Viaje a la Casa Azul de Frida Kahlo

Revolucionaria, bailarina, comunista, enamorada, musa y pintora. Frida Kahlo ha sido esto y mucho m¨¢s. Mundialmente reconocida como un icono popular de la cultura mexicana, la vida de esta artista ha estado marcada por una serie de tr¨¢gicos incidentes ¡ªel mayor de todos, enamorarse de Diego Rivera¡ª y de encuentros sustanciales con algunas de las m¨¢s importantes personalidades del siglo pasado. ¡°Me enamor¨¦ inmediatamente de Frida, cuando baj¨¦ del barco, vi a una joven mujer que nunca hab¨ªa visto antes, como una diosa azteca, que llevaba el perfume de Schiaparelli¡±. Las palabras de Le¨®n Trotski resuenan en la sala del Teatro Instante en Madrid, donde la experiencia interactiva Vida y Obra de Frida Kahlo permite al espectador sumergirse en lo m¨¢s ¨ªntimo de la pintora mexicana.

A medio camino entre el cine, el espect¨¢culo audiovisual y el museo tradicional, esta exposici¨®n rinde homenaje a Frida Kahlo a trav¨¦s de un centenar de obras pl¨¢sticas, literarias y fotogr¨¢ficas de la pintora y de las personas que la acompa?aron en vida. Para la ocasi¨®n, una antigua cochera de autobuses en Palos de la Frontera, en el distrito de Arganzuela, ha sido reconvertida en un amplio espacio expositivo, que cuenta con m¨¢s de 1.000 metros cuadrados donde se proyectan 2.500 fotogramas animados pintados a mano por diversos artistas. La experiencia, promovida por Acciona Ingenier¨ªa Cultural, se podr¨¢ visitar hasta el 1 de abril de 2022.

La exposici¨®n ofrece una interpretaci¨®n art¨ªstica de la obra y vida de Frida Kahlo, mediante sus m¨²ltiples facetas: como mujer, como pintora y como figura hist¨®rica. El espectadores es libre de moverse alrededor de la sala para poder disfrutar al m¨¢ximo de las im¨¢genes que decoran las paredes y el suelo con algunas de las obras maestras de la pintora, empezando por sus famosos autorretratos, como La venada herida o el cuadro dedicado al Doctor Eloesser.

La obra de Frida y los testimonios de sus contempor¨¢neos ¡ªTrotski, Andr¨¦ Bret¨®n, Marcel Duchamp, Alice Rahon o Pablo Picasso¡ª acogen al p¨²blico en un espacio oscuro, iluminado solo por la luz de un cielo estrellado. En el centro del lugar ¡ªque recrea el patio de la famosa Casa Azul donde naci¨® y creci¨® la pintora: ¡°Nac¨ª en el cuarto de la esquina entre Londres y Allende en Coyoac¨¢n¡±, recita una voz en off¡ª hay un monumental altar de muertos. Las fotograf¨ªas de la familia tomadas por el padre de Frida acompa?an visualmente la narraci¨®n de la infancia y juventud de la pintora, marcada por una salud fr¨¢gil y un accidente que casi le cost¨® la vida.

Sentados en los cubos sembrados por la sala, el espectador acompa?a Frida Kahlo en el tranv¨ªa al que se subi¨® un d¨ªa de septiembre de 1925. En las paredes una paisaje rural se desliza a siempre mayor velocidad, hasta que un retumbo y un rayo de luz invaden la sala, recreando el traum¨¢tico accidente que la hizo renacer como pintora. ¡°No he muerto y, adem¨¢s, tengo algo porque vivir; ese algo es la pintura¡±, dice la voz de Frida.

Este episodio introduce la segunda gran desgracia de su vida, la atormentada y pasional historia de amor con Diego Rivera: ¡°Yo sufr¨ª dos accidentes graves en mi vida: uno en el que un autob¨²s me tumb¨® al suelo, el otro es Diego. Diego fue de lejos el peor¡±. Mientras Frida relata las dificultades de una uni¨®n que su familia nunca aprob¨®, el altar central ense?a las fotos de la ¡°paloma y el elefante¡± en el d¨ªa de su boda, al tiempo que el resto de la sala se llena de las obras de los dos artistas.

Muchos de los elementos y personajes que se pueden apreciar a lo largo de los 45 minutos que dura la exposici¨®n han sido recreados a partir de numerosos bocetos, gracias a una minuciosa investigaci¨®n gr¨¢fica de la pintura de Frida Kahlo. Adem¨¢s, el compositor y pianista Arturo Cardel¨²s, nominado a un premio Goya, ha sido el encargado de crear una banda sonora original ¡ªgrabada con la Budapest Art Orchestra de la mano de su director de orquesta, Peter Pejtsik¡ª para dar m¨²sica a cada escena de la narraci¨®n.

Para despedirse de la artista mexicana, el espectador vuelve a la Casa Azul, el hogar donde Frida Kahlo naci¨®, vivi¨®, pint¨® y muri¨®, punto de partida de este viaje interactivo. El altar central, iluminado de los colores de las velas, desprende una lluvia de cempas¨²chil naranja que llena el patio de la casa de la pintora. En las paredes, vuelven los colores de la bandera mexicana y el azul del cielo, junto al ¨²ltimo mensaje de Frida: ¡°Espero alegre la salida ?y no volver jam¨¢s!¡±.

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