Cat¨¢strofes culinarias: especial Halloween
Algo ha salido mal en estas recetas supuestamente festivas capaces de generar inquietud, miedo, asquete o directamente tristeza, l¨¢stima y desaz¨®n vital. Descubre el men¨² de Halloween que te quitar¨¢ ¨Cde verdad¨C el sue?o.
Los americanos se toman muy en serio la fiesta de Halloween, y se curran mucho la decoraci¨®n, los disfraces y hasta la comida. Pero a los que crearon estas recetas en lugar de las musas se les apareci¨® un mono tit¨ª vestido de botones, y en alg¨²n momento pasaron de ser terror¨ªficamente divertidas o simp¨¢ticamente asquerositas a ser terror¨ªficas o asquerosas a secas. Bienvenidos a nuestra particular galer¨ªa de los horrores, sobre la cual pesa una temible maldici¨®n: si la le¨¦is 23 veces a la luz de las velas, en el bosque, desnudos y dentro de un c¨ªrculo hecho con cenizas la noche del 31 de octubre, coger¨¦is bastante fr¨ªo. Palabra de Iker Jim¨¦nez. Y de vuestra abuela.
Cabezas reducidas en sidra
Mira esas caras y dime que no sientes como te invade una profunda angustia. Las tristes dan muy mal rollo, las sorprendidas todav¨ªa m¨¢s y las sonrientes directamente parece que se van a colar en tus sue?os para apu?alarte hasta que te desangres, mientras se r¨ªen hist¨¦ricamente. Para colmo son una idea original de Martha Stewart, AKA la Khaleesi de las Malenis.
Pie de steak tartar con u?as de cebolla
En el plano est¨¦tico el horror campa a sus anchas por esta aberraci¨®n con aspecto de pie de hobbit con u?as con pinta de necesitar urgentemente un tratamiento de Dr Scholl. En el culinario tampoco se queda corto: la carne parece pasada por la m¨¢quina en lugar de picada a cuchillo, y el chorrazo de ketchup que le han enchufado para que parezca sangre le debe dar un sabor dulz¨®n estupendo. Bilbo, lamentamos de verdad que hayas perdido un miembro para esto.
El Necronomic¨®n hecho pizza. La mejor campa?a antigluten. ¡°C¨®masela antes de que ella le coma a usted¡±. Terror en la pizzer¨ªa. ¡°Pagar¨¢s con tu vida por aquella vez que pediste una hawaiana¡±. ¡°Eso te pasa por no usar mozzarella fior di latte¡±. Se me ocurren tantos esl¨®gans para esta imagen que no s¨¦ por d¨®nde empezar.
Bastoncillos usados para los o¨ªdos
En realidad son marshmallows ¨Ctambi¨¦n llamados nubes, jamones, etc¡¨C con dulce de leche o toffee, pero el aspecto que tienen es exactamente el que quieren tener: bastoncillos para las orejas sucios de cera. Simple, realista y repugnante.
Especie de lamprea-alien de parto
Un solomillo de cerdo, un espagueti crudo, jam¨®n o bacon y una cucharada de chili. Suena a jerogl¨ªfico o a prueba de fuego de MasterChef, pero en malas manos se puede convertir en la protagonista de tus peores pesadillas. Prep¨¢ralo, p¨®nselo a tus hijos verdur¨®fobos un d¨ªa para cenar y a partir de ese momento abrazar¨¢n la Orden de la Santa Col de Bruselas con todas sus fuerzas.
Llegado este punto, empiezo a descubrir que una de las claves para que la comida d¨¦ cosica es que tenga u?as. Esta vez se han conseguido simplemente sacando un trozo de la superficie del frankfurt y haci¨¦ndole tambi¨¦n unos cortes para crear la ilusi¨®n de las articulaciones. Pero no os preocup¨¦is, que tambi¨¦n los hay en versi¨®n cebolla, almendra y dulces. La soledad de la salchicha regulera ¨C?adem¨¢s est¨¢ fr¨ªa o me lo parece a m¨ª?¨C sobre un panecillo industrial y el chorrazo de ketchup tampoco ayudan. Ahora no s¨¦ si me da m¨¢s asquete o l¨¢stima.
Hay donuts monstruosos graciosos, otros tiernos con copyright Pixar y la mayor¨ªa de una simplicidad brutal. Y despu¨¦s est¨¢ el de la foto, cuya mirada perdida y sonrisa perturbadora parece decir ¡°me voy a comer a tu perro y despu¨¦s voy a por ti¡±. A partir de ahora vuestro mayor problema con la boller¨ªa industrial no van a ser las grasas trans.
Calavera de jam¨®n
A medio camino entre un vestido de Lady Gaga y un modelo de medicina anat¨®mica, hemos escogido esta calavera recubierta de jam¨®n y algo que parece pimiento de entre todas las de su categor¨ªa por el brutal realismo de sus dientes. Lo que le da un punto inquietante extra, porque parece que no hace mucho estaban masticando un bocata de chorizo. Aunque el Jason de queso cremoso, este bodeg¨®n viejuno y un familiar de Norma Duval tampoco se quedaban atr¨¢s. Hasta los veganos est¨¢n representados. Ha sido una categor¨ªa realmente disputada.
El terror y el asco viven en nuestro cerebro, y muchas veces basta una sola palabra para convertir unos pedazos de carne seca ahumada en repugnantes costras XXL. Corre por ah¨ª una versi¨®n dulce con frutas deshidratadas, pero no da ni la mitad de mal rollito.
En realidad es un c¨ªtrico llamado mano de Buda, pero entre que por una parte se parece a la criatura salida de la imaginaci¨®n de Lovecraft y por otra parece fruto de una mutaci¨®n por escape de plutonio, pues acojona. Si quieres darle miedo a ¨¦l, dile que eres foodie y le vas a meter en un gint¨®nic, ver¨¢s como empieza a mover sus tentaculitos y se larga.
Frutas y verduras asi¨¢ticas en conserva, vegetales, pasta de arroz y tapioca se convierten en partes de la anatom¨ªa de personas y animales, par¨¢sitos y seres por determinar. Como en el caso anterior, aqu¨ª lo que inquieta es un simple cartelito. Pensad en ello, Peque?os Saltamontes.
Gambas, salsa agridulce, una cabeza de porexp¨¢n con cara de tristeza infinita y una venda es todo lo que necesitas para preparar este plato, inspirado en alg¨²n extra de los que cobraron poco en Salvar al soldado Ryan. Por segunda vez, tenemos que citar a la CuquiQueen Martha Stewart como perpetradora de la idea original.
Calabazas vomitando cosas
La mayor¨ªa de las veces es guacamole, otras es queso cremoso y de vez en cuando incluso lo que los americanos llaman mac & cheese. Las calabazas potando comida no solo son un g¨¦nero en si mismas, sino tambi¨¦n un adelanto de c¨®mo vas a acabar despu¨¦s de beberte 200 cubatas y bailar La loba creyendo que pareces Shakira pero siendo m¨¢s como M¨ªriam D¨ªaz Aroca en este v¨ªdeo (minuto 2:20).
?No ech¨¢bais de menos algo de escatolog¨ªa en este post? No os inquiet¨¦is, amantes del cacaculopedopis, que ya llega. De momento en versi¨®n gatuna, pero con tal realismo que cualquier humano que comparta hogar con morrongos ser¨¢ incapaz de hincarle el diente a ese fistro pastelero. Si adem¨¢s se sirve en un recipiente ad hoc como el de la imagen, el efecto es tan realista que sentir¨¢ el aroma amoniacado solo con ver la foto.
Y el toque final de elegancia y saber estar lo pone el autor de este postre a base de mermelada, salsa de caramelo, chocolate y frutos secos. Que de otra manera podr¨ªa resultar muy apetecible, pero servido en un orinal hospitalario ¨Cespero que sin usar¨C y en forma de chorongo flotando en un semil¨ªquido indeterminado... pues no tanto. Me imagino la cara del resto de asistentes a la fiesta cuando sacaron el postrecito.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.
