La odisea de los conciertos tras la pandemia: agotar entradas no es sin¨®nimo de rentabilidad econ¨®mica
La viabilidad de las salas madrile?as de peque?o y mediano aforo contin¨²a dependiendo de las ayudas econ¨®micas al sector, a pesar de que se vendan todas las entradas disponibles
Es mi¨¦rcoles por la noche en el centro de Madrid. Del n¨²mero 14 de la calle de Alburquerque sale y entra una cola de gente que hace recordar a los tiempos previos a la pandemia. La sala Clamores est¨¢ a rebosar y se huele un ambiente de concierto en los alrededores para recibir al grupo santanderino La Fuga, quienes anuncian que un nuevo disco est¨¢ a punto de salir del horno. El jueves previo refleja una atm¨®sfera similar en la avenida de Brasil, a escasos metros del estadio ...
Es mi¨¦rcoles por la noche en el centro de Madrid. Del n¨²mero 14 de la calle de Alburquerque sale y entra una cola de gente que hace recordar a los tiempos previos a la pandemia. La sala Clamores est¨¢ a rebosar y se huele un ambiente de concierto en los alrededores para recibir al grupo santanderino La Fuga, quienes anuncian que un nuevo disco est¨¢ a punto de salir del horno. El jueves previo refleja una atm¨®sfera similar en la avenida de Brasil, a escasos metros del estadio Santiago Bernab¨¦u, en donde una banda llamada Gallos promete una buena dosis de rock and roll para todos los presentes en Moby Dick. ¡°Los conciertos en Madrid est¨¢n funcionando. Es verdad que hay un poco de burbuja y que algunos no funcionan del todo, porque hay mucha oferta de cosas atrasadas, pero, en general, lo que funciona se agota a la velocidad del rayo¡±, se?ala Bel¨¦n Chanes, conductora de la sala Ochoymedio.
Desde fuera, puede parecer que el sector ha recuperado la sonrisa y que incluso se ha repuesto del terrible mazazo que supuso el confinamiento. A pesar de que cada fin de semana las salas madrile?as cuelgan el cartel de no hay billetes, el regreso del p¨²blico y el notable ritmo en la venta de entradas debe ir acompa?ado de subvenciones p¨²blicas que posibiliten que el motor cultural vuelva a rugir como en 2019, tal y como relata Hugo Garc¨ªa, coordinador de Comunicaci¨®n de la sala Moby Dick: ¡°Hemos recibido diversas ayudas por parte del INAEM (Ministerio de Cultura), Comunidad de Madrid y Ayuntamiento de Madrid para el sostenimiento de la actividad cultural. Sin embargo, la programaci¨®n de conciertos en salas como la nuestra es una actividad deficitaria. Ya lo era antes de la pandemia y lo seguir¨¢ siendo. La mayor parte de las salas redondean sus ingresos con la actividad de bar, pues de otro modo ser¨ªa insostenible¡±, indica.
Por su parte, Manuel Saucedo, director general del Wizink Center, hace hincapi¨¦ en las dif¨ªciles decisiones que se tomaron durante los meses sin ninguna actividad: ¡°En nuestro caso, el balance de 2021 es negativo, de p¨¦rdidas, a pesar de la celebraci¨®n de peque?os eventos. Adem¨¢s, nos hemos visto en la obligaci¨®n de hacer varios ERTE (Expediente de Regulaci¨®n Temporal de Empleo), puesto que mantener un recinto sin actividad es tremendo. Hemos sufrido mucho¡±, destaca.
Por esta raz¨®n, el ?rea de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento de Madrid prepara un nuevo plan, cuyo objeto responde, como detalla el documento de novedades, ¡°al fomento y a la dinamizaci¨®n del sector, as¨ª como al uso de las nuevas tecnolog¨ªas en la creaci¨®n y difusi¨®n de contenidos y servicios culturales e incrementar la profesionalizaci¨®n de las industrias culturales y su capacidad para generar empleo¡±. Si bien su puesta en marcha a¨²n no es oficial, Garc¨ªa ratifica la aprobaci¨®n de las mismas, al haber recibido el visto bueno por parte de La Noche en Vivo, la Asociaci¨®n de salas de espect¨¢culos de la Comunidad de Madrid.
Al mencionado proyecto se le une el Plan Aplaude, aprobado en mayo de 2020 y dotado con 7,5 millones de euros. Su objetivo m¨¢s inmediato resid¨ªa en reflotar el sector cultural en su totalidad, seg¨²n la nota de prensa facilitada por el Ayuntamiento. Si se observan los datos del Anuario de Promotores Musicales (APM) del ejercicio 2020, la m¨²sica en directo factur¨® algo m¨¢s de 138 millones de euros durante 2020, es decir, pr¨¢cticamente un 64% menos que en 2019. El nuevo a?o arranc¨® como nunca: enero y febrero significaron un r¨¦cord de facturaci¨®n, mientras que en marzo se lograron los mismos n¨²meros que el mismo mes del ejercicio anterior, con tan solo dos semanas de actividad.
La presentaci¨®n el pasado d¨ªa 19 del nuevo Anuario, correspondiente al ejercicio de 2021, muestra una cierta recuperaci¨®n, aunque la facturaci¨®n total de 157,5 millones de euros a¨²n dista mucho de alcanzar las cotas de 2019, a?o en el que se consigui¨® una cifra de casi 400 millones. ¡°Son luces a las que ha costado llegar tras dos a?os muy oscuros, que no han sido precisamente buenos, con unos datos demoledores en 2020¡å, record¨® el presidente de APM, Albert Salmer¨®n, durante el acto de presentaci¨®n del nuevo informe.
El confinamiento propici¨® un cambio de tendencia nunca vista: el m¨²sico se atrevi¨® a ofrecer conciertos desde su casa. En este sentido, Saucedo sostiene que no se ha producido una gran complacencia por parte del consumidor: ¡°Si hacemos un balance general, no ha habido demasiada satisfacci¨®n en la oferta de streaming. En cambio, se est¨¢ haciendo un gran esfuerzo por ofrecer una experiencia que vaya m¨¢s all¨¢, ofrecer algo diferente, como pudo ser el caso del concierto de C. Tangana¡±.
Realidades paralelas
La Comunidad de Madrid puede presumir de contar con un n¨²mero extenso en relaci¨®n con las salas de conciertos, con una oferta para todos los gustos. Algo similar ocurre con los festivales, los cuales han permitido que artistas de talla mundial, como Green Day, The Cure o Red Hot Chili Peppers hayan pisado suelo espa?ol en los ¨²ltimos a?os para deleite de sus fans m¨¢s ac¨¦rrimos. A pesar de ello, la realidad de los festivales no es la que disfrutan los establecimientos musicales de peque?o y mediano aforo, seg¨²n manifiesta Chanes, quien destaca la ca¨ªda de protagonismo de los mencionados locales: ¡°Dentro de la cultura y ocio hay muchos subsectores. En general dir¨ªa que s¨ª, que las salas que han sufrido cierres prolongados durante la pandemia est¨¢n en peor situaci¨®n ahora¡±, subraya.
Una opini¨®n que es compartida por Saucedo, quien alega que las entradas se est¨¢n agotando ¡°solamente en los grandes conciertos de artistas internacionales, no en los de las salas peque?as¡±, adem¨¢s de indicar que las ayudas que prestar¨¢ el Ayuntamiento ¡°van a ayudar mucho al sector¡±. Para Garc¨ªa, la ¨²nica forma de mantener el tejido de salas de m¨²sica de Madrid reside en ¡°mantener las ayudas actuales¡±, ya que de ello depende ¡°su viabilidad y la dinamizaci¨®n de la vida cultural de la ciudad¡±.
Las salas vuelven a estar llenas noche tras noche. Y se avecina un lleno absoluto en los festivales que inundar¨¢n Madrid durante los meses de verano, como el Mad Cool, Tomavistas o Las Noches del Bot¨¢nico. ¡°Creo que de esta salimos reforzados, mejor equipados desde el punto de vista t¨¦cnico y convencidos de lo necesario que es nuestra actividad¡±, asegura Garc¨ªa. 2022 es sin¨®nimo de una nueva ¨¦poca en el sector musical. Y todo indica que, recibidas las ayudas necesarias, esta vez no habr¨¢ m¨¢s piedras en el camino con las que poder tropezar.
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