Lomo de cerdo especiado con calabaza y almendras

Mi padre siempre me dec¨ªa lo de que nunca te acostar¨¢s sin saber una cosa m¨¢s. Ayer, despu¨¦s de publicar una entrada sobre el culto a Ferran Adri¨¤, aprend¨ª tres. Que existe una especie de seres humanos desconocida para m¨ª hasta el momento: los trolls adrianistas. Que hay gente con d¨¦ficit de comprensi¨®n lectora, que confunde la cr¨ªtica a la sobredosis de Adri¨¤ con la cr¨ªtica a Adri¨¤. Y por ¨²ltimo, que todav¨ªa quedan en este pa¨ªs personas sensatas que saben opinar a favor y en contra, y que pueden ver los grises donde para otros no hay m¨¢s que blanco o negro. A todos ellos, gracias.

Para relajar un poco los ¨¢nimos, hoy saco una receta 100% libre de pol¨¦mica, salvo que les parezca mal a los defensores del cerdo o a los seguidores de la Santa Calabaza de Jerusal¨¦n de 'La vida de Brian'. Su ejecuci¨®n no puede ser m¨¢s simple: se marina el lomo con piment¨®n, comino y cardamomo, se rehoga cebolla, se corta la calabaza y al horno. Punto final.

La idea de esta receta surgi¨® tras recibir los restos de un cochinillo asado de la madre de una amiga. Como hab¨ªa que inflarlos para la cena, prepar¨¦ calabaza con especias al horno y a?ad¨ª el cochinillo en el ¨²ltimo momento. La hortaliza, que se impregn¨® de la grasilla del bicho, estaba casi mejor que la propia carne, y el resultado me reafirm¨® en que algunas de las mejores ideas en cocina surgen de reciclar restos.