Las mayores estupideces para adelgazar en septiembre
Dietas radicales, aspiradores de est¨®mago y hasta repelentes a base de tufo de mofeta. ?Hasta d¨®nde estamos dispuestos a llegar para perder las lorzas veraniegas?
En estos tiempos de fractura social, pol¨ªtica y territorial, es dif¨ªcil encontrar puntos de consenso. Sin embargo, en El Comidista, con sudor y esfuerzo, hemos logrado dar con una cuesti¨®n que nos une. Seguro que casi todos pensamos que septiembre es un gran lunes y, tambi¨¦n, que es un primero de enero monstruoso. De hecho, septiembre es un gigantesco uno de enero que cae en lunes y es, en realidad, cuando empieza el a?o.
Si aceptamos la premisa anterior, tambi¨¦n coincidiremos en otra cosa ¨C?doble consenso! ?Milagro!¨C: en los cambios de ciclo, cuando cerramos una fase y empezamos la siguiente, acostumbramos a hacer idioteces monumentales. En clave gastron¨®mica, septiembre ayuda a confirmar esta Regla Fundamental de la Tonter¨ªa Humana. Es uno de los momentos en el que cometemos m¨¢s ridiculeces con nuestra dieta.
Como dice M¨°nica Escudero: ¡°mucha gente empieza el curso diet¨ªstico en septiembre porque en verano se han puesto trofollos como una nutria". "De repente se vuelven conversos ortor¨¦xicos que hacen una mezcla absurda de todas las tendencias nutricionales l¨®quers del momento. Gente a la que a¨²n le asoma ensaladilla chiringuitera por la comisura te arenga convencid¨ªsima sobre dietas radicales que a lo mejor, en sus sue?os m¨¢s disciplinados, podr¨¢n seguir¡ JAM?S¡±.
Suscribo a rajatabla las palabras de nuestra editora jefa. Por eso, con ¨¢nimo de devolver la cordura a todas las personas ortor¨¦xicas conversas, hemos preguntado a nutricionistas de los de verdad por las principales animaladas que cometemos en momentos como este. Si te identificas con algo de lo descrito a continuaci¨®n, h¨¢ztelo mirar.
Confiar en parches, anillos magn¨¦ticos o pulseras adelgazantes
Nuestro nutricionista de cabecera, Juan Revenga, me pone sobre la pista de varios desprop¨®sitos dirigidos a almas de c¨¢ntaro que desean perder peso.
La enga?ifa que me deja m¨¢s picueto son unas pulseras biomagn¨¦ticas adelgazantes con Swarovski Elements ¨Cno las enlazaremos para no darles m¨¢s coba de la necesaria¨C. Esta fea pieza de bisuter¨ªa barata est¨¢ hecha de acero inoxidable, pulido y brillante, aunque no m¨¢s brillante que los cristalitos de Swarovski, que le aportan una elegancia digna de las recepciones en casa del embajador. El brillibrilli no empa?a el hecho de que ¨Cseg¨²n el vendedor¨C ¡°aplican acupresi¨®n en puntos relacionados con el est¨®mago seg¨²n la reflexolog¨ªa y la medicina tradicional china¡±. Vamos, que la pulserita promete dejar hecho una s¨ªlfide a quien la lleve entre tres y cinco horas al d¨ªa.
Si eres una persona discreta y no quieres cegar a todo el mundo con tus Swarovski, puedes adquirir unos anillos magn¨¦ticos de silicona que se colocan en las falanges de los dedos gordos del pie.
Tama?a paparrucha funciona, ehem, porque los imanes ¨Cque deben colocarse hacia abajo¨C estimulan puntos de acupuntura que eliminan la ansiedad y el apetito. Quiz¨¢ le funcione a alguien, el am¨ªmefuncionismo es imprevisible, pero a¨²n sin haberlos usado estoy seguro de que a m¨¢s de uno le generar¨ªan m¨¢s ansiedad que otra cosa. Y, s¨ª, estoy seguro de que quitan el apetito, junto con las ganas de vivir.
Otra soluci¨®n milagrosa para adelgazar son unos inquietantes parches que se pegan alrededor del ombligo. Se supone que queman grasa abdominal gracias a enigm¨¢ticos ingredientes naturales.
El vendedor recomienda llevarlos entre cuatro y seis horas al d¨ªa, seg¨²n el tipo de piel y sin m¨¢s especificaci¨®n, y destaca de una forma inquietante que no pueden usarse m¨¢s de ocho horas. Es curioso, porque al mismo tiempo afirma que no tienen efectos secundarios, y aqu¨ª yo ya me pierdo. Si carecen de efectos secundarios, ?por qu¨¦ no los puedo llevar pegado las horas que me d¨¦ la gana? ?Cu¨¢les son esos ingredientes naturales quemagrasas? ?Me arrancar¨¢n los pelillos de la barriga?
Beber vasitos de agua tibia con zumo de lim¨®n o l¨ªquidos depurativos
En El Comidista ya hemos hablado muchas veces del sinsentido de las dietas detox, pero parece que el mensaje no cala. ¡°Algunas personas se inician en el mundo de la visita nutricional habiendo intentado algo como la dieta del sirope de arce, la ingesta de alg¨²n quemagrasas o la toma del vasito de agua tibia con zumo de lim¨®n en ayunas", asegura la dietista-nutricionista Ana Amengual. "Obviamente, todo esto conduce a esa persona a sentir frustraci¨®n, porque cre¨ªa que era la soluci¨®n a su problema, realiza un esfuerzo o gasta dinero y sin embargo los objetivos o las promesas no se han cumplido¡±.
¡°Las dietas milagro no funcionan", secunda Antonio Ballestero, tambi¨¦n nutricionista y autor de Las dietas engordan. "Da igual la que sigas. Lo normal es que vuelvas al punto de partida despu¨¦s de un tiempo. La realidad sobre ellas, lo que veo en la consulta d¨ªa a d¨ªa, son cientos de personas que fracasan una y otra vez haciendo la dieta de la alcachofa, de la pi?a, Dukan, de batidos sustitutivos o la dieta de la vecina del sexto y que al final acuden a la consulta buscando auxilio¡±.
Probablemente, una de las mayores tonter¨ªas que cometemos al intentar adelgazar es tragarnos cualquier creencia sin base cient¨ªfica en lugar de acudir a profesionales.
Comprar repelentes para la comida
Mikel L¨®pez Iturriaga, padre y madre de esta santa web, ya nos revel¨® hace cuatro a?os la existencia de un producto del que no sabr¨ªa decir si es real o de co?a, genial o est¨²pido.
Parece ser que una emprendedora brit¨¢nica lanz¨® ¨Cen Amazon, temporalmente, no se puede comprar¨C una esencia de mofeta con la que rociar los alimentos que te ponen m¨¢s berraco.
La verdad es que el principio es brillante: si huele a culo de mofeta, no te lo comer¨¢s. Pero siempre hay excepciones: un usuario de Amazon afirma que gan¨® peso mientras usaba este espray porque le gusta el tufo a mofeta.
Ignoro si mucha gente compr¨® esta poci¨®n. Pero vale la pena rese?arla, ni que sea por el bonito peinado de la creadora, tan a juego con el de su querida mascota.
Instalarte un aspirador en el est¨®mago
Llegamos a la idea m¨¢s radical para perder peso de forma presuntamente r¨¢pida y f¨¢cil tambi¨¦n gracias a Juan Revenga.
El Aspire Assist, a la venta en Estados Unidos, es un aspirador que puede succionar hasta un tercio de la comida ingerida directamente del est¨®mago.
Parece muy pr¨¢ctico, pero para que funcione tienen que instalarte una v¨¢lvula que conecte el interior de tu est¨®mago con la superficie de tu abdomen. Una vez hecho, la cosa ya es m¨¢s agradable. T¨² te pones hasta las trancas y cuando terminas de comer conectas tu aspirador a la v¨¢lvula. Los alimentos sin digerir, supongo que de un aspecto parecido a un v¨®mito, se almacenan en un dep¨®sito que, imagino, se podr¨¢ vaciar y limpiar c¨®modamente. Un artefacto infernal, vaya.
?Suena bien? Si tu respuesta es afirmativa considera que un aparato como este, que permite mantener tus malos h¨¢bitos alimentarios con total impunidad, es justo lo contrario a lo que recomiendan los nutricionistas.
?Quieres perder peso? Usa la cabeza
El problema con todos estas dietas y mecanismos para adelgazar es que, en realidad, no tienen nada que ver con una dieta.
¡°La palabra dieta proviene del griego dayta y su significado no es m¨¢s que r¨¦gimen de vida, es decir: h¨¢bito saludable¡±, sostiene Antonio Ballesteros. ¡°En nuestros d¨ªas la palabra dieta tiene una connotaci¨®n negativa. Asociadas a hambre, restricci¨®n, temporalidad, ansiedad y gur¨²s, las dietas se han convertido en el peor aliado a la hora de perder peso y ganar salud. Las dietas engordan en el momento que empiezas algo que sabes que tendr¨¢ un final. Si no te ves comiendo as¨ª el mes que viene, el a?o que viene y dentro de diez a?os, has fracasado antes de empezar¡±.
Es decir, que los milagros y los atajos en nutrici¨®n no existen. Y que ante los excesos del verano, o de cualquier otra ¨¦poca, de nada sirven las reacciones expeditivas y grandilocuentes ¨Cmucho menos los aspiradores de est¨®mago¨C.
Si quieres dejar atr¨¢s las lorzas estivales, t¨®matelo con calma, cambia tus h¨¢bitos y, sobre todo, no apestes tu comida con esencia de mofeta. Que, encima, igual hasta te gusta.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.