En blanco y negro y beis: la revisi¨®n de Italia de Dolce&Gabanna por Kim Kardashian
La marca italiana presenta en la semana de la moda de Mil¨¢n una reinterpretaci¨®n de 20 a?os de su historia de la mano de la empresaria y ¡®celebrity¡¯. Donatella Versace tambi¨¦n revisit¨® otro tiempo, pero acudi¨® a la fuente primigenia: Paris Hilton
Llueve en Mil¨¢n y todo el mundo habla del tr¨¢fico. El domingo parece que no llover¨¢, pero hay elecciones en Italia. M¨¢s tr¨¢fico. A menudo se acusa a la moda de vivir de espaldas a la realidad y esta semana est¨¢ volviendo a pasar. Ma?ana se vota en Italia y, si nada cambia, la ultraderecha puede volver al gobierno del pa¨ªs. El mutismo de gran parte de los dise?adores se puede leer como indiferencia, pero tambi¨¦n como respuesta. La moda es un lenguaje y no es necesario ser expl¨ªcitamente pol¨ªtico para ser contestatario.
Cuando Domenico Dolce y Stephano Gabbana vistieron en mayo a Kourtney Kardashian y sus hermanas para su boda viral en Portofino (Sicilia), a¨²n no se intu¨ªa la convulsi¨®n pol¨ªtica. Era imposible que supieran entonces, cuando vieron la ¡°enorme repercusi¨®n que tuvo la colaboraci¨®n¡±, como han explicado en rueda de prensa antes del desfile de este s¨¢bado, que hoy nos encontrar¨ªamos en la v¨ªspera de unas elecciones que pueden cambiar el devenir de su pa¨ªs y de Europa al completo.
Lo que han presentado en la semana de la moda de Mil¨¢n es precisamente una transmutaci¨®n de su Italia. Una revisi¨®n de 20 a?os de historia que se fragu¨® en la boda y comenz¨® con el env¨ªo del archivo de la marca desde el a?o 1987 al 2007 a la casa de Los ?ngeles de Kim Kardashian. ¡°No es una colaboraci¨®n, ella ha sido m¨¢s una curadora. Solo hemos cambiado un 20% de las piezas, el resto se quedaron igual, aunque en blanco, negro, beis, gris y algo de granate¡±, dijo Dolce entre risas, aludiendo a la preferencia casi obsesiva de la empresaria, celebrity, empresaria y estrella de la telerrealidad por los tonos neutros. Tampoco hab¨ªa estampados, aunque Gabbana logr¨® que Kim dise?ara por vez primera con un print animal, como ella misma confes¨®.
El desfile arranc¨® con el intermezzo de Caballer¨ªa Rusticana interrumpido por el sonido de la llegada de un coche, flashes, luces, alguien que sube entre gritos de fans y ordena: ¡°A Dolce & Gabbana¡±. Cualquier d¨ªa en la vida de Kim. Su pasi¨®n por la ense?a siciliana viene de ni?a, ¡°cuando ve¨ªa a mi madre ponerse sus vestidos para ir a sus citas con mi padrastro. Despu¨¦s trabajaba en una tienda de ropa que vend¨ªa Dolce&Gabbana y me gastaba el sueldo en su ropa¡±, dijo. De hecho, ella y sus hermanas tuvieron dos perros cuando eran adolescentes que se llamaban como el d¨²o italiano. Ellos fueron los que realizaron su vestido de novia para su primera y muy pol¨¦mica portada en el Vogue estadounidense en 2014, y ahora ella ha kimizado la marca con absoluto acierto. Todo estaba ah¨ª, pasado por su visi¨®n. El imaginario cat¨®lico en velos, capas, encaje y crucifijos, pero sin la exuberancia latina habitual; la lencer¨ªa y el boudoir en su versi¨®n minimalista en negro riguroso; brillos siempre en plata y el print animal (solo leopardo) utilizado como un neutro en total look.
Para ayudar a comprender la colecci¨®n, los looks llevaban cosida por fuera una etiqueta con la fecha del original. Mientras tanto, al fondo se proyectaba un corto en el que aparec¨ªa ella comiendo en una trattoria un plato de espaguetis, pan con mantequilla, vino, pastel. En el momento en el que se est¨¢ poniendo el acento en la nueva figura de Kim, much¨ªsimo m¨¢s delgada, ella come gozosa. ¡°Me gustar¨ªa que en la moda se me recordara que dise?o para todos los cuerpos, mi trabajo por la diversidad de cuerpos¡±, dijo antes del desfile. Lo cierto es que con este revival de los a?os 2000 y sus cuerpos escu¨¢lidos parece que los dise?adores est¨¢n olvidando, al menos esta semana as¨ª lo demuestra, su compromiso por mostrar cuerpos de todas las tallas. No fue as¨ª en Dolce& Gabanna, que s¨ª mostr¨® diversidad de tallas.
Kim Kardashian, que cont¨® que es ella misma una coleccionista de prendas vintage de grandes marcas, asegur¨® que una de las motivaciones de esta alianza era la reivindicaci¨®n del original. ¡°Veo la ropa de archivo y es como vestimos ahora. Los dise?adores ven a todo el mundo emulando lo que hac¨ªas t¨² y pens¨¦, vamos a reimaginarlo¡±.
Donatella Versace utiliz¨® ese mismo argumento, revisitar otro tiempo, pero acudi¨® a la fuente primigenia, Paris Hilton. No hay que olvidar, o al menos ella no quiere que olvidemos, que la reina indiscutible de los 2000 era Paris con vestidos muy rosas, muy cortos, muy brillantes y que de Paris viene Kim Kardashian, como una sublimaci¨®n beis de la estrella millonaria. Vestida de novia, y ejerciendo el barbiecore que ella misma cre¨®, cerr¨® un desfile perfecto. Un viaje a los primeros a?os 2000 con una propuesta g¨®tica. Entrevista con el vampiro se encuentra con Prodigy.
Plataformas ancladas en la cultura rave, minifaldas muy mini de piel negra, la ubicua cazadora perfecto versionada o los tiros baj¨ªsimos de los pantalones transportaban a principios de siglo. La salida de siete novias, cada una en un color, recordaba inmediatamente a 1994 y la m¨ªtica campa?a de las supermodelos vestidas con minifalda metalizada y jersey de punto de distinto color fotografiada por Richard Avedon. No es casualidad: el pasado d¨ªa 20 de septiembre se inauguraba en el Palazzo Reale de Mil¨¢n Relationships, una retrospectiva del fot¨®grafo patrocinada por Versace.
El debut de Maximilian Davis en Ferragamo llen¨® de modernidad la propuesta de la compa?¨ªa florentina casi centenaria. El brit¨¢nico de origen caribe?o utilizo c¨®digos de la casa a su antojo, los liber¨® de gravedad, los trajo al siglo XXI sin romper los lazos, pero sin miradas nost¨¢lgicas, cosa que se agradece, aunque solo sea por cambiar. Tras m¨¢s de seis a?os con Paul Andrew, Ferragamo lo sustituy¨® por Davis el pasado marzo. Una apuesta sorprendente, porque el dise?ador solo tiene 26 a?os, pero que recibi¨® buena acogida por parte de la industria. Hasta ahora, Davis solo hab¨ªa desfilado bajo el paraguas de Fashion East, la plataforma brit¨¢nica que funciona como incubadora de talento. Sin embargo, sus tres colecciones, basadas en una idea renovada de la sastrer¨ªa, hab¨ªan recibido la aclamaci¨®n de la prensa especializada. La apuesta por Davis ven¨ªa del nuevo consejero delegado de la ense?a, Marco Gobetti, que dejaba Burberry este mismo a?o y que cuenta en su curr¨ªculum con logros como haber fichado a Phoebe Philo en C¨¦line o Riccardo Tisci en Givenchy. Hace escasamente una semana, Ferragamo cambiaba su logo para significar esta nueva etapa. Ahora forma parte de esa larga lista de firmas del lujo que utilizan una tipograf¨ªa sans serif.
En el claustro del seminario arzobispal de Mil¨¢n, construido en el siglo XII, envuelto en el nuevo color rojo oficial, se pudieron ver gui?os al Hollywood cl¨¢sico con detalles casi fetichistas: vinilo, micro shorts y tejidos que ce?¨ªan la silueta; sastrer¨ªa contempor¨¢nea de factura cl¨¢sica, prendas cotidianas sacadas de su contexto como tank tops o parcas y, adem¨¢s, tejidos delicados que flotaban alrededor del cuerpo en colores c¨¢lidos inspirados en la serie Atardeceres de la artista estadounidense Rachel Harrison o con estampado animal, pero de un animal al completo dibujado sobre seda. El logo de la casa convertido en tac¨®n o la reedici¨®n del bolso Wanda, creado por el propio Ferragamo en 1988 con el nombre de su mujer, fueron algunos de los gui?os a la continuidad de un legado. La arena, roja tambi¨¦n, apelaba a ¡°lo que el mar significa en la cultura caribe?a, un lugar donde puedes ir a reflejarte y sentirte en comuni¨®n. Quer¨ªa mostrar esa perspectiva, pero desde las lentes de Ferragamo¡±, explicaba Davis en nota de prensa.
En un momento en el que Europa agoniza dejar a una reina midas americana o a un joven brit¨¢nico con ra¨ªces caribe?as v¨ªa libre para interpretar una parte esencial de la historia de Italia a trav¨¦s de sus ense?as parece ser justo lo que se necesita.
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