La factura millonaria de la l¨ªnea de Metro de Madrid que hunde casas en San Fernando: m¨¢s de 50 millones de euros en obras, realojos y autobuses
La Comunidad prepara las indemnizaciones a los vecinos que han perdido sus viviendas por un trayecto defectuoso y que el PSOE estima en 100 millones
El d¨ªa de mayo de 2007 en el que se inaugur¨® la l¨ªnea 7B del metro, una se?ora mayor se col¨® en el recorrido oficial del s¨¦quito de la entonces presidenta, Esperanza Aguirre, y descubri¨® en la ¨²ltima parada que el suburbano todav¨ªa tardar¨ªa unas horas en dar servicio a los ciudadanos. Hubo que devolverla a su punto de origen en un coche oficial. Ese primer fallo en la inauguraci¨®n de la infraestructura fue premonitorio. Desde entonces, la l¨ªnea 7B ha estado cerrada por obras m¨¢s de 915 d¨ªas (casi tres de los 15 a?os que lleva abierta); ha provocado el derribo de 27 viviendas y el desalojo de 85; y ha obligado a gastar m¨¢s de 50 millones en rehabilitar edificios, en realojar a m¨¢s de 120 personas y en financiar intervenciones para reconducir la situaci¨®n, seg¨²n la informaci¨®n obtenida por EL PA?S en aplicaci¨®n de la ley de transparencia. El agujero econ¨®mico, sin embargo, es mayor. Mucho mayor. Falta calcular el montante de las indemnizaciones patrimoniales a los afectados, que el PSOE ha estimado en unos 100 millones de euros, y lo invertido por Metro de Madrid, que dice carecer de informaci¨®n sobre los costes de los contratos m¨¢s antiguos, o se remite al promotor.
¡°El dinero se ha ido b¨¢sicamente en trabajos en el subsuelo, y en la estaci¨®n del Hospital del Henares, que no est¨¢ en buenas condiciones, pero no se ha dedicado la cantidad necesaria para atender dignamente a las familias¡±, lamenta Javier Corpa, el alcalde socialista de San Fernando de Henares, un municipio al sudeste de la regi¨®n, que cuenta con unos 40.000 habitantes. ¡°Hay una parte social en este problema en el que la Comunidad de Madrid deber¨ªa hacer un mayor esfuerzo¡±, reclama sobre el drama que viven sus vecinos, v¨ªctimas de que las obras del metro provocaran la entrada del agua en el subsuelo, diluyendo estratos de sal, y hundiendo el t¨²nel del suburbano y los edificios de la superficie. Y recuerda: ¡°Los trabajos de consolidaci¨®n del terreno se han hecho durante 15 a?os, y no han servido para nada. Hay vecinos que han tenido que irse de sus casas tres o cuatro veces¡±.
Desde septiembre 2021, la Comunidad ha destinado poco m¨¢s de 1,4 millones de euros para los realojos de los m¨¢s de 120 vecinos que han tenido que dejar sus hogares, a los que ha pagado las mudanzas, el alquiler de los pisos en los que se han instalado, la manutenci¨®n y los traslados. Una treintena de ellos ya no tienen esa ventaja, porque se ha acabado el contrato de emergencia que lo amparaba, aunque pronto deber¨ªan recibir como compensaci¨®n 798 euros al mes durante seis meses (4.788 euros en total). Si a esas cifras se le suma lo pagado en estudios del problema y rehabilitaci¨®n de los edificios, la cantidad supera los 10 millones. Lo ¨²nico seguro es que el grueso de los 50 millones invertidos por la Comunidad en el problema del metro de San Fernando se ha invertido en intentar arreglar la l¨ªnea 7B.
2009. Han pasado solo dos a?os de la inauguraci¨®n de la l¨ªnea, celebrada con conciertos y paellas multitudinarias, y ya hay que intervenir. La Comunidad de Madrid abona 3.167.064,59 euros a Dragados para que realice obras de emergencia. Est¨¢ claro que algo pasa con el agua. Y que no es f¨¢cil solucionarlo. En 2011, con Aguirre todav¨ªa en el poder, y el recuerdo de la inauguraci¨®n de 2007 bien fresco, hay que gastar de nuevo otra millonada: 3.394.783,21 de euros para intentar impermeabilizar el t¨²nel entre las estaciones de Coslada y Hospital Central. Solo siete a?os despu¨¦s, en 2018, hay que volver a intentar parar la entrada del agua, esta vez por 2.230.473,82 de euros. Pero el paso del tiempo act¨²a como un juez inflexible: este verano, los expertos detectaron que las v¨ªas de ese tramo se han hundido entre 1,5 y 2 cent¨ªmetros solo entre junio y agosto de 2022, y que el tubo que las acoge lo ha hecho 2,5 cent¨ªmetros.
¡°La karstificaci¨®n en esta zona no fue detectada con los reconocimientos del proyecto, probablemente porque no exist¨ªa¡±, se lee en un informe oficial sobre los cambios en el terreno, producto de la disoluci¨®n de la sal que entrevera el subsuelo al entrar en contacto con el agua. ¡°Sin embargo, la construcci¨®n del t¨²nel y posterior drenaje comenz¨® a movilizar el flujo de agua subterr¨¢nea y a iniciar un progresivo proceso de disoluci¨®n del terreno, en concreto y preferentemente, de los niveles salinos existentes¡±, a?ade. ¡°(¡) En este tipo de terreno, movimiento de agua significa capacidad de disoluci¨®n¡±, subraya, en alusi¨®n a los cambios del terreno que afectan al asentamiento de los cimientos de los edificios.
Por eso la Comunidad de Madrid aprob¨® en el Consejo de Gobierno del pasado mi¨¦rcoles el mayor gasto hasta la fecha: 10 millones de euros en inyectar cemento e intentar consolidar un m¨¢ximo de 10.000 metros cuadrados en el municipio, donde hay m¨¢s de 400 edificios afectados y cientos de personas han sido desalojadas de sus casas por los desperfectos.
¡°Nosotros nos ocupamos de monitorizar los edificios, arreglar la zona, inyectar materiales para consolidar la superficie, tramitar las indemnizaciones y pagar todos los alojamientos¡±, defendi¨® el jueves el consejero de Transportes, David P¨¦rez, durante el pleno de la Asamblea.
Son casi 15 a?os de obras. Nueve cierres de la l¨ªnea 7B del metro, que desde agosto permanece as¨ª, sin que circule ni un tren. Millones gastados en pagar autobuses para el transporte de las decenas de miles de vecinos que se quedan peri¨®dicamente sin poder usar el suburbano. M¨¢s de 400 edificios afectados, seg¨²n el balance del Ayuntamiento. 27 viviendas derribadas. 85 desalojadas. Y 72 familias, compuestas por m¨¢s de 120 personas, que tienen llaves para una puerta que ya no pueden abrir por culpa del metro.
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