El titular del Juzgado de lo Mercantil n¨²mero 6 de Madrid, Francisco Javier Vaquer Mart¨ªn, firm¨® el 26 de marzo de 2019 un auto en el que obligaba a los beneficiarios del Plan Permuta a adquirir sus viviendas ¨Cpese al tiempo que llevaban residiendo en ellas- o a abandonarlas y regresar a sus antiguos pisos. Faltaban dos meses para las elecciones municipales y el equipo de gobierno municipal, del PP, no movi¨® ficha. Dej¨® pasar el tiempo, bajo la excusa de que el Ayuntamiento no pod¨ªa hacer frente a esa deuda y, por tanto, no pod¨ªa comprar las viviendas. De poco sirvieron las protestas de los mayores y de otros colectivos de apoyo en la plaza de Espa?a, justo debajo del despacho del entonces alcalde y actual consejero de Vivienda y Administraci¨®n Local, David P¨¦rez.
Las elecciones municipales del a?o pasado cambiaron el signo pol¨ªtico en el Ayuntamiento alcorconero y entr¨® a gobernar una coalici¨®n de PSOE y Ganar Alcorc¨®n. La alcaldesa, la socialista Natalia de Andr¨¦s, puso como una de sus prioridades solucionar este problema con la mayor rapidez. Para ello, promovi¨® una reuni¨®n con los administradores concursales, que apoyaron desde el primer momento que el Consistorio se hiciera con las viviendas del plan. De hecho, se retomaba la propuesta que ellos mismo hab¨ªan hecho al magistrado Vaquer Mart¨ªn y que fue desestimada por el anterior equipo de gobierno.
Fruto de esas negociaciones, se ha llegado al acuerdo de que el Ayuntamiento se haga con las viviendas de estos mayores y minusv¨¢lidos. Formar¨¢n parte del parque municipal de pisos sociales, de forma que los mayores podr¨¢n vivir en ellas hasta que se cambien a otro domicilio, se muden a una residencia o fallezcan. En ning¨²n caso podr¨¢n traspasar sus derechos a otros familiares, aunque convivan habitualmente con ellos.
De Andr¨¦s ha mostrado su satisfacci¨®n por el acuerdo alcanzado: ¡°Es una magn¨ªfica noticia para la pol¨ªtica social de la ciudad, ya que vamos a poder generar un parque de viviendas de emergencia para la ciudad que va a posibilitar cubrir las necesidades que existen en la ciudadan¨ªa¡±. ¡°Es una cuesti¨®n de justicia clara para estos mayores que viv¨ªan una situaci¨®n complicada y solo requer¨ªa de voluntad pol¨ªtica¡±, ha concluido.
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