Qu¨¦ hay que comer cuando est¨¢s resfriado

Ah, qu¨¦ bonito es el invierno, qu¨¦ bonito es no sudar y qu¨¦ bonito es... ?ACH?S! Vamos, que te ha pillado el fr¨ªo y es posible que te sientas hecho un asquito. Cuando bajan las temperaturas y comienzan los catarros, la leyenda reza que podemos curarlos a golpe de zumos de naranja, caldito y amor de madre. Este ¨²ltimo ingrediente no lo discute nadie, pero hemos querido examinar qu¨¦ hay de cierto en los otros dos, y en otras presuntas panaceas contra resfriados y gripes. Te lo adelantamos: no tenemos muy buenas noticias que darte, pero si has sucumbido t¨² tambi¨¦n a los rigores de invierno, como m¨ªnimo te ofreceremos unos cuantos remedios ricos, ricos para que si no te mejora el cuerpo, al menos se te alegre el alma.

Para empezar, hemos consultado a nuestra dietista-nutricionista de guardia, Raquel Bern¨¢cer, sobre algunos de los mitos que corren respecto a la alimentaci¨®n y los resfriados, y bueno, los resultados han sido un poco se?or Scrooge: ¡°No hay alimentos que prevengan o curen catarros¡±, ataja sin atisbo de duda. ?La vitamina C? ¡°No. Y adem¨¢s, lo que m¨¢s se consume para alimentarnos de ella son las naranjas, cuando los pimientos, las fresas o los kiwis tienen m¨¢s. No sirve, aunque puede ayudar en situaciones de estr¨¦s f¨ªsico, como por ejemplo si corremos un marat¨®n¡±. Mmmmmm, ?y el ajo? ¡°Tampoco. Puede que prevenga el resfriado, pero no tenemos evidencias¡±. ?¨¦?¨¦?¨¦. ?Y la miel? ¡°No hay datos concluyentes sobre que prevenga la tos. Y adem¨¢s est¨¢ formada por az¨²car, por lo que hay que vigilar con su consumo¡±.

Bueno, siempre nos quedar¨¢n los caramelos de menta para despejar la nariz. ¡°No, los caramelos de menta realmente no despejan la nariz. El mentol tiene la capacidad de hacernos sentir frescor y cuando esto ocurre en la nariz el cerebro lo interpreta como que pasa m¨¢s aire por las fosas nasales, pero en realidad no es as¨ª.¡± ?Y lo de la infusi¨®n con whisky o co?ac calentito?. ¡°Las bebidas alcoh¨®licas no son recomendables para combatir ning¨²n tipo de dolencia. El alcohol es un t¨®xico, y recomendarlo para combatir un resfriado ser¨ªa una irresponsabilidad, puesto que su consumo excesivo puede ser un riesgo para la salud.¡±

A estas alturas solo una buena noticia puede salvarnos de la desolaci¨®n m¨¢s absoluta. Toda nuestra fe est¨¢ en manos de un buen caldo. ¡°Muchas veces los resfriados y catarros cursan con fiebre, lo que puede llevar a una ligera deshidrataci¨®n si se descuida la ingesta de l¨ªquidos. El consumo de caldos hechos en casa es, por tanto, una buena alternativa para potenciar su ingesta. Adem¨¢s, el hecho de que est¨¦n calientes reconforta y genera una sensaci¨®n de mejora subjetiva, pero no curan¡±. Concuerda con ella el m¨¦dico de familia Marc Tar¨ªn, quien remarca que ¡°es importante una buena hidrataci¨®n, dadas las p¨¦rdidas de l¨ªquido que conlleva todo proceso febril¡±.

El doctor Tar¨ªn advierte que si estamos acatarrados no es necesario tomar protectores de est¨®mago inhibidores de la bomba de protones -vamos, el Omeprazol de toda la vida- porque, aunque se cree que siempre que se toman antiinflamatorios estos protectores son necesarios, en realidad no es as¨ª. Tar¨ªn tambi¨¦n explica que en estos casos ¡°a nivel alimentario las comidas copiosas no son recomendables, porque es el propio virus lo que te deja KO, y el cuerpo as¨ª lo pide, porque directamente ¡®no te entran¡¯¡±.

El doctor desmonta tambi¨¦n el mito de comer helado ¨Co de tomar l¨ªquidos demasiado calientes- cuando nos duele la garganta. ¡°Las temperaturas extremas son igual de malas, pues no dejan de ser una agresi¨®n f¨ªsica contra una mucosa inflamada. As¨ª que mejor ni una cosa ni la otra¡±. Lo cierto es que en cuanto a los caldos -sin que nos abrasen la garganta- existen diferentes estudios que nos pueden explicar, aunque sea por aproximaci¨®n, por qu¨¦ nos hacen sentir mejor cuando nuestra vida es como una resaca sin alcohol. En uno de ellos, que recibi¨® bastante difusi¨®n all¨¢ por el a?o 2000, Stephen Rennard -un m¨¦dico de la Universidad de Nebraska-, teorizaba que la sopa de pollo contribu¨ªa a aliviar los s¨ªntomas del resfriado al inhibir un tipo de leucocitos que ayudan a luchar contra las infecciones (lo que hace que el cuerpo ¡°crea¡± que est¨¢ mejor).

El doctor Rennard llev¨® a cabo el estudio bas¨¢ndose en la receta de caldo de su abuela lituana, que por lo visto llevaba pollo, cebolla, boniato, chiriv¨ªas, nabos, zanahorias, apio, perejil, sal y pimienta. Ni Rennard ni nosotros mismos estamos muy seguros de por qu¨¦ funcionaba ese caldo, pero apostamos nuestro dinero a que el suyo era el laboratorio que mejor ol¨ªa del universo. El caso es que sus experimentos ganaron cierta notoriedad, y fueron los primeros en lanzar una serie de estudios similares. La universidad tiene incluso una web dedicada en cuerpo y alma al caldo de pollo, receta de la abuela incluida (aunque el estudio reconoc¨ªa que las sopas compradas tambi¨¦n serv¨ªan).

Por ?o?o que parezca, ?ser¨¢ verdad que lo que nos cura es el cari?o con el que nos dan la sopa?. Responde una vez m¨¢s Bern¨¢cer que ¡°el comfort food es un concepto anglosaj¨®n para indicar determinados platos que se asocian de forma muy significativa con relaciones cercanas. Suelen ser recetas tradicionales, relativamente cal¨®ricas y ricas en hidratos de carbono¡±. La apetencia por este tipo de recetas durante momentos en los que no nos encontramos bien f¨ªsica o emocionalmente parece venir por la relaci¨®n emocional que hacemos entre esas recetas y determinadas personas de la familia, situaciones tradicionales o momentos en los que han cuidado con nosotros, sobre todo cuando ¨¦ramos ni?os.

M¨¢s recientemente, un estudio publicado en el American Journal of Therapeutics relaciona uno de los compuestos del caldo, la carnosina, con un aumento de las defensas hacia las infecciones respiratorias, lo que lo har¨ªa bueno en caso de gripe. M¨¢s all¨¢ de que estos estudios necesiten o no todav¨ªa otros que los refrenden y ampl¨ªen, el componente emocional es importante. Aparentemente, el efecto placebo -es decir, el fen¨®meno por el cual creemos que nos sentimos mejor porque pensamos que un remedio funciona- es real en el caso de los resfriados, seg¨²n un estudio publicado en otra revista m¨¦dica, Annals of Family Medicine.

Es decir, que delante de un resfriado o una gripe no nos quede otra que hidratarnos bien, tom¨¢rnoslo con calma, y comer sopitas calientes, que pueden que no curen, pero s¨ª que nos har¨¢n sentir mejor. Sean o no de pollo, porque los fluidos calientes contribuyen a dilatar el flujo sangu¨ªneo y, con ello, descongestionar la nariz. Por eso te proponemos una rica sopa de miso vegana para que, aunque no tengas una abuela lituana como el doctor Rennard, tu alma y tu cuerpo puedan recuperarse igual.