El tablao flamenco m¨¢s antiguo de Madrid busca un nuevo nombre por 6.000 euros

El tablao flamenco m¨¢s antiguo de la capital, el Villa Rosa, se queda sin nombre. Los m¨¢s ingeniosos han querido quitarle hierro al asunto. ¡°Villa Robo¡± es una de las 180 propuestas que han llegado en las primeras seis horas de la apertura del concurso p¨²blico para bautizar de nuevo a la m¨ªtica sala, situada en la plaza Santa Ana. Y cuyo ganador se embolsar¨¢ 6.000 euros. El r¨®tulo de la fachada, que conserva los azulejos que recrean ciudades andaluzas pintados por el sevillano Alfonso Romero Mesa en 1928, podr¨ªa desaparecer. El anterior inquilino cerr¨® las puertas del local por la crisis derivada de la pandemia. Pero, antes de abandonarlo, registr¨® la marca que da fama a la sala de espect¨¢culos. La siguiente en tomar las riendas del negocio fue Ivana Portol¨¦s (56 a?os, Zaragoza), que no sale de su asombro: ¡°Entend¨ª que hab¨ªa sido una rabieta y que luego se le iba a pasar¡±.

La noticia lleg¨® como un jarro de agua fr¨ªa. La marca, conservada desde que la taberna abri¨® en 1911, estaba registrada por el anterior gestor, algo que nadie hab¨ªa hecho en sus m¨¢s de 100 a?os de existencia. El 19 de abril llegaba al Villa Rosa un burofax firmado por un despacho de abogados que ella desconoc¨ªa. Portol¨¦s revisa su m¨®vil, donde guarda el documento: ¡°Su cliente tiene registrada la marca en las clases 41 y 43 [servicios de entretenimiento y restauraci¨®n, seg¨²n la clasificaci¨®n internacional de productos y servicios que se aplica al registro de marcas] del local Villa Rosa¡±. No le dio importancia hasta que el 13 de mayo lleg¨® un segundo burofax a su nombre: ¡°Yo pens¨¦ que podr¨ªamos solucionarlo en una conversaci¨®n¡±.

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Portol¨¦s recrea la charla con Jes¨²s Rodr¨ªguez Cerezal, quien estaba al frente desde 2011, y ech¨® el cierre definitivo el a?o pasado por la crisis pand¨¦mica. ¡°Me pidi¨® una barbaridad¡±, cuenta la nueva gerente, que se niega a revelar la cantidad por recomendaci¨®n de sus abogados. Aunque indica que supera con creces el premio del concurso. No hubo acuerdo y ambas partes desistieron.

Despu¨¦s de un a?o con las puertas selladas, la zaragozana firm¨® en marzo el contrato con los propietarios ¡ª¡°hijos de un hombre octogenario, amante del flamenco, que lo adquiri¨® en 1949¡å¡ª para gestionar el local por el que paga 360.000 euros al a?o de alquiler.

Para la empresaria, afincada en Madrid desde hace dos d¨¦cadas, no es la primera vez. A 200 metros del Villa Rosa, Portol¨¦s regenta desde hace 28 a?os otro de los tablaos de la capital, la sala Cardamomo. Aunque es m¨¢s peque?a que la consagrada como catedral del flamenco, que cuenta con sitio para 140 personas, y ofrece espect¨¢culos m¨¢s ¨ªntimos con casi la mitad del aforo.

No es balad¨ª que al ver el cartel de ¡°se alquila¡±, colgado en el portal del edificio, rondara por su cabeza el deseo de adquirir el bien para volver a darle vida. A pesar de dos a?os de crisis en los locales dependientes del turismo, Portol¨¦s segu¨ªa con la ilusi¨®n de reflotar el arte de la m¨²sica: ¡°Antes de la pandemia, ten¨ªamos m¨¢s demanda que oferta y est¨¢bamos buscando una sala¡±. No tard¨® en decidirse y firm¨® el contrato un d¨ªa despu¨¦s de visitar el emblem¨¢tico establecimiento de estilo ar¨¢bigo andaluz. Se puso manos a la obra para acondicionar el local para la inauguraci¨®n, pint¨® las paredes del vest¨ªbulo de negro y reform¨® el escenario. ¡°El primer a?o siempre es un a?o dif¨ªcil... Vamos a tirar un mont¨®n de dinero con este cambio de marca¡±, lamenta la nueva gerente.

Como los dem¨¢s tablaos flamencos de la capital, el recinto fue declarado Bien de Inter¨¦s Cultural por el Ayuntamiento de Madrid en julio de 2020. La historia del lugar, concurrido por la aristocracia por sus fiestas privadas, se remonta al reinado de Alfonso XIII, del que se dice que acud¨ªa por un pasadizo subterr¨¢neo que conectaba con palacio. Tras el fichaje del guitarrista Antonio Chac¨®n en el siglo pasado, artistas de renombre, como Imperio Argentina, Lola Flores y Juanito Valderrama, han pisado su escenario. Un espacio lleno de simbolismo donde se grab¨® la pel¨ªcula Tacones Lejanos (1991), de Pedro Almod¨®var.

Lo ¨²ltimo que se esperaba la nueva gerente era que el nombre que salvaguarda las memorias del lugar iba a desaparecer. Tiene muchas ideas para su nuevo negocio, como crear c¨®digos QR con informaci¨®n de los artistas, de los palos en directo o de las letras de las canciones, pero a¨²n queda un asunto por resolver. ¡°Se busca nombre¡±, as¨ª se llama el concurso en el que puede participar cualquiera hasta el 15 de agosto para darle un nuevo apodo. Aunque, en modo de confesi¨®n, Portol¨¦s admite: ¡°Yo creo que todo el mundo lo va a seguir llamando Villa Rosa¡±.

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