El placer de descubrir las cepas en el origen
El sector conf¨ªa en recuperar este a?o el crecimiento del n¨²mero de visitas a las bodegas que ven¨ªa experimentando hasta la pandemia
El 18 de junio, seis de las siete bodegas centenarias que forman el Barrio de la Estaci¨®n de Haro, en La Rioja ¡ªCune, G¨®mez Cruzado, La Rioja Alta SA, Bodegas Bilba¨ªnas (Vi?a Pomal), Muga y Bodegas Roda¡ª, organizan, por cuarto a?o, una cata en la que presentan sus vinos m¨¢s representativos y los acompa?an de platos elaborados por chefs de toda Espa?a, muchos de ellos con estrella Michelin. Solo la ¨²ltima edici¨®n, en 2018, congreg¨® a m¨¢s de 3.500 visitantes, que durmieron, comieron y consumieron en la zona. Pero, m¨¢s all¨¢ de esta cita se?alada, hay actividad los 365 d¨ªas del a?o, como destaca Mar¨ªa Urrutia, directora de marketing y consejera de Cune, y presidenta de la Asociaci¨®n del Barrio de la Estaci¨®n. Recorridos por bodegas y vi?edos, degustaciones y hasta un paseo en globo para conocer el territorio a vista de p¨¢jaro. Una oferta rural, sin masificar, no circunscrita a la temporada alta y generadora de riqueza para el entorno.
Enoturismo, ¡°turismo por zonas de cultivo y producci¨®n de vino, con visitas a los vi?edos y bodegas y degustaci¨®n de sus caldos¡±, seg¨²n definici¨®n del Diccionario de la Real Academia Espa?ola, es una actividad a la que se le puso nombre en Espa?a hace 27 a?os, cuando se cre¨® primero Acevin (Asociaci¨®n Espa?ola de Ciudades del Vino) y m¨¢s adelante (en 2001) su club de producto Rutas del Vino de Espa?a, con el objetivo de revitalizar y generar empleo en un mundo rural que se desangraba de poblaci¨®n. Empezaron 4 municipios y ya son m¨¢s de 750 y 2.200 empresas, de las cuales casi 700 son bodegas, seg¨²n datos del ¨²ltimo estudio del Observatorio Tur¨ªstico de las Rutas del Vino de Espa?a de Acevin.
El enoturismo ven¨ªa creciendo entre un 8% y un 12% anual antes del coronavirus. En 2019, las Rutas del Vino de Espa?a superaban los tres millones de visitantes y generaban un impacto econ¨®mico de m¨¢s de 85 millones de euros solo en visitas a bodegas y a museos, seg¨²n el estudio. Hasta que en 2020 estall¨® la pandemia, que provoc¨® un descenso del 73,5% en las visitas. ¡°Nos ha dejado tocados, sin duda, pero menos que a otros sectores m¨¢s masificados¡±, matiza Rosa Melchor, alcaldesa de Alc¨¢zar de San Juan (Ciudad Real) y actual presidenta de Acevin. ¡°El reto ahora consiste en recuperar el ¨ªndice de crecimiento previo a la crisis sanitaria. Si nada lo malogra, en 2022 podremos llegar a los n¨²meros que habr¨ªamos alcanzado en 2020 si no hubiera pasado nada¡±, calcula.
Auge de rutas
¡°Nos hemos dado cuenta de que reunimos determinadas condiciones que la gente valora incluso m¨¢s que antes, lo que ha generado tranquilidad y confianza y nos ha permitido seguir teniendo actividad cuando la normativa sanitaria lo ha ido autorizando¡±, reflexiona Melchor. Incluso durante lo m¨¢s duro de los cierres perimetrales, era f¨¢cil que alguna de las rutas pillara lo suficientemente pr¨®xima al visitante como para poder acercarse. ¡°Es un turismo sencillo y tranquilo, sin aglomeraciones, y para todos los p¨²blicos, gracias al cual se visitan localidades peque?as, con encanto y patrimonio¡±, enumera. Sin hoteles de 500 habitaciones ni grandes aglomeraciones. Y muy poco elitista, seg¨²n enfatiza: ¡°No tienes que ser ning¨²n experto ni entender¡ ?Para eso est¨¢ el en¨®logo¡±.
Existen 35 Rutas del Vino de Espa?a, con la incorporaci¨®n de la del Txakoli en abril, y se esperan otras tres m¨¢s ¡ªla de Ucl¨¦s en Cuenca, la de M¨¦ntrida en Toledo y la de Almansa en Albacete¡ª entre 2022 y principios de 2023. ¡°De cada una depende directamente buena parte de la econom¨ªa de los municipios que la integran, sobre todo si son medianos o peque?os; mucha gente joven vive de ella y no tiene que emigrar¡±, expone Melchor.
¡°Ahora preguntas por la Ruta del Vino de Zamora y nos conocen; hace un a?o habr¨ªa sido impensable¡±, tercia su gerente, Eva Gamazo. La pen¨²ltima incorporaci¨®n (en septiembre de 2021) a la iniciativa de Acevin es un territorio poco tur¨ªstico, parte de la Espa?a vaciada (que Gamazo prefiere llamar ¡°Espa?a artesana)¡±. La ruta lo ha puesto en el mapa. Cuando se le pregunta qu¨¦ ver y hacer en ella, Gamazo engarza en su respuesta viticultura ¡ªvi?edos de cepa vieja; variedades de tempranillo, garnacha, malvas¨ªa o moscatel; peque?as bodegas artesanas¡ª con rom¨¢nico, V¨ªa de la Plata, queso y reposter¨ªa. ¡°Un pack completo de patrimonio cultural y gastron¨®mico¡±, resume.
Enoturismo es un concepto paraguas que utiliza un producto prestigioso y con raigambre como el vino para poner en valor todo un territorio. Empezando por su gastronom¨ªa, quiz¨¢s la asociaci¨®n m¨¢s inmediata; de hecho, hacer turismo de vino casi siempre implica llevar un plato con algo en la otra mano; un algo tradicional y de proximidad, salido de los fogones locales, apunta Melchor, cuya elaboraci¨®n tambi¨¦n se puede conocer dentro de la misma experiencia: c¨®mo se hace un queso, c¨®mo funciona un obrador. ¡°El vino de la tierra va perfectamente con la gastronom¨ªa de una zona¡±, precisa.
Comida incluida
Tanto que la Junta de Castilla y Le¨®n, la comunidad aut¨®noma con m¨¢s denominaciones de origen de vinos de Espa?a (16; m¨¢s una indicaci¨®n geogr¨¢fica protegida, IGP, Vino de la Tierra de Castilla y Le¨®n; m¨¢s nueve rutas del vino certificadas por Acevin), habla de enogastronom¨ªa, la se?ala como eje vertebrador de su territorio y como ¡°estrategia necesaria para lograr una mejor comercializaci¨®n e internacionalizaci¨®n de nuestro turismo¡±; e insiste en que ¡°es un elemento de atracci¨®n hacia puntos concretos del interior rural¡±.
Esto lo han entendido muy bien en Bodegas Mart¨ªn C¨®dax, que naci¨® en 1986 en el coraz¨®n de valle del Saln¨¦s (R¨ªas Baixas, Galicia) como proyecto colaborativo para explotar el potencial de la uva albari?o, y desde el principio incorpor¨® la pata tur¨ªstica ¡°para acercar el vino al cliente y poner en valor el entorno atl¨¢ntico en el que nos encontramos¡±, seg¨²n describe Jorge Pallar¨¦s, director de marketing del grupo. Con propuestas como Aprende a mariscar (donde se puede experimentar el oficio de las mariscadoras), Los tesoros de la r¨ªa (para conocer una conservera artesanal desde dentro) o El mar en libertad (paseo por la r¨ªa de Arousa en una barca tradicional). ¡°Hac¨ªamos enoturismo antes de que se llamara enoturismo¡±, apostilla Pallar¨¦s, que destaca dentro de la programaci¨®n el ¡°momento m¨¢gico¡± de Os Xoves de C¨®dax: sus conciertos de verano, asomados a la r¨ªa, coincidiendo con la puesta de sol.
¡°Ayudamos a desestacionalizar la zona, que tradicionalmente ha sido destino estival¡±, comenta Pallar¨¦s. El enoturismo no es como la oferta de playa, que pasa de 0 a 100 en julio y agosto y de nuevo a 0 cuando entra el oto?o, sino que mantiene una afluencia constante, sin acelerones ni frenazos. La vendimia es su momento estrella, cierto, pero los vi?edos est¨¢n preciosos en verano, y en cualquier momento del a?o se puede disfrutar de una cata en la bodega.
El vino marida bien con un recorrido, a pie o en bici, por el entorno natural en el que se produce, y con la propia arquitectura de las bodegas, tradicional en algunos casos, vanguardista y de firma en otros. En el Se?or¨ªo de Otazu, conjunto medieval a unos 13 kil¨®metros del centro de Pamplona, la iglesia rom¨¢nica del siglo XII, una torre palomar del XIV y el palacio del XVI dialogan con una monumental colecci¨®n de obras de arte, algunas creadas espec¨ªficamente para estos espacios; con la bodega antigua, convertida en museo hist¨®rico y espacio dedicado al arte contempor¨¢neo de la Fundaci¨®n Otazu (galardonada con el Premio ¡°A¡± al Coleccionismo 2020 que otorga la Fundaci¨®n Arco), y con las nuevas instalaciones y su sala de barricas subterr¨¢nea dise?ada por Jaime Gaztelu, ¡°conocida como la Catedral del Vino, un referente arquitect¨®nico mundial¡±, informan desde prensa.
Dice Guillermo Penso, director general de Bodega Otazu, que en su caso el enoturismo no ha sido un a?adido, sino ¡°una parte integral del proyecto¡±, clave sobre todo en funci¨®n del ¡°segundo impulso¡± vivido a partir de 2013. ¡°En un entorno tan singular, esa parte experiencial es irremplazable¡±, lo justifica. De las 800 visitas anuales del inicio ha pasado a 11.000, entrando en el top 5 de TripAdvisor de cosas que hacer en Pamplona. Aunque, en su opini¨®n, lo m¨¢s llamativo no ha sido tanto el aumento de la demanda como el perfil del demandante: gente que ha convertido la bodega en un destino cultural y est¨¢ dispuesta a pagar por tours privados y experiencias personalizadas. Acoge unas 40 bodas al a?o y eventos internacionales como el de Jaguar, que durante 30 d¨ªas organiz¨® un encuentro con periodistas y dej¨® 50 millones de euros en la zona. ¡°Tiene un enorme efecto tractor¡±, subraya.
Atracci¨®n for¨¢nea
El modelo de negocio de ArtCava naci¨® igualmente con un enfoque tur¨ªstico. ¡°Se empieza con la bodega, se ampl¨ªa con gastronom¨ªa y se acaba explotando con el alojamiento; es la evoluci¨®n natural, el abec¨¦ del enoturismo¡±, detalla ?ric Enguita, consejero delegado y en¨®logo principal de esta bodega de cava artesanal inaugurada en 2004 en el Pened¨¨s, la regi¨®n vitivin¨ªcola m¨¢s grande de Barcelona. Los primeros a?os atrajo a unas 500 personas. ¡°La crisis de 2008 nos hizo reflexionar sobre nuestro modelo, que se alimentaba mucho del turismo local; otros pa¨ªses no estaban tan mal como Espa?a¡±, recuerda. ¡°Pensamos que con solo tener un 0,01% de la gente que viaja a Barcelona [12 millones en 2019] nos serv¨ªa¡±.
En 2019, ¡°nuestro mejor a?o¡±, recibi¨® 8.000 visitas, un 90% internacionales sobre todo. Hasta que lleg¨® la crisis sanitaria. ArtCava apost¨® entonces por la presencialidad ¡ª¡±La base de las peque?as bodegas es la gente¡±¡ª, volvi¨® sus ojos al turismo local y le propuso toda una oferta cultural y gastron¨®mica en torno al vino a trav¨¦s de La Manela, que es wine bar, restaurante y centro cultural con espect¨¢culos de m¨²sica, teatro o magia, creado gracias a una campa?a de crowdfunding que recaud¨® 16.000 euros. ¡°Quisimos ir m¨¢s all¨¢ de poner unas mesas y servir nuestros productos con palitos con queso¡±, declara Enguita.
En opini¨®n de Melchor, el sector ha respondido a la pandemia con innovaci¨®n y digitalizaci¨®n. Abriendo bares de vino en algunos casos; montando tours y catas virtuales para mantener el contacto con clientes confinados en sus casas en otros. Mart¨ªn C¨®dax puso en marcha un Aula del Vino, que sigue manteniendo, y tiene en proyecto visitas a sus vi?edos con realidad virtual. Otazu lanz¨® Lives en Instagram con artistas y catas con el en¨®logo, y ha anunciado que ahondar¨¢ en el proceso de digitalizaci¨®n en su trabajo interno para optimizar el tiempo y automatizar lo que no aporta valor. ¡°Las crisis te hacen ser creativo¡±, sostiene Penso.
Qui¨¦n, c¨®mo y cu¨¢nto
Durante 2021, visitaron las Rutas del Vino de España de Acevin un 57,71% de mujeres y un 42,29% de hombres. Un 32,99% tenían entre 36 y 45 años; un 19,24%, entre 26 y 35 años; un 28,15%, entre 46 y 55 años. Viajaron en grupos de 3,85 personas de media, el 49,95% en pareja y el 28,18% con amigos. Solo el 16,69% confesaron ser apasionados de la viticultura, frente al 20,72% que se consideraban principiantes, y la mayoría, 46,04%, que eran simplemente aficionados. Organizaron su viaje principalmente por internet (un 54,18%), frente al 26,98% que lo hicieron por teléfono y el 15,31% que aparecieron sin reserva. El automóvil, propio o alquilado, ganó por goleada como medio de transporte para desplazarse (en un 90,79% de las visitas). El 34,62% no pernoctaron; del 65,38% que sí lo hizo, un 22,10% se hospedaron en alojamiento rural, un 17,89% en hotel de cuatro estrellas y un 11,57% en hotel de tres estrellas. Visitaron de media 2,04 bodegas.
Los enoturistas de 2021 permanecieron en su destino 2,45 días de estancia media y tuvieron un gasto diario de 173,12 euros, lo que suma un total de 424,14 euros por estancia. El ranking de actividades más populares lo encabezaron las visitas a las bodegas, seguidas de la visita a los pueblos vitivinícolas, el disfrute de la gastronomía local, la compra de vinos y la degustación de vinos locales. Las partidas a las que más dinero dedicaron fueron las comidas en bares y restaurantes (42,87 euros diarios), el alojamiento (39,81 euros), la compra de vinos (35,33 euros) y las visitas a las bodegas (20,83 euros). ¿El aspecto más satisfactorio de su experiencia? Las propias bodegas; el que menos, la señalización turística. Un 99,5% la recomendaría.
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