Viaje con nosotros
Madrid merece ya una ruta descapotable tur¨ªstica de las sedes de los partidos en esta nueva normalidad
En el n¨²mero 13 de la calle G¨¦nova no han colgado todav¨ªa el cartel de ¡°se vende¡±. Desde el paso de peatones, para tener buena perspectiva, repaso la fachada y no lo encuentro. ?Decepci¨®n! No han puesto un n¨²mero de tel¨¦fono en gigante con la cara de un agente inmobiliario que tanto gusta en las nuevas promociones. Sigue un gran lazo naranja, pero no le faltar¨¢n compradores. Esa zona est¨¢ cubierta de inmensas lonas que anuncian a tope de anglicismos (¡°luxury¡±, ¡°properties¡±) un Madrid reformado. Apenas unos n¨²meros m¨¢s arriba en la misma acera se tienta a las cuentas corrientes m¨¢s saneadas con carteles que reproducen apartamentos de dise?o llenos de espacios di¨¢fanos, ventanales, alfombras geom¨¦tricas y controles dom¨®ticos.
Anda todo levantado en estas calles, desde la propia Torre de Col¨®n -me declaro devastado por la p¨¦rdida de su enchufe- hasta el n¨²mero tres de General Casta?os, que promete una nueva vida con spa y vistas al Tribunal Supremo. El PP abandona a sus vecinos de la zona, dice adi¨®s como la m¨ªtica cafeter¨ªa Santander, en la que tantos simpatizantes brindaron o lloraron despu¨¦s de algunas jornadas electorales.
S¨®lo hay que copiar a los americanos, como esas rutas que te hace TMZ en Los ?ngeles en una furgoneta y con pantalla en cada asiento para ver la imagen de los famosos a la vez que aparece el rinc¨®n en directo por tu ventanilla.
Madrid merece ya una ruta tur¨ªstica de sedes de partidos ahora que hay que replantear el sector y buscar nuevas ideas. Apunten, apunten, que todav¨ªa Fitur queda lejos. En esta ciudad tan hipervitaminada de pol¨ªtica ser¨ªa un aut¨¦ntico ¨¦xito. Con paradas gastron¨®micas incluidas cerca de G¨¦nova: que no falten La peseta de do?a Casilda, donde Mariano Rajoy se tomaba una ca?a despu¨¦s de alguna buena noche en las urnas, o la Tasca Suprema, donde llev¨® una vez a Nicolas Sarkozy. Reproduciendo al dedillo el men¨²: gazpacho, ensaladilla y chipirones. Un todo incluido. Y con la experiencia ¨²nica de poder saltar al balc¨®n que pronto desaparecer¨¢ desde la primera planta, que alberga al PP de Madrid.
En esto s¨®lo hay que copiar a los americanos, como esas rutas que te hace TMZ en Los ?ngeles en una furgoneta y con pantalla en cada asiento para ver la imagen de los famosos a la vez que aparece el rinc¨®n en directo por tu ventanilla. Esos ¡°aqu¨ª se enfrent¨® Kanye West a un paparazzi¡± o ¡°ah¨ª tiene el In-N-Out donde com¨ªa hamburguesas Pen¨¦lope Cruz¡± los cambiar¨ªamos por ¡°esta es la entrada del garaje de Ferraz por donde accede Pedro S¨¢nchez¡± o ¡°esta fue la primera sede de Podemos en la calle Zurita¡±. Pr¨®ximas paradas: la segunda y tercera sede de UP (que la pol¨ªtica va muy r¨¢pido), en las calles Princesa y Francisco Villaespesa. Esta ¨²ltima huele todav¨ªa a pintura ne¨®fita en la zona de Pueblo Nuevo. Con destino final en la de M¨¢s Madrid en la calle Toledo, en una antigua sucursal bancaria. Iron¨ªas del destino.
En tiempos en los que hay que evitar los interiores, pongamos m¨¢s autobuses tur¨ªsticos descapotables. Inventemos nuevas rutas, redescubramos Madrid, viajemos de verdad por esa ciudad que cada d¨ªa construyen los telediarios, convoquemos un gran concurso sobre los ¡®tours¡¯ que deseamos, tracemos la historia del d¨ªa a d¨ªa de esta urbe. ?Pr¨®xima parada?
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