Las nueve diferencias entre un chino y un chino chino
La calidad media de los restaurantes chinos en Espa?a ha sido hist¨®ricamente mediocre. Y eso siendo ben¨¦volos. Cualquier persona que haya viajado no ya a China, sino a otros pa¨ªses de Europa en los que hay chinos decentes, habr¨¢ podido comprobar que el rancho que se sirve aqu¨ª no tiene mucho que ver con la aut¨¦ntica comida de aquel pa¨ªs, una de las m¨¢s espl¨¦ndidas del mundo. Por suerte, la presencia de una comunidad nativa cada vez mayor ha hecho que aparezcan restaurantes ¡°chinos chinos¡±, que poco tienen que ver con los chinos a secas. Estas son las nueve peque?as diferencias que los distinguen.
1. En el chino encuentras platos que jam¨¢s ver¨¢s en China, sino que provienen m¨¢s de los inmigrantes orientales en Estados Unidos: el arroz tres delicias, los rollitos primavera, el chop-suey, el cerdo agridulce... En un chino chino no tienen de eso, y si lo tienen, es s¨®lo para los guiris como nosotros. A veces cuentan con dos cartas: una A para no chinos y otra B con las cosas buenas de verdad.
2. El chino chino ofrece aut¨¦nticas delicias como sopas de tallarines, jiaozi (empanadillas), dim sum (aperitivos cantoneses), wonton (bolsitas de pasta rellenas), xiaolongbao (bollitos rellenos al vapor), hot-pots (una especie de fondue en caldo) o cualquiera de las mil variedades de comida regional que no se ven ni en pintura en los chinos sin m¨¢s.
3. El chino chino sirve guisos brutales hechos con partes poco nobles de animales, que llevan la casquer¨ªa a una dimensi¨®n desconocida. El chino no se atreve porque no quiere ofendernos con un pulm¨®n de cerdo a la plancha, por ejemplo.
4. En el chino chino comen chinos. En el chino no.
5. El chino no abusa del picante para no molestar. Si est¨¢s en un chino chino cuyos due?os son del sur, las bocas arder¨¢n en el infierno como en el mism¨ªsimo Sichu¨¢n.
6. Los camareros de los chinos hablan un espa?ol m¨¢s o menos decente, y puedes comunicarte con ellos sin grandes problemas. En los chinos chinos s¨®lo suele haber una persona que sabe algo de castellano, y las equivocaciones con lo que has pedido son frecuentes. Pero es parte de su encanto, y as¨ª descubres nuevos platos.
7. Por lo general, la decoraci¨®n de los chinos es espantosa, con sus r¨¦plicas de pagodas y sus lacados omnipresentes. Los chinos chinos son todav¨ªa m¨¢s feos: el estuco veneciano, las sillas forradas de pl¨¢stico y los cuadros imposibles est¨¢n a la orden del d¨ªa. El ambiente general es de decadencia, y s¨®lo entras porque alguien te lo ha recomendado: si no, saldr¨ªas corriendo.
8. Los chinos se llaman ¡°Buda Feliz¡±, ¡°Gran Muralla¡± y similares. Los chinos chinos suelen tener o bien un nombre en chino o uno espa?ol heredado del negocio anterior, tipo ¡°Don Pepe¡±.
9. El chino es barato, y comes entre mal y regular. El chino chino es igual de barato y comes como un emperador de la dinast¨ªa Ming. O casi.?D?NDE ENCONTRAR CHINOS CHINOS?
Madrid es la ciudad en la que hay m¨¢s. El pionero es el de la entrada al p¨¢rking de la Plaza de Espa?a, pero tambi¨¦n cuentan con buena reputaci¨®n el Nihao (Silva, 20), el Hui Fon (Maestro Arb¨®s, 3), el Ohua (Tom¨¢s Garc¨ªa, 3) y el Rey de Tallarines (Plaza del Conde Toreno, 2). Si buscas una hot-pot, est¨¢ el Yu¨¨ L¨¢i (Hermosilla, 101)
En Barcelona hay un chino chino en la calle Ali Bei, n¨²mero 65. No tiene nombre en castellano, es barat¨ªsimo y las sopas de pasta casera son sensacionales. Para hot-pots, una apuesta decente es La Olla de Sichu¨¢n (Dr. Letamendi, 11), y las berenjenas picantes de La Casa del Xin¨¦s tambi¨¦n tienen su fama.
Valencia cuenta con el Bar Sueca (Sueca, 65), muy recomendado por los locales.
En Bilbao, los buscadores de chinos de verdad acuden en peregrinaci¨®n al Le¨®n de Oro, en la calle Fern¨¢ndez del Campo, 8.
Alicante ganar¨ªa el premio al mejor nombre de chino chino con el Mari Carmen, en la plaza de Galicia.
Si conoces alg¨²n buen chino chino, cu¨¦ntalo en los comentarios.
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