Una galer¨ªa en la que todo es ¡®instagrameable¡¯

La galer¨ªa Ikono abre sus puertas para arrancar otra jornada. En apenas unos minutos ya hay tres grupos esperando en el hall de la entrada. Un ni?o corretea nervioso entre neones mientras su familia gestiona la reserva en el mostrador. Unas chicas en plena adolescencia se dirigen a una sala inundada de espejos y colores para inmortalizar el momento con una foto que subir¨¢n a Instagram en cuesti¨®n de segundos. En este espacio de 600 metros cuadrados y tres plantas todo, pero absolutamente todo, est¨¢ pensado para ser instagrameable.

Puede que algunas personas ya se hayan cruzado con una story de alg¨²n contacto que ha estado en Ikono. Le habr¨¢n visto en una pose favorecedora, con cara de pasar un buen rato en esa vida con filtros que coloniza las redes sociales. Fernando Pastor Troya fue consciente de ese culto y promoci¨®n constante de la propia imagen y se encarg¨® de montar una experiencia sensorial y fotografiable que recorre diferentes salas, desde un bosque de bamb¨² natural con sonidos de lluvia, hasta piscinas de bolas, l¨¢mparas que cuelgan del techo con espejos que aumentan la profundidad o espacios llenos de neones con las alas de un ¨¢ngel colocadas detr¨¢s de un sof¨¢ para hacerse el oportuno retrato. Otros lugares fuera de Espa?a tambi¨¦n se nutren de este estilo inmersivo como Color Factory y Meow Wolf en Estados Unidos. La duraci¨®n es de una hora aproximada con un precio de 12,50 euros para los adultos y ocho euros para los m¨¢s peque?os.

Todas las reservas se realizan a trav¨¦s de la web para controlar el aforo y planificar el recorrido, que es de direcci¨®n ¨²nica para que no coincidan diferentes personas que no vienen juntas en una misma sala. Fernando Pastor asegura que le est¨¢ funcionado el boca a boca -el foto a foto- de Instagram. "El producto gusta tanto que se vende un poco solo. Hemos invitado a muchos artistas e influencers a ver el espacio para que lo compartieran en redes, pero cada persona que entra en Ikono muestra a sus seguidores el plan de una forma muy natural¡±, comenta el CEO del proyecto, un sevillano de tan solo 22 a?os que se vino a Madrid porque pens¨® que la ciudad ped¨ªa a gritos un sitio como este.

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La idea de Ikono la gest¨® su primo, David Troya, fundador de Glamping Hub, un buscador de alojamientos de lujo dentro de la naturaleza. Se le ocurri¨® cuando estaba con su hijo en un bosque de bamb¨²s de Kioto. Una vez estuvo de vuelta se dio cuenta de que hab¨ªa presenciado un sitio ic¨®nico y gigante, en el que se hab¨ªa sentido totalmente conectado y presente en el medio con posibilidad de sacar fotograf¨ªas memorables. ¡°Quer¨ªamos replicar esa sensaci¨®n de viajar a nuevos sitios chulos e ic¨®nicos sin salir del centro de Madrid y reunirlos todos juntos¡±, apunta Fernando.

Una vez sembrado el concepto tocaba transformarlo en realidad. Y ah¨ª entr¨® la gesti¨®n de Fernando, que lleg¨® en agosto del a?o pasado para buscar proveedores, localizaciones y llevar las relaciones con las partes involucradas. ¡°Necesit¨¢bamos un local chulo y no encontr¨¢bamos ninguno que nos gustase porque no ten¨ªan techos altos o no quer¨ªamos esa ubicaci¨®n o el precio era demasiado alto, ten¨ªa que reunir muchos factores. Conoc¨ª todas las inmobiliarias de Madrid e iba a visitar cuatro o cinco locales al d¨ªa, hasta que me llamaron para decirme que ya no hab¨ªa m¨¢s sitios que pudieran ofrecerme¡±, cuenta entre risas Fernando, que no se desanim¨® en ning¨²n momento.

Al final encontr¨® un local en noviembre de 2019, tres meses despu¨¦s de su aterrizaje en la capital, que reun¨ªa todas las condiciones y que le enamor¨® al instante. Estaba en frente del Reina Sof¨ªa, un recorrido tur¨ªstico por excelencia. Sobre la marcha encontraron un equipo de decoradores de interior, el estudio Pombo, que capt¨® las intenciones de Fernando y le asesor¨® para crear la forma visual y los materiales de Ikono. Ese proceso de puesta a punto les demor¨® la apertura hasta marzo, el mes en el que la pandemia golpe¨® con fuerza a Espa?a.

Esta start up sevillana que naci¨® para impulsar Ikono y que ya cuenta con 10 empleados tuvo que buscar m¨¢s socios que se unieran al proyecto ya que el nuevo local exced¨ªa el presupuesto limitado con el que contaban. Fue precisamente uno de esos socios con operaciones en el extranjero quien les advirti¨® de que no abriesen en marzo porque ya intu¨ªa la tormenta que se avecinada. Fernando confiesa que se hubieran lanzado a la aventura porque pensaban que el coronavirus no iba a entrar de lleno al pa¨ªs, pero se equivocaron, como tantos otros.

Tras el confinamiento Fernando regres¨® a Madrid y el 7 de agosto abri¨® Ikono en medio de una crisis econ¨®mica que afecta a casi todos los sectores. ¡°Hemos ido a contracorriente, nos dec¨ªan que era una locura pero nosotros cre¨ªamos que iba a funcionar. Quer¨ªamos dar respuesta a todas esas personas que llevaban meses encerradas y buscaban planes diferentes en Madrid. Claro que tuvimos miedo y dudas por la incertidumbre, pero confiamos much¨ªsimo en el producto y sab¨ªamos que iba a gustar¡±, explica.

El p¨²blico objetivo al que se dirige Ikono es la generaci¨®n Z, nativos digitales, consumidores en potencia para los que las redes sociales son una extensi¨®n m¨¢s de su personalidad. Aunque tambi¨¦n acuden muchas familias y grupos de amigos que han visto correr por redes sociales esta experiencia que combina arte y entrenamiento. La diversi¨®n en este ic¨®nico espacio est¨¢ asegurada, al menos de cara a la galer¨ªa.