Una ¡®city judicial¡¯ injusta con la arquitectura
Con la concesi¨®n privada escapa al control p¨²blico el dise?o de uno de los complejos arquitect¨®nicos m¨¢s importantes que tendr¨¢ Madrid
En la imagen de la nueva Ciudad de la Justicia de Madrid aparecen varios edificios prism¨¢ticos insulsos y apelotonados, dentro de una ordenaci¨®n donde el espacio p¨²blico parece haberse ignorado. ?De d¨®nde surge este dise?o? No ha sido elegido de entre las propuestas presentadas a un concurso p¨²blico. Y se nota. Seg¨²n recoge El Confidencial, el portavoz de la Consejer¨ªa de Presidencia de la Comunidad, impulsora del proyecto, produjo el mi¨¦rcoles un comentario desde el desconocimiento de la arquitectura, de los arquitectos y de la realidad: ¡°No habr¨¢ exc¨¦ntricas construcciones ni arquitectos vanguardistas. No es el objetivo. Se necesitan edificios funcionales para su uso y ser¨¢n entre tres y nueve pisos. Huimos de firmas de dise?o para apostar por la usabilidad.¡±
Sorprende el atrevimiento del que divorcia funcionalidad y dise?o. ?Desde cu¨¢ndo son incompatibles? El dise?o es mucho m¨¢s que la apariencia o la cosm¨¦tica de una fachada o un volumen. La buena arquitectura soluciona como primera premisa las cuestiones funcionales. El buen dise?o integra el uso, los espacios, el contenido y las formas para llegar a un conjunto coherente en el interior y en el exterior, haci¨¦ndolo amable tanto a los que lo habitan o usan como a los que lo perciben desde el exterior.
Para el dise?o y construcci¨®n de la Nueva Ciudad de la Justicia (antes llamada Campus de la Justicia) se ha optado por la f¨®rmula de una concesi¨®n privada, donde el promotor estar¨¢ a cargo de las decisiones que afectan al conjunto arquitect¨®nico que pertenece y es usado por los madrile?os. De esta manera, se escapa al control p¨²blico el dise?o de uno de los complejos arquitect¨®nicos m¨¢s importantes que tendr¨¢ Madrid en los pr¨®ximos a?os. Unos edificios nacidos y creados para dar a la sociedad uno de sus derechos imprescindibles: la justicia universal, igual para todos.
El dise?o original de la Ciudad de la Justicia se adjudic¨® por una serie de concursos abiertos convocados por el Colegio de Arquitectos de Madrid (COAM) tanto el proyecto de implantaci¨®n y urbanizaci¨®n, como muchos de los edificios de planta circular que conformaban una atractiva trama urbana. Hace pocas fechas recibimos tambi¨¦n la noticia de la adjudicaci¨®n mediante concesi¨®n de los primeros suelos del plan VIVE de vivienda social y accesible para m¨¢s de 6500 viviendas en Madrid. El criterio de adjudicaci¨®n a grandes promotoras fue exclusivamente econ¨®mico, no valorando, que tengamos constancia, ni el dise?o de los edificios, ni el entorno urbano, ni la calidad de las viviendas.
Es fundamental que los par¨¢metros de valoraci¨®n de la intervenci¨®n se basen en criterios econ¨®micos y funcionales, pero a partir de una arquitectura de calidad que recoja las necesidades previstas. Un proyecto que nazca de premisas econ¨®micas y presuponga que la buena arquitectura, de vanguardia, es nociva y no responde a las necesidades de la sociedad contempor¨¢nea lanza un mensaje perverso y, sobre todo, falso. Hagamos justicia con la sociedad, dot¨¢ndola de la mejor arquitectura posible a trav¨¦s de unos concursos abiertos para conseguir el entorno y los edificios m¨¢s funcionales, sociales y democr¨¢ticos posible.
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