Nuevos techos para el Isabel de Farnesio

El centro cultural Isabel de Farnesio, situado en pleno centro de Aranjuez (59.000 habitantes), sufri¨® los embates de la borrasca Filomena hace ya un a?o. El enorme peso de la nieve acumulada en los tejados hizo que cedieran las cubiertas de este inmenso edificio construido en el siglo XVIII y destinado en origen a las cocheras de la reina madre tras ser desterrada a la ciudad ribere?a. El Ayuntamiento ha acometido ahora las obras, que comenzaron oficialmente el pasado 23 de diciembre y cuya duraci¨®n inicial est¨¢ prevista en unos nueve meses.

El Isabel de Farnesio se encuentra en la calle del Capit¨¢n Angosto G¨®mez Castrill¨®n, en pleno centro hist¨®rico de Aranjuez. Destaca su planta rectangular y su estilo sobrio, dominado por el uso que se le dio en su origen. Durante a?os, la localidad ribere?a se caracteriz¨® por ser un lugar dedicado al recreo y al disfrute de la caza en un paraje dominado por los bosques y una densa vegetaci¨®n y fauna. Eso hizo que predominara la cr¨ªa de caballos. Fernando VI encarg¨® en 1758 al arquitecto Jaime Marquet el edificio de las Caballer¨ªas y Cocheras de la Reina Madrid Isabel de Farnesio. El inmueble deb¨ªa tener adem¨¢s habitaciones para la servidumbre. Cuando termin¨® la obra tres a?os despu¨¦s, el soberano ya hab¨ªa fallecido, tras lo cual subi¨® al trono su hermanastro e hijo de Isabel de Farnesio, Carlos III. Marquet fue nombrado entonces Arquitecto Real de Aranjuez.

El edificio se organiza en dos patios diferenciados. Uno de ellos serv¨ªa para las caballerizas y el otro para los servicios generales del edificio. Ten¨ªa dos entradas y una comunicaci¨®n de ambos patios. La disposici¨®n que hizo Marquet del edificio permiti¨® utilizarlo desde 1886 como Colegio de Hu¨¦rfanos de Infanter¨ªa, gracias a la intervenci¨®n de la Reina regente Mar¨ªa Cristina. Fue la ¨²ltima modificaci¨®n del inmueble que consisti¨® en hacer funcional su distribuci¨®n interior y en una consolidaci¨®n general. Se le dot¨® de instalaci¨®n sanitaria, calefacci¨®n, dep¨®sitos y cocinas, adem¨¢s de compartimentarlo para crear entreplantas, habitaciones y escaleras.

Tras dejar de ser colegio de hu¨¦rfanos hacia 1970, el edificio cay¨® en el m¨¢s absoluto abandono. En ese tiempo result¨® despojado de todo su inmobiliario interior y de las maderas y bienes que conten¨ªa. Las antiguas cocheras no recuperaron su esplendor hasta que lo adquiri¨® la Comunidad de Madrid, bajo el mandato de Joaqu¨ªn Leguina, y lo someti¨® a una profunda transformaci¨®n. El entonces consejero de Cultura, Jaime Lissavetzky, encarg¨® a su equipo la creaci¨®n de un gran centro cultural, con anfiteatro incluido, adem¨¢s de salas y biblioteca. As¨ª pas¨® de estar en estado de ruina y ser utilizado por miles de ribere?os, tras su inauguraci¨®n en 1992. En la actualidad est¨¢ protegido con la figura de bien de inter¨¦s patrimonial, dentro del cat¨¢logo de bienes del Gobierno regional.

En junio de 2015, el centro tuvo que ser desalojado tras registrarse el incendio de un cuadro el¨¦ctrico que provoc¨® una densa humareda que se extendi¨® a varias alas del edificio.

La llegada de la borrasca Filomena se hizo notar en especial en este edificio. El enorme peso de la nieve acumulada hizo que se viniera abajo parte de la cubierta, con los consiguientes da?os para la estructura. La nieve tambi¨¦n provoc¨® graves afectaciones a los aleros ¡ªparte inferior de una techumbre que sobresale de una fachada y que sirve para evitar que el agua caiga sobre el muro¡ª. Otra zona que acab¨® destrozada fue la cruj¨ªa norte ¡ªel corredor que da acceso a piezas situadas a ambos lados¨D del patio oeste. Parte de los tejados cayeron a la calle, con la suerte de que no pasaba ninguna persona, y otra parte, sobre el propio edificio. La imagen corri¨® por las redes sociales. Desde entonces, permanece cerrado al p¨²blico y se han suspendido todas sus actividades.

El Ayuntamiento de Aranjuez sac¨® unos meses el proyecto de restauraci¨®n por un montante de 1,1 millones de euros y cuya direcci¨®n de obra recay¨® en el arquitecto y restaurador cultural Javier Camuesco. Este profesional es magister en rehabilitaci¨®n de edificios y ha formado parte de la comisi¨®n de patrimonio de Toledo. Especializado en arquitectura hist¨®rica, ha participado en la restauraci¨®n de la muralla de Talavera de la Reina o del castillo de Casarrubios del Monte, entre otras obras.

Los trabajos en el centro cultural consistir¨¢n en cambiar todos los aleros y en acometer mejoras en las cubiertas, de forma que se pueda acceder a ellas y lograr un mantenimiento continuo que evite colapsos como el de hace un a?o. Para ello, se abrir¨¢n entradas y una l¨ªnea de vida -sistema de protecci¨®n para evitar ca¨ªdas al vac¨ªo- para que puedan subir los operarios. Tambi¨¦n se repondr¨¢ la cubierta da?ada y la cruj¨ªa, adem¨¢s de reforzar la estructura de madera de todo el tejado. Los trabajos tambi¨¦n acometer¨¢n las filtraciones de agua que hubo en el auditorio y en los lucernarios de algunas escaleras, seg¨²n explica Javier Camuesco. Por ¨²ltimo, se trabajar¨¢ en las esquinas noreste y sureste, donde se han detectado algunas deformaciones del inmueble.

El arquitecto explica que las obras tienen una duraci¨®n prevista de nueve meses, pero que al tratarse de un edificio hist¨®rico pueden prolongarse. ¡°Si se trata de una obra de nueva planta est¨¢ todo calibrado, pero con un edificio como este puede salir alg¨²n da?o colateral o una patolog¨ªa no detectada que haga que se demore¡±. ¡°Se trata casi de una labor quir¨²rgica en la que pueden surgir cuestiones ocultas y que habr¨¢ que acometer sobre la marcha¡±, a?ade el tambi¨¦n licenciado en Historia.

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